Los vigilantes de la playa (Serie de TV)

Ni por los tíos. Aunque no voy a negar que me alegraban la vista.
Como todas las críticas que leo son de chicos que veían la serie por las chicas, vengo a poner la nota discordante, pues yo la veía porque me encantaban las tramas, los líos, los rescates, las movidas, etc. que vivían sin cesar los socorristas.

Decir que la primera temporada de la serie fue diferente al resto. No basaba su trama en tetas y cabellos de bote, tenía más enjundia, más profundidad. Luego ya derivó en lo que derivó. Que esta serie era mala, pues sí, pero no puedo darle menos de un 6 porque me encantaba y me lo pasé pipa viéndola, durante mi infancia y adolescencia.
También te enseñaba de lo falso de la tv, pues cuando era más cría pensaba que aquellas tetas enormes eran naturales, que aquellos rubios rutilantes eran de nacimiento y que en las playas de California la gente era toda guapa y atlética. Cuando me di cuenta de lo falso de todo aquello, algo cambió en mi interior. Para que luego digan que esta serie no enseñaba nada (útil).

Si bien la serie no es una maravilla, posiblemente en ningun sentido, no era tan mala. Siempre fue una serie muy criticable, pero dentro de lo que cabe tenía su aquel, no sólo eran tías con pechos enormes corriendo por la playa, los episodios tenían más aunque fuesen argumentos muy similares unos de otros.
En definitiva, una serie de entretenimiento demasiado criticada que quedará en muchas retinas. Si bien no era una obra de arte, tampoco era tan pésima como pudiera parecer

Los vigilantes de la playa no nacieron ayer.
Llegué a la playa con mi sombrilla y buscando el mejor sitio se me planta un tiarrón musculoso con bigote y me da el alto.
—Perdone señor, pero usted aquí no puede estar, ¿vale?
—¿Y eso por qué?
—¿Es que no se da cuenta? Fíjese...
—No comprendo... —Dije mirando a los lados.
—Usted aquí desentona. Es usted feo, además, esos bañadores tipo braga ya no se llevan y menos esa panza cervecera, ¿vale? Su presencia no es sostenible bajo ningún concepto. Tiene que irse. Aquí sólo cabe gente joven y guapa como nosotros. Esa sombrilla de propaganda además es horrible y encima viene con la música inadecuada.
—Es Rafaela Carrá... También tengo a Los Manolos...
—¿Practica usted algún deporte? ¿Juega al voley playa?
—No. En verano, no hago más que descansar. En invierno voy de caza.
—¡Encima! Eso tampoco es sostenible. Largo de aquí.
—Mire... Llame a Mitch que es amigo mío y ya veremos si me voy.
Llega el jefe al cabo de un rato y me saluda con una sonrisa. El instructor viene detrás con todo el séquito de mozas socorristas. Ya se ha formado un corro y me miran como si fuera un bicho extraño.
—Hombre, Floid, ya está todo arreglado, puedes pasar pero tienes que cooperar. Estamos haciendo un cursillo de socorrismo y buscamos un voluntario como tú, un pelagre que se adentre en el mar. Luego cuando te estés ahogando vamos, te rescatamos y tratamos de reanimarte delante de todos.
—Ah, muy bien... Pero quiero que sea Pamela quien me haga el boca boca.
—No, imposible, ha dicho que ni loca. Te lo hará mi colega, luego terminará dándote unas buenas hostias en el pecho pero en este caso tú no sales vivo. Queremos concienciar a la gente de lo malo que es beber alcohol, comer grasas, no hacer deporte sostenible, no hacer bien la digestión, el ser un imprudente, no hacer caso de las advertencias, no darse la crema solar correspondiente...
Cogí y me largué a la piscina del hotel a tomar una ración de calamares y un botellín detrás de otro. En realidad, los vigilantes de la playa están bien en sus cometidos aunque tienen poco que contar, pero Mitch es mi amigo y no voy a hablar mal de él ni de las chicas, y será una serie sostenible, pero no ofrece mucha diversidad. Hála, que se jodan.

No he visto todos los capítulos de la serie, pero con que veas unos poquitos te haces una idea de la monotonía de la serie. Es más, en los muchos años que duro la serie (comprensible si comparamos los escotes y el gran porcentaje de jovenzuelos cachondones que la veían.) no creo que los guionistas se esforzaran en crear algo un poco más original que gente guapa corriendo por las playas con ceñidos bañadores y cara de placer. Pero he de decir, que yo peco porque es cierto que he visto algunos capítulos por mi propio pie, sin que nadie me obligara a hacerlo. Eso sí, hace años que no la veo, y creo que tardaré años en verla de nuevo.

Para Carmen Electra y Pamela Anderson no fue más que un encasillamiento que ahora les ha dejado alejadas de buenos proyectos, porque, seamos sinceros: ¿Qué tiene de bueno Barb Wire? ¿Y las de Scary Movie? Por lo menos en la saga Scary Electra parece reírse de sí mismo que nunca viene mal. Y no puedo alejar de mi memoria los momentos en que Joey y Chandler flipaban al ver a cámara lenta las tetazas de las protas (el cámara el más listo y espabilao de todo el grupo) y, si no recuerdo mal, nunca dijeron otra razón por las que le gustará la serie, que no fuera por las mujeres que salían. Ahí está la razón del éxito. Pero es una serie mala.

4.2

Está más que claro que si la serie fue un éxito aquí y en todas partes fue gracias al público masculino que se obsesionó con las bellezas típicamente californianas y le dieron, a esta serie tan insulsa, floja y mal dirigida la audiencia necesaria para poder seguir adelante. Bellezas como Pamela Anderson, Carmen Electra y Yasmine Bleeth (antes de meterse en le droga de lleno) camparon a sus anchas por las televisones de todo el mundo corriendo por la playa en cámara lenta.

La serie no tiene nada de nada. Sus tramas no importan a nadie y como sus personajes son tan soberanamente buenos y poco carismáticos no despiertan interes ninguno. Fracamente; si yo la veía en mi "tierna" infancia era para ver esos hembrones que a cada saltito movian sus neumáticos melones.

Donna D´Erico, Jenna Lee Nolin (que luego le dió por imitar a Jane Fonda haciendo videos de aerobic y body-fittnes) completaban el cartel de féminas que eran sueño humedo de cualquier hombre amante de las pechugas. Planas, aqui no salía ninguna..Mira tú..jajaj

¡Madre mía! Cómo se lo tuvo que pasar Hasselhoff con semejante cuadrilla de jaquillas... Oh...jajaja