Winchester: La casa que construyeron los espíritus

Original película, por la época y lugar en el que transcurre la acción.Cumple con unas interpretaciones de sus
actores correctas y donde destaca es en el aspecto técnico, con una fotografía espectacular y los montajes tanto de
imagen como de sonido realmente buenos. Los sustos dosificados, también están a la altura.Grata sorpresa.
Vayan a verla .

La Mansión Winchester, lugar donde residió Sarah Winchester, la viuda del creador de los famosos rifles es considerada el lugar más embrujado de los Estados Unidos, construido por la mujer a pedido de las almas de las víctimas de los rifles, que encontraban en la casa y sus más de 160 habitaciones un lugar donde habitar después de su muerte.

Los otros socios de la compañía Winchester contratan al doctor Eric Price (Jason Clarke) para que evalúe y extienda un certificado médico que indique que la viuda Winchester ha perdido la razón, y así poder tomar control del 51% de las acciones que ella posee dentro de la compañía.

Price, un médico psiquiatra con una fuerte carga de culpa que lo acongoja desde la muerte de su esposa y que sobrelleva tomando láudano, se instala en la mansión y convive con las personas que habitan la casa, además de los muchos empleados que día y noche trabajan sin cesar, teniendo desde antes de su primera entrevista con Sarah Winchester un encuentro con un fenómeno paranormal para él inexplicable.

La premisa y todos los antecedentes prometían una película de terror con calidad y una historia interesante, teniendo una protagonista de lujo como Helen Mirren, la película de los hermanos Spierig cuenta con un primer tercio que parece cumplir con las expectativas, desde la presentación de la imponente casa, la aparición de la señora Winchester y un clima que sugiere que momentos muy terroríficos se presentarán en las misteriosas habitaciones y pasillos de la mansión.

Sin embargo, esto dura poco ya que de ese inicio prometedor pasamos rápido a una serie de momentos que abusan de los golpes de efectos para intentar hacer sobresaltar al espectador, presentando todos los lugares comunes posibles de las películas del género, hasta llegar a un tramo final poco climático y resuelto de una manera torpe.

Así, los realizadores de la reciente ‘Jigsaw’ se van por el camino más sencillo, el de las obviedades y sustos fáciles, sin atreverse a profundizar ni un poco en el tema de las armas, y desaprovechando un escenario imponente y una actriz del tamaño de Helen Mirren, dejando pasar la oportunidad de realizar lo que pudo ser una inolvidable película de terror.

http://tantocine.com/la-maldicion-de-la-casa-winchester-de-the-spierig-brothers/

Otra vez me engañan con lo de «terror». Qué difícil es encontrar terror del bueno, del serio. Pero lo seguiré buscando.

«Winchester» ya te echa para atrás desde los primeros cinco minutos. Estoy harta de que siempre, siempre, siempre las películas empiecen con una especie de introducción con la que se pretende dar una idea general sobre lo que está pasando, lo que va a pasar, dónde y quiénes. ¿Por qué? ¿Para qué? Encima, nos meten los típicos recursos del terror estúpido: las caras de susto porque sí, los pasillos silenciosos, la musiquita inquietante... Repito: ¿para qué todo esto?

Tengo que volver a reiterarme en lo que comenté en otra crítica sobre una película del género: rodemos el terror como si no lo fuese. Si «Winchester» en vez de empezar con posesiones, mujeres enlutadas y repullos, lo hace con la visita del abogado a casa del protagonista para ofrecerle el empleo, al menos la película hubiera comenzado con buen pie, te hubiera creado intriga real, te hubiese interesado saber qué está pasando y por qué. De la manera en la que está, ya sabemos que hay fantasmas, que hay un peligro, que la anciana protagonista tiene razón y lo que va a pasar con la sobrina y su hijo. Así que, ¿a mí qué me importa ya nada?

Esto es un ejemplo claro y práctico de cómo no pasarse con las explicaciones y exposiciones, pero «Winchester» la verdad es que está mal concebida casi en su totalidad. Sí me han gustado la ambientación y el vestuario, con una fotografía de colores intensos que sería aprovechable para otro trabajo. El guion de «Winchester» es una bobada absoluta en el que los fantasmas demuestran ser unos bobos perdidos con unas motivaciones absurdas que perfectamente podrían encajar en cualquier asociación contra las armas de fuego de los Estados Unidos, que parece que ha financiado la película. El comportamiento de los personajes de nuevo no guardan coherencia con lo que sucede y al final todo es un batiburrillo de fenómenos paranormales que llegan a dar hasta risa.

Vaya fantasmones.

Basada en la historia de la mansión Winchester, situada en California, a 50 millas de San Francisco. Esta mansión victoriana fue construida por la heredera del creador de los rifles Winchester, Sarah Winchester, y su convicción de que los fantasmas la acosaban la llevó a construir más de 160 habitaciones, escaleras que no llevaban a ninguna parte y puertas que al abrirse descubrían un muro... todo con la intención de esquivar a los seres del otro mundo.


No conocía nada de esta historia, vi un poco que se trataba de una las casas más embrujadas en Estados Unidos así que podríamos tener un peliculón.

A los días me entero quienes son las personas que lo iban a dirigir: Los Hermanos Spierig (Peter y Michael). De ellos me toco reseñar el año pasado la última entrega de Saw que me pareció entretenida y destaque que iba con un ritmo muy rápido aunque tiene un muy confuso final. Lo recibí positivamente.

Después llego el tráiler que no me convenció y mi postura iba cambiando. Al igual que Operación Red Sparrow, llego el 1 de marzo con críticas muy destructivas, diciendo que era aburrida, lenta, etc.

El viernes 9 llego el momento con cero expectativas de visionarla en la sala, pero antes de ir decidí ver en internet la duración: 99 minutos… había que tener esperanza… NO OCURRIÓ.

Primero podría comenzar con el guion. Tenía una gran potencia para hacer una buena e interesante película pero lamentablemente los guionistas deciden ir por la ruta absurda, soporífera y más predecible posible. Haciendo situaciones de sobresaltos muy exageradas. Hacían cosas muy repetitivas, es como si estuviera viendo un corto de 3 minutos diez veces seguidas.

Si el guion era muy malo tal vez las actuaciones lo salvarían… TAMPOCO. Aunque en el elenco este Helen Mirren no hace lo suficiente para salvarla.

Jason Clarke, el protagonista principal, como un doctor es muy molesto y odiable. A él lo tenemos que seguir… y no me convenció. Fue una mala elección. Tiene su propia subtrama que nunca me llego, nada interesante.

De los demás no voy a mencionar porque no hace falta, ningún papel me fue convincente.

El guion y las actuaciones no son buenas… pero tal vez la dirección la salve… TAMPOCO.

Los Spierig no supieron hacer un buen trabajo en la cámara, destaco algunos planos, disfrute ciertas partes, pero la mayoría de la calidad es muy para televisión.

Pero hay un punto a favor (y es la razón de que pongo de nota un 1) y es que el diseño de producción (la vestimenta, los carruajes, todo) está muy bien hecha, esa es la única parte en la que hay profesionalismo. Pero esto está detrás de todo lo que hay ahí adelante (una porquería de película).


En resumen, La Maldición De La Casa De Winchester tenía en sus manos una premisa interesante… pero el desarrollo es horrible, aburrido y olvidable. Es una de las peores de este año y, probablemente, una de las peores de todos los tiempos. TODO ESTA MAL HECHO, no logre rescatar nada, salvo por el diseño de producción. Este estreno es muy parecido a La Crucifixión (2018) que al igual que esta tenía una historia basada o inspirada en hechos reales muy interesante pero con un resultado desastroso.

Yo no la recomiendo, pero si les interesa el cine de terror, concurran a verla y ‘’asústense’’ un rato pero después cuando la vean se olvidaran de ella para siempre.

Nota: 1/10
Rojo, Pulgar Abajo.

Parece la típica película de sobremesa de antena tres con la diferencia que las de antena 3 suelen ser al menos entretenidas.
Es aburrida Absurda y desearas que acabes pronto o incluso levantarte del asiento e irte sin llegar a ver el final.
Una tomadura de pelo.