El buen nombre

"El buen nombre" es una película bellísima sobre el amor y los contrastes entre culturas, desgraciadamente poco conocida.
Técnicas sencillas y reparto desconocido conforman una obra preciosa llena de momentos imborrables.
Se trata de uno de los mejores trabajos de la directora india Mira Nair, probablemente el más bello. Porque la historia de esta película llega al corazón.

Si no has visto la película es sencillo recomendarla o no porque se trata contar la vida de una pareja recién casada de hindúes de Calcuta que se van a vivir a Nueva York.
La historia narra más o menos 30 años de la vida de esta pareja, de sus hijos, basada en una conocida novela.
Es una película previsible, lenta, larga, pero a mí no me importó, ese choque de culturas me mantenía en la película, seguía con interés a sus personajes. Pero comprendo que hay un público al que estas historias..., le tiene que aburrir soberanamente. Es cuestión de gustos.

Adaptación de una novela que ganó el premio Pulitzer en el año 2000. Encantadora historia de un joven matrimonio bengalí que emigra de Calcuta a Nueva York, donde tienen dos hijos, un varón y una mujer. El crecimiento de los niños, su adolescencia y adultez, los viajes de visita a sus orígenes y las peripecias de una familia que compatibiliza dos culturas resulta en bellas imágenes de ambos mundos, incluido el Taj Mahal en Agra, con actuaciones estupendas y dirigida por Mira Nair, una mujer con una experiencia similar. Personajes entrañables, absolutamente para ver.

Clint Eastwood, por ejemplo, por citar a un grande. Fusilado. El gallo no acaba de cantar, no le da tiempo. Y si al padre lo interpreta Kevin Costner, por poner otro caso, le arrancan las uñas con un cortafríos. Le dan más porrazos que a Clooney en Syriana. Pero como la peli la firma una señora india... Pues nada, muy bonita, muy tierna, hala.

Desde hace algún tiempo, parece que cualquier producción que no sea íntegramente concebida en el seno de los Estados Unidos o en el Reino Unido, tiene un voto extra de confianza para los intelectuales. Y si proviene de algún país de cultura oriental, cuenta con una pedrea de cinco votos extras. Es como si nos sintiéramos avergonzados de ir al cine y ver Misión Imposible III y nos halláramos en la obligación moral de zamparnos, por caridad, cualquier película asiática o sudafricana. Pues existen títulos asiáticos muy interesantes, qué duda cabe, pero no todo es bueno. Y esta cinta, "El buen nombre", es un coñazo de tomo y lomo. Es un trancazo que no hay quien se lo sacuda de encima. Una ñoñería absurda y manida que de previsible no tiene nada, absolutamente nada, por una sencilla razón: no hay nada que prever.

Es una historia preciosa. Lo que más me gusto fue el principio, la vida en la India, sus colores.
Me sorprendió bastante el papel que se le otorga allí a la mujer, no me parecieron nada machistas, al contrario, él es muy comprensivo y tierno con su mujer, también me sorprendió que no fueran musulmanes (a mí no me lo parecieron).
Yo conozco un chico indio y nada que ver, es muy machista; será según la zona, porque la India es muy grande.