Jasón y los argonautas

Habré visto esta película del orden de cincuenta veces y puedo asegurar que estamos ante una obra maestra desde el inicio hasta los créditos finales.

La historia es magnífica, narrando el viaje de Jasón a la Cólquida en busca del vellocino de oro junto con los habitantes de Argos. Multitud de personajes fantásticos aparecen durante el viaje, como Talos, Ékate, la Hidra, las caninas...

Los efectos especiales son increíbles, prefiero a día de hoy un stop motion perfectamente ejecutado y al servicio de una buena historia que una historia mediocre al servicio de grandes efectos digitales carentes de alma.

Los actores están a la altura. Si se hiciera hoy día en vez de a este Jasón maduro y de fuerte carisma, pondrían a un musculitos de cartón piedra.

Mención aparte merece la banda sonora. Una de las mejores bandas sonoras de la historia. A día de hoy y después de una década sin ver la película todavía tarareo seis o siete melodías inolvidables de esta película. Las mejores para mi gusto: Jason Prelude, Temple Dance, The Feast, Hera Speaks, Medea's Ship, The Oak Grove _ The Ascension y The Stolen Fleece _ The Teeth.

En resumidas cuentas, se trata de una excelente película de aventuras para ver en familia.

Según la mitología griega hollywoodense, Jasón será el futuro rey del reino de Tesalia, pero antes tendrá que dar un viaje en donde debe de vencer una serie de mágicos obstáculos y finalmente encontrar un tesoro. En su recorrido luchara con seres fantásticos salidos del cielo, debajo de la tierra y del mar.

El film está lleno de notables efectos especiales, que sumerge al espectador en un mundo fantástico lleno de aventuras, para su época fueron sumamente extraordinarios, la escena de los esqueletos es un clásico. Una imaginación sin ataduras es lo que posee el maestro de los efectos especiales Ray Harryhausen, su último film como animador cinematográfico fue “Clash of the Titans’ (1981).

El film ha perdurado a través del tiempo por sus fieles fanáticos que no lo dejan morir en el recuerdo. Este film ha sido de inspiración para muchos cineastas, entre ellos están Peter Jackson, James Cameron, George Lucas y John Landis, según ellos mismos han expresado. ¿Qué lejos estaban las computadoras? La película tuvo un presupuesto de $1 millón.

Deliciosa cinta de aventuras basada en la mitología griega en la que Jasón vivirá alucinantes hazañas acompañado de sus valientes argonautas mientras viaja a la Cólquida en los confines del mundo en busca del vellocino de oro. Es una película mítica que vi innumerables veces cuando era pequeño y que me sigue encantado como cuando la vi por primera vez. Para mi gusto no ha perdido un ápice de atractivo, los efectos especiales son muy ingeniosos y conservan toda su vigencia, la música de Bernard Herrmann es fastuosa y acompaña perfectamente las aventuras de una tripulación entrañable entre los que se encuentra el mismísimo Hércules. Jasón y los argonautas es puro cine de aventuras, un entretenimiento que aún hoy en día perdura y supera con creces a las nuevas versiones que se han hecho sobre temas similares como Furia de titanes.

Una excelente aventura que nos cuenta la historia de Jason y los argonautas, en su travesía para conseguir el vellocino de oro.

Una gran producción y dirección que mantiene al film a un nivel difícil de sostener y que muchas de las producciones actuales no logran. Además cuenta con una buena música y una fotografía y escenarios espléndidos. Y para terminar unos efectos especiales, que sin computadoras o alta tecnología, son de una calidad extraordinaria.

Así la mitológica aventura es recreada, llena de acción y emoción. Nota 8,5 de 10.

Fabulosa, ingeniosa, entretenida, emocionante, atrevida, dinámica, revolucionaria, rompedora y memorable producción de aventuras que reúne lo mejor de la espada y brujería con los dioses como testigos del reto de Jason. Dioses, monstruos, profecías, valor, terror y emocionantes combates se dan cita en un producto que ofrece un acertado y colosal entretenimiento que pase el tiempo que pase, no queda desfasado.
Cuenta con unas correctas interpretaciones y unos fabulosos efectos artesanales, apoyados en la técnica de captura en movimiento, con la labor de todo un artesano y maestro del género, Ray Harryhausen.
Mantiene el interés suscitado inicialmente, ofreciendo un entretenimiento con el que disfrutar y dejarse llevar por la fantasía hecha realidad.