Colmillo blanco

Amable adaptación de la novela homónima de Jack London en la que lo más reseñable son los impresionantes paisajes en los que transcurre la acción y el trabajo de los entrenadores de perros.

Al tratarse de una producción Disney se suavizan los pasajes más violentos de la trama como los relativos a las violentas peleas de perros por ejemplo.

Un joven Ethan Hawke encarna al protagonista de esta clásica historia sobre la amistad entre un perro huérfano y un muchacho bondadoso que sueña con hacerse rico buscando oro en los helados parajes del Yukón.

El nulo desarrollo de los personajes hace que el resultado final sea bastante superficial. Yo la vi en su día en el cine y la tenía completamente olvidada. Klaus María Brandauer está muy desaprovechado.

La acabo de ver y me pareció aburrida y desinteresante, la historia no llegó a engancharme en ningún momento ni los personajes ni nada, lo único que me gustó fueron los paisajes, los perros y lobos y la parte final que me pareció muy bonita y conmovedora. Lo otro que me gustó es la manera en que entrenaron a todos esos canes. De resto larga y aburrida.

Disney, benefactor de ilusiones eternas, nos acerca la obra del escritor Jack London para reblandecer nuestros corazones con una historia de amistad sincera y no menos atípica. Todo comienza cuando el alma noble de un joven sin mucha experiencia y el de un perro lobo se cruzan para forjar una amistad tan diferente como inquebrantable, de dos seres que parten de un mismo punto de desgracia y encuentran la manera de ayudarse mutuamente.
La leyenda del esclavo Androcles y el león con su espina clavada en la patita alcanza su aspecto más tierno, puesto a disposición de la amistad real del hombre y la bestia, sin trucos, sin falsas contraprestaciones. Solo inocencia y algún que otro resbalón comprensible por el camino.
La acción nos pone en Alaska, bella e inhóspita mediadora, al son que toca la fiebre americana del oro, es también artífice de que varios contrastes tengan lugar. Tras el convergente símil, la bisoñez y la veteranía también juegan una parte importante: Ethan Hawke, no muy alejado todavía de su ingenua rebeldía que apreciamos en 'El club de los poetas muertos' y Klaus Maria Brandauer como una especie de medio mentor medio protector, son la otra amistad incondicional nacida de la ambición, fraguada con tesón. La naturaleza salvaje se rinde a la humana, o puede que sea más bien al revés, ya que, malo o bueno, los dos tipos de corazones que rondan en esta historia de aprendizaje permanente para el bueno de Jack Conroy, dependen de lo que ella tenga a bien. La diferencia de resultados, será lo que nos conmueva.

Antes que nada decir que no he leído el libro y que por tanto mi visión de esta película no se basa en la comparación con la historia original, que sé, que le dará mil vueltas. Supongo también que la baja media que tiene este film es por eso mismo, porque la gente que ha leído el libro siempre se decepciona con las adaptaciones al cine.

Pero si nos olvidamos del libro, o no lo hemos leído, esta película, por muy infantil y simple que pueda parecer nos resultará como mínimo entretenida; y si encima te gustan los perros y los lobos (como es mi caso), pues seguro que más de una vez te conmoverá. Y es que si yo le pongo un 8 a esta película, es por la actuación del perro lobo protagonista, quien en mi opinión actúa mejor que muchos actores de Hollywood famosos. No sé a vosotros pero a mi este perro lobo fue capaz de hacerme nudos en la garganta, emocionarme, enternecerme, y hasta hacerme soltar alguna lágrima, y todo eso sin decir una sola palabra, sólo con miradas, gestos, etc... La fuerza expresiva que tiene es sorprendente.

Me ocurrió exactamente igual con el lobo "calcetines" de "Bailando con Lobos", cada vez que aparecía, por alguna razón se me hacía un nudo en la garganta. Supongo que estos animales tienen una forma de expresarse que va más allá de las palabras, y que sólo algunos podemos captar.

Resumiendo: Aunque seguro que como adaptación del libro esta película deja bastante que desear, y es mucho más infantil y poco profunda. Sólo por ver las escenas del perro lobo merece la pena.

Todo el que haya tenido un perro como amigo, o que simplemente le gusten, sin duda disfrutará mucho con esta película.

Es un insulto a la novela, Colmillo Blanco, la novela, no es una historia para toda la familia, es violenta y cruda como la naturaleza misma. Al protagonista se lo han sacado de la manga, la búsqueda del oro también, y los personajes mas importantes de la novela, Smith, Castor Gris son simples segundarios, inconcebible, y para lo poco que aparecen no respetan en nada al personaje de la novela.

Una decepción absoluta, para esto que lo llamen "El lobo amigo del hombre" o lo que sea, pero no mancillen el nombre de una novela tan memorable para venderla mejor.

Incluso dejando a parte la basura de adaptación que es, como producto independiente es mala con ganas.