El manantial

Después de ver esta película, sabes fehacientemente que hay imágenes de la misma que nunca olvidarás: especialmente cuando Patricia Neal descubre a Cooper trabajando en la cantera en un excelente contrapicado y al final que no detallo para respetar el spoiler. Como leía en otra crítica, la atracción entre los protagonistas está magistralmente dibujada por Vidor a través de escenas, miradas, gestos, etc. Esa es la fuerza del cine: contar la historia con la imágen. Las actuaciones secundarias de Raymond Massey y Robert Douglas son también excelentes. Estamos ante una excelente película del Hollywood clásico que en su estreno fué un fracaso y hoy descubrimos como una pequeña obra maestra.

Excelente, magnifica, valerosa película.
Grandes actuaciones de Gary Cooper, Patricia Neal, Raymond Massey. Nos hace ver el mundo desde el punto de vista de la arquitectura, esos valores que se han perdido por miedo a crear nuestras propias obras. Vigorosa en todos sus aspectos música, fotografía, diseño, a veces se nos hace un nudo en la garganta y un escalofrío nos recorre el cuerpo, talvez porque hemos caído en esa simpleza, mediocridad de nuestra desechable vida moderna. Música, películas series TV que duran un mes. Pero con películas como estas recordaremos la importancia de la moral y pondremos nuestro ingenio a disposición de la humanidad.
También nos muestra un leal y grandioso Amor.
Destacable los modernos prototipos de edificios que se muestran y un maravilloso guión del cual talvez habría que destacarlo todo.

"Un edificio no puede copiar el estilo de otro,
igual que un hombre no puede tomar prestada
el alma de otro"

"Trataste de huirle al amor y
tuve que enseñarte a aceptarlo"

"Hombres que veían por sus propios ojos
y pensaban con sus cerebros, hay pocos de esos
y son desconocidos pero mueven al Mundo"

Mucho tiene que aprender la humanidad de películas
como ésta que dignifican al cine como arte.

Magnífica historia y buena película de Vidor aunque nunca logra alcanzar la excelencia de la novela de Ayn Rand. Es cierto que la empresa es harto complicada y Vidor carece de agilidad y fuerza narrativa así como de un acompañamiento musical adecuado. Pero ¡qué diablos! el texto es tan lúcido, reivindicativo y valiente que nos quedamos perplejos ante el desbordante manantial de discursos y opiniones sobre la individualidad del hombre. Ayn Rand nos invita a la reflexión permanente. El inividuo frente a la masa. La escritora de origen ruso nos abre los ojos a usted y a mí para que seamos testigos de los hermosos logros que se pueden conseguir cuando el hombre es fiel a sus ideas, a su esfuerzo y a su creatividad. Es un rechazo absoluto a lo mediocre y un canto a la autenticidad.
No, esta película no la van a poner en colegios ni universidades. No interesa. Como dice el trepa de Ellsworth Toohey "no es manejable". Esta sería una película peligrosa porque podría conseguir de una vez por todas que muchas personas pensaran por sí mismas y entonces rechazarían de pleno los 'Grandes Hermanos', las 'Norias' y las series llenas de violencia y sexo. Sería el fin de los mediocres que nos manejan ocultos tras los políticos. Sería bonito mirarles a los ojos y decirles aquella frase de Oscar Wilde: "El arte no debe nunca ser popular, es el público el que debe hacerse artista". Buff... sólo de pensarlo me entran escalofríos.

King Vidor presenta una cinta de corte clásico cargada de reflexiones ideológicas. La arquitectura sirve como medio para construir un incoherente debate que pretende enfrentar la libertad individual, representada por el arquitecto renovador, independiente e íntegro con un falso colectivismo encarnado por la comunicación de masas, la corrupción y el gran capital. Vidor ensalza al hombre hecho a si mismo y defensor de la honradez el trabajo y el progreso algo que el espectador admira desde el primer momento. Algunos diálogos inconexos personajes incomprensibles como el papel encarnado por Patricia Neal, divagaciones que poco ayudan al espectador tampoco sirven para que el espectador permanezca ni siquiera entretenido. Tan solo aguanta el chaparrón con la esperanza de ver triunfar al protagonista con sus fabulosos proyectos.
Es realmente triste percatarse finalmente que se trata de un panfleto adoctrinador, que todos esos diálogos falsamente intelectuales, que la contraposición de todos los personajes al protagonista son tan solo un medio para construir un diálogo final de ideología ultra liberal y con muy escaso fundamento.

King Vidor adapta una novela de Ayn Rand y logra un retrato impresionante de la fortaleza e integridad de un hombre . El triunfo del individuo, de coraje y el valor sobre la mediocridad de la masa. Geniales Gary Cooper y Patricia Neal en una película inolvidable .