Los demonios de la noche

Estupenda película de aventuras la que une a Val Kilmer y Michael Douglas (que ya habían hecho cosas de este género) para contarnos la historia real de los leones de Tsavo.
El relato parece increíble, pero es cierto que sucedió más o menos como nos lo cuentan aquí, y es tan interesante que me extraña que no hubieran hecho un film de esto con anterioridad, quitando el hecho de lo difícil que tiene que ser mostrar a unos felinos creíbles que hagan lo que hacían estos.
Esa es una de las primeras virtudes a destacar. Estos “lindos gatitos” están realmente bien hechos. Solo pueden ser animales reales, animatrónicos o digitales. No he visto ningún “making of”, pero parecen reales a ojos vista, lo cual tendría también mucho mérito por el trabajo de amaestrarlos, pues dan bastante miedo y las escenas de los ataques son muy realistas.
El protagonista es Val Kilmer, que nunca ha sido un gran actor, pero al menos tuvo su época de gloria al tener la suerte de participar en buenas películas como la que nos ocupa. Michael Douglas entra en escena tarde, aunque rápidamente su personaje capta toda la atención. Es un cazador que al parecer no tiene nada más en su vida, y que se toma esta cacería como si estuviera salvando el mundo. Aunque ya tenía aquí sus años, creo que su aspecto encaja muy bien con el personaje. Me ha parecido un guiño nostálgico a sus escarceos anteriores en el género de aventuras con “Tras el corazón verde” y su secuela.
La fotografía de los paisajes africanos es muy vistosa, y como no podía ser de otra forma viene acompañada de una buena banda sonora.
Seguro que tiene más, pero le veo dos fallos como mínimo. Primero, que no se les ocurra prender fuego al mar de hierba con anterioridad. En segundo lugar, al buscar en la “wikipedia” cómo se escribe “Tsavo”, he visto que los leones reales, aun siendo machos, no tenían melena. Claro que, para una película, queda mucho mejor un felino con crines, que da más miedo.
El film es tremendamente entretenido e interesante. Es corto y se hace todavía más.

Los demonios de la noche tiene una virtud, recupera o vuelve a cierto cine de aventuras clásico. Resulta una buena confrontación entre los hombres y la naturaleza (recuerdo que inspirada por hechos reales), cosa que un año más tarde volvió a suceder con El desafío.

El reparto es un muy sólido y cumple con lo que se espera de él y Stephen Hopkins hace el que es sin duda su mejor película. Personalmente, la película tiene altibajos en su ritmo o narración, pero se supera con creces por el espíritu aventurero que desprende (y Jerry Goldsmith tiene mucho que ver con su espectacular banda sonora).

Pese a sus contras, afirmo que se echan de menos películas como ésta. Aventuras puras y duras, sin otra pretensión que eso, con buenos personajes y huyendo de explosiones digitales y públicos adolescente.

Dirigida por Stephen Hopkins -creador de películas y series como Pesadilla en Elm Street 5: The Dream Child, de 1989, 24 (una pasada de serie para quien no la haya visto), Californication (muy buena también)- Los Demonios de la Noche no tuvo muy buena acogida por parte de la crítica profesional. En mi caso la veo desde bien jovencita y no me cansa. No es una obra maestra, pero entretiene y tiene ese aire del cine de antaño. Se criticó muchísimo las <<malas actuaciones>> de sus actores, con lo que tampoco estoy de acuerdo. Hombre, que Douglas ha hecho mejores trabajos no lo pone nadie en duda y Val Kilmer, pues hace de Val Kilmer, no es que sea un actor con muchos registros, pero he visto peores actuaciones en el cine. A pesar de esto, la película obtuvo una nominación a los Oscar a mejor efecto de sonido, pero también una nominación a los premios Razzie al peor actor secundario, Val Kilmer (bastante injusta).
A nivel técnico la cinta no está nada mal. Los ataques no se ven directamente, pero te ponen los pelos como escarpias solo imaginar el miedo que pasaron los protagonistas reales de la historia. Las localizaciones son bellísimas y el vestuario está fenomenal, a cargo de Ellen Mirojnick, que trabaja bastante con Douglas (Atracción Fatal, Instinto Básico). El guion es de William Goldman (La Princesa Prometida) y la música es de Jerry Goldsmith (logró un Oscar por La Profecía, de 1976, pero ha sido nominado muchísimas veces). El elenco de actores es bastante bueno. Dicen que Douglas no quería participar en ella, pero también veo que es uno de los productores, así que a saber. Su papel no existió realmente, pero le da ese punto gamberro que le pega al guion. Val Kilmer, al que ponen como actor secundario, yo diría que es el actor principal. La que hace de su mujer, Emily Mortimer, creo que se estrenó como actriz con este papel.
La historia es bastante simple y creo que está bien llevada. No tiene ningún momento aburrido y te echas unas risas con algunas <<caídas>> de sus protagonistas. Creo que es una hora y media entretenida y que a los que nos gustan las aventuras en África no podemos dejar de verla al menos una vez en la vida.

Cuando era pequeño, junto con las películas de vaqueros, recuerdo que siempre ponían en la tele películas de aventuras ambientadas en África. Los exploradores blancos se tenían que enfrentar a los peligros de la selva, los animales y las tribus caníbales, mientras que los pobres porteadores siempre acababan cayendo por un precipicio. Pero desde hace muchos años este tipo de películas ha pasado a la historia. El cine de aventuras actual poco tiene que ver con aquel, así que se agradece recuperar una película como Los demonios de la noche, no se si la única, pero desde luego una de las pocas aventuras en África rodadas en los últimos años.
El director Stephen Hopkins se dio a conocer dirigiendo la quinta entrega de Pesadilla en Elm Street, y a partir de ahí se especializo en cine de acción con resultados en general bastante limitados, siendo Los demonios de la noche junto con el thriller posterior Bajo Sospecha, lo mas potable de su carrera.
A finales del siglo XIX un ingeniero inglés se traslada a África a supervisar la construcción de un puente. Viajar a África era su gran sueño, pero una vez allí comprueba que los peligros que ofrece este continente pueden ser fatales. Los ataques nocturnos de dos leones siembran el terror entre los trabajadores, paralizando la obra. Ante esta situación él mismo se dispondrá a dar caza a los animales. Para ello contará con la ayuda de un experto cazador.
Poco más que esto que he contado es lo que ofrece la película. No hay tramas secundarias de interés, los personajes están descritos sin grandes matices y se pasa de largo por situaciones, como el conflicto con los trabajadores, que podían haber dado un mayor juego dramático. Con todo esto la película podría haber sido un fiasco considerable. Pero donde Stephen Hopkins acierta es en su lado más puramente salvaje. La presencia de los leones está mostrada de forma inquietante y misteriosa, como si fueran dos fantasmas en la oscuridad. Cada uno de sus ataques resulta verdaderamente brutal, con alguna secuencia tan brillante como la del ataque al hospital. Suya es la película y gracias a ellos Los demonios de la noche consigue mantener el vuelo sin estrellarse en su propia simpleza. También hay que reconocer que África ayuda lo suyo y sirve para que el director de fotografía y el músico, en este caso dos maestros, se luzcan lo suyo. Mas desapercibidos pasan, en cambio, el correcto trabajo de Val Kilmer, y la presencia en un papel importante, pero secundario de un Michael Douglas buscando lucimiento.

Ví esta película el año de su estreno y me dejó un grato recuerdo, no me olvidé de ella. Hace poco la conseguí en dvd y la he vuelto a visionar. Me gusta mucho, la verdad. Val Kilmer no es uno de mis actores peferidos pero aquí está realmente bien, Michael Douglas siempre me ha gustado y he vuelto a disfrutar con él, los paisajes y la fotografía son dignos de elogio y la banda sonora a cargo del genial Jerry Goldsmith buenísima. Y mencionar también a mi adorado Tom Wilkinson, haciendo de despreciable jefe de Kilmer, genial como siempre este actor inglés.
Merece la pena verla, seguro que os gusta.