Sweet Girl

Normalmente no me suelo guiar por las opiniones de la mayoría. Hay ocasiones donde las críticas negativas a una película apabullan a las positivas, resultando una nota media irrisoria y unas opiniones terribles. Aquí sucede eso. Lo único que se lee son advertencias de que es mala y un desastre, pero aun con todo quise darle la oportunidad y opinar por mí mismo. Mala idea.

La historia está muy vista, pero además está mal ejecutada. No transmite nada, pese a la temática central que trata de utilizar. Iban pasando los minutos y seguía igual que al principio, totalmente indiferente. En ningún momento atrapa ni cautiva, es como que le falta vida. Los compases no ayudan y algunas secuencias todavía menos. Suelo decir siempre que lo mínimo exigible es que entretenga, pero aquí ni eso consigue.

Jason Momoa es el cabeza de cartel. A estas alturas sobra decir que es meramente ilustrativo. De todos es sabido que, a veces, los responsables de una película contratan a un actor o actriz de renombre para meterlo ahí y que la gente acuda a verla. Es un truco muy visto, que se lo digan a Nicolas Cage o a Bruce Willis últimamente, pero se ve venir. Aquí le ha tocado a Momoa, pero si imaginamos esta cinta sin él ahí, la nota sería muchísimo peor, si cabe. Que no os engañen.

Otros de los factores que salen mal parados son la puesta en escena y las coreografías. Son terribles, tanto unas como otras. No sé si se debe a la falta de experiencia o al mal hacer en sí mismo, pero el resultado es tosco y pobre. Ninguna de las escenas de acción, por llamarlas de alguna manera, se ven creíbles ni funcionan en pantalla.

En resumen ''Sweet Girl'' es una película que no merece la pena y cuyos fallos y defectos afloran enseguida. Estamos, sin lugar a dudas, ante una cinta de sobremesa de esas que se emiten los fines de semana por la tarde en televisión. Solo sirve para rellenar el catálogo, en este caso el de Netflix. Es un producto pobre y del que es mejor huir. No la recomendaría en absoluto.

Lo mejor: No tiene nada realmente bueno.
Lo peor: Todo, en general.

* Un 2 *

Pues para mí ha sido pasable, es cierto que el papel no le pega a Jason Momoa y el ritmo de la película decae por momentos pero hay un giro hacia el final de la película que yo no me lo esperaba y que me sorprendió bastante. No es un peliculón pero tampoco es la peor de Netflix, de hecho estaba entre las más populares

Estamos aparentemente ante un producto Netflix clásico del genero venganza. donde poderes ocultos son causantes del dolor de personas anónimas que deciden buscar venganza. Hasta ahí nada nuevo, ni tan siquiera la presencia de Jason Momoa en el film como protagonista. Interesantes escenas de acción salpican una trillada trama que ya hemos visto muchas veces....hasta el momento en que se cumple 1h y 20 minutos de metraje, Ahí el film da un giro de 180º y cambia, sorprendiendo al espectador, al menos a mi, logrando que el resto del film me interese más, y que la acción que acontece a partir de ese instante cobre mucha más emoción o intensidad. Un giro y tenemos algo distinto, fresco y lo suficientemente interesante para que este film de 102 minutos de metraje real no sea "uno más" en la larga lista del films de serie B que tienen una trama de venganza parecida o similar. Solvente film que realmente no entiendo que no se valore más. La acción, las luchas, logradas, el uso del peligroso cuchillo Cyclone todo un detalle que al profesional no le pasará inadvertido. buen film, sin pretensiones sin duda, pero buen film.

¿Qué tenemos aquí? Otra vendetta con persecuciones en la que, pese a que en su prolegómeno la cosa se direccione hacia la denuncia de malas praxis en las grandes empresas médicas y farmacéuticas, al final se queda en eso, en un drama preliminar casi telefílmico que precede a Jason Momoa subiéndose al carro del justiciero a la fuga repartiendose tareas de vendetta junto a una Isabela Merced ('Dora la exploradora') a la que, por motivos que no voy a revelar, no le habría perjudicado -ni a ella ni a la película, más bien todo lo contrario- asumir el protagonismo 'material' desde mucho antes de un determinado giro argumental inducido por una trampa innecesaria.
Ah sí, ¿lo de Isabela Merced? Parecer ser que, a la semejanza denominativa del genio de Minneapolis, se trata de la artista anteriormente conocida como Isabel Moner (ella y sus managers sabrán si le compensa o no).
Lo dicho, un relato al uso de venganza tan convencional en su fondo como torpe socorriéndose en artimañas fallidas para tratar de huir de la previsibilidad que únicamente sirven para marear la perdiz.
De no jugar al despiste habría quedado un actioner femenino molón.
Para matar el rato mientras Moner (perdón, Merced) mata a los malos.

El resto es todo previsible y maravilla como después de un golpe que estrella tu cabeza contra la pared o una patada en la cara, se ponen de pie como el que pide la cuenta después de un café...
La película es floja, las peleas son poco creíbles y aguanté porque me dormí 10 minutillos, por eso llegué al final.