Campeón (Secretariat)

“Secretariat” es una buena película de Disney, los filmes basados en hechos reales siempre tienen el plus de ver el desarrollo de la misma, versa sobre la historia de un excepcional caballo de carreras, se desarrolla a mediados de los 60 y principios de los 70, la producción a mi criterio es cuidada. La dirección es correcta.
Respecto de las actuaciones unos correctos John Malcovich y una segura Diane Lane.
En este tipo de películas hay poco lugar para las sorpresas uno se imagina como va a ser la acción y quiere que las cosas salgan así, no olvidemos que el cine es un lugar para soñar despierto y los norteamericanos lo entienden a la perfección.
Es una historia que puede ser disfrutada en familia, un sábado por la tarde, con palomitas de maíz. Intelectuales y cultores del cine debate abstenerse.

Para ver esta película tan aburrida me veo un documental, poco más que decir, a muchos le gusta la historia el trabajo del animal y tal y tal, pero esto es una peli y debería de entretener no solo informar de un acontecimiento para eso nos vamos al canal historia, es todo bastante predecible no consigues meterte en la película más allá de los 10 primeros minutos.

Lo mejor: el caballo que no tiene culpa de nada

Lo peor: han hecho que una peli sea mas aburrida que un documental y demasiado larga

Bonita historia Disney sobre Secretariat, el caballo que en los 70 asombro al mundo hípico con su poderío (lograr la triple corona tras 25 años sin hacerlo ningún caballo), protagonizada en sus principales papeles por una muy guapa Diane Lane haciendo un buen trabajo y un John Malkovich en modo piloto automático, y con buenas escenas (al menos para un no muy versado en este mundo de la hípica como el que esto escribe) del caballo en acción, eso es todo, lo cual al menos para mí resulta ligeramente decepcionante, ya que a pesar de ser Disney la encargada de contar una historia que con parecidos componentes ha demostrado a lo largo del tiempo ser capaz de conmover, entretener y hasta divertir en multitud de ocasiones, de contar con un elenco actoral de verdadero lujo (también andan por ahí asomando la gaita en papeles sin mucho peso, James Cromwell y Scott Glenn) , y especialmente de ser un director como Randall Wallace el encargado de hacer correr la trama (a priori tal combinación me hacia esperar algo de esa atmósfera de sus 2 ya lejanos en el tiempo anteriores buenos trabajos como director – "El hombre de la máscara de hierro 1998" y "Cuando éramos soldados 2002" -, y porque no, de sus pelotazos en la escritura "Bravehearth 1995" y "Pearl Harbor 2001"), la película se deja ver, si, es cierto que entretiene y es una producción Disney en toda regla, pero le falta magia y ni de lejos llega a tocarte la fibra como debería dado los mimbres anteriormente mencionados con que cuenta.

En resumen, más o menos interesante y entretenida para todo aquel que ignore de antemano la historia del caballo (imagino que la impresión subirá varios enteros para el que la conozca), pero bastante por debajo de esa otras 2 referencias Disney con míticos caballos de por medio, la simpática "La historia de Seabiscuit 1949", y la buena "Seabiscuit 2003" (aunque en esta solo figura como distribuidora a través de su "Buena Vista International").

Sigue en spoiler por falta de espacio:

El dueño de un importante stud de caballos, enferma. Recae entonces, la responsabilidad, en la hija de llevar el negocio adelante. Pero la mujer es totalmente inexperta y parece que las sombras se ciernen sobre el futuro empresario. Pero como es una persona empeñosa y tesonera, decide lograr el asesoramiento de un viejo entrenador, que ya retirado, al principio no ve con buenos ojos que lo quieran apartar de su actual ruta, que lo tiene como aficionado al golf. Por fin es persuadido y, al ver la premura con que el potrillo recién nacido de una yegua de la dueña se pone en pie, le parece un signo auspicioso. Empiezan los primeros escarceos y triunfos aunque en carreras de poca monta. Los logros llevan a su propietaria a la ambición de que se bata en grandes eventos y que, en definitiva, logre batir un record histórico, insuperado hace tres décadas, de ganar tres derbys seguidos. En esa causa, encontrará importantes obstáculos...La actuación de la protagonista es convincente, transmite bien el temperamento decidido y obstinado de la protagonista, Malkovich también compone un personaje agradable, el ritmo es más o menos razonable. Sin decir que sea una película fuera de serie, hay que decir que es bastante sobria y bien equilibrada en sus componentes, con dosis dramáticas bien ajustadas y deja un buen recuerdo.

Como acostumbro antes de aporrear el teclado para dejar mis impresiones por aquí, es buscar algo de información acerca del hecho en cuestión y mucho más cuando de algo que ocurrió en realidad se trata.

Si el título hubiese sido...el mejor caballo de toda la historia, creo que tampoco estaría exagerando. Os voy a desmenuzar un poco la importancia de lo que realizó este grandioso caballo sin caer en el aburrimiento. A los amantes del fútbol si os digo que lo mejor de la temporada es hacer un triplete, seguro que lo entendéis perfectamente. Pues es tal la hazaña realizada por este animal, que no sólo pulverizó récords que no se movían en 25 años, sino que después de su gesta, han pasado 43 años y sus récords siguen intactos. Ahí es nada.

Pero Randall Wallace profundiza más en la historia humana, que en la deportiva. ¿Por qué se preguntarán muchos si tenía a huevo explotar el desarrollo de forma tan clara? Por cuestiones de fe.

Pongamos nombre a cada cosa. Nuestra protagonista se llama Penny y su padre tiene una granja donde cría caballos, su fuerte ha sido siempre las yeguas, las cuales acuerda preñarlas con importantes sementales y con el tiempo, por medio del lanzamiento de una moneda, se escoge la cría de las yeguas a parir. Con la muerte de su padre, lo más rentable económicamente es vender la granja. Y más cuando Penny y su hermano tienen una vida asentada y tranquila y no tienen necesidad de problemas. Pero a Penny le afecta algo, el sueño de su padre, ganar el derby de Kentucky y a ello se pone. Negocia emparejamientos, donaciones y otros planes deportivos para adquirir un buen caballo y su instinto la lleva a elegir a Secretariat, quien era la segunda opción para el ganador de la moneda.

Las condiciones físicas de este caballo, su perfecto entrenamiento y su gran cuidado, lo llevarán a dejar escrito su nombre en letras de oro en el precioso mundo de las carreras de caballo. ¿Cómo ocurrió todo?

Pasen y disfruten, yo ya lo he hecho.