En la cuerda floja

Biopic sobre el exitoso cantante de música country Johnny Cash.

La cinta nos narra su ascensión hasta de la fama desde sus humildes orígenes, y como el protagonista trata día a día con sus inseguridades a base de psicotrópicos mientras se enamora por el camino de la cantante June.

La verdad es que la linea argumental de todo biopic sobre un cantante o famoso ya está muy trillada (ascensión hasta el triunfo y demás), y Hollywood tiende a edulcorar o manipular la vida de estos personajes cuando le conviene. En "En la cuerda floja" la vida de Cash no está alterada en exceso, afortunadamente trata de mantener mucha fidelidad. Y, aunque tampoco hace falta loar en exceso al guión, hay que reconocer que nos lo cuenta bien todo. Hace poco vi un biopic sobre el cantante Bobby Darin, y precisamente "En la cuerda floja" tiene lo que le falta a aquella: aquí sí eligen bien los momentos de la historia (que básicamente se centra en dos tramas: los problemas emocionales de Cash que están siempre presentes, y su enamoramiento de June algo más soterrado en la linea argumental... y en ambas tramas acaba acertando) y explota bien a sus personajes.

Phoenix está excelente, aunque esto no algo que me sorprenda. Pensé que siempre le recordaría como el malvado de "Gladiator", pero ahora creo que siempre le recordaré por su Johnny Cash. Lo de Reese Witherspoon sí que fue sorpresa para mí, tampoco es que esté magnífica pero sí mucho mejor de lo que me esperaba. Ambos demuestran conectar con sus personajes al dotarlos de carisma, una buena voz y una mínima atracción.

Técnicamente la película tiene una excelente realización y una mejor edición, por no hablar de su maravilloso sonido que mejora la ya de por sí buena música de Cash con más intrumentos y más ritmo que los de antaño.

La verdad es que no es una cinta excesivamente dramática, pero tiene lo que hay que tener para que entretenga en sus más de dos horas de metraje. Nos ofrece unas buenas dosis de tensión emocional en las que Cash se ve envuelto a pesar de querer vivir su vida con cierto pasotismo (esa costumbre algo irreal en los biopics en los que sus protagonistas se implican en todo y por todo no se da aquí). Su guión nos describe la sociedad conservadora de la américa profunda donde todo son apariencias y donde todos esconden sus miserias. Y Phoenix logra que empaticemos con el incomprendido protagonista y le entendamos. Y la historia de amor que siempre está en un segundo plano triunfa precisamente por ser algo sutil y subyacente pero que siempre está ahí, siempre se palpa y se percibe a pesar de nos ser algo explícito (al fin y al cabo, al menos de cara a la galería, había una preciosa (que no empalagosa) historia de amor que contar).

Su mayor problema es su alargado final, pero casi está al nivel de "Ray" (que gana más puntos por tener algún que otro punto de humor del que esta película carece).

Lo mejor: La pareja protagonista. La música.
Lo peor: Su final alargado.

Joaquin Phoenix recrea impecablemente al cantante Johnny Cash. Su actuación es buena en todos los sentidos imitando de forma precisa el modo de cantar de Cash.
Reese Witherspoon también hace una actuación interesante (en mi opinión no para un oscar), pero Joaquin Phoenix cada vez que está con ella la anula.
Creo que él es lo mas destacable, aparte de la relación padre-hijo, y la que él tiene con su mujer (fantástica la interpretación de ella).
Las canciones están muy bien llevadas, y es muy gratificante ver los guiños que se hacen en la película a cantantes como Elvis Presley o Jerry Lee Lewis.
Resumiendo, una película que no se hace pesada en ningún momento gracias a las interpretaciones de todos los actores y del ritmo con el que está narrada la historia.

Después de ver "Ray", que era flojito telefilme, alguien decidió crear otro biopic de Johnny Cash, al que no conocía y el resultado es que no me importaba no haberle conocido. A Ray y a Johnny les pasan cosas parecidas: se les muere un hermano en la infancia que les traumatiza, se enganchan a alguna droga y tienen auge, declive y resurgimiento, con problemas con las mujeres entremedias. Ya lo hemos visto ¿mil vesces? Joaquin Phoenix canta mal. Y Reese no es que esté bien, es que su personaje está bien. Recuerdo a los señores productores que Roy Orbison, siendo ciego, da para biopic, para hacer la trilogía. Y de paso animo a los españoles a que saquen jugo de vidas tan apasionantes en nuestro país como "Las Grecas", Cecilia, Nino Bravo, María Jimenez, etc... que son nuestras Patsy Cline, Loretta Lynn, Tina Turner o Jerry Lee lewis.

No sé qué tipo de trauma les ha dado a los yanquis en hacer biopics de personajes de su cultura que poco o nada interesan al resto de la humanidad o, en su defecto, que a mí personalmente me parecen menos interesantes que la vida de Jesulín de Ubrique. Los estereotipos saltan desde el primer minuto de metraje y acaban con las letras de crédito, incluyendo padre autoritario y que rechaza a su hijo (imprescindible en la vida de cualquier aspirante a rebelde o ídolo), una primera mujer fría y avariciosa que no comprende al pobre Johnny, coqueteos con las drogas porque el pobre hombre tiene problemas (yo conozco a cientos de personas que también los tienen y no se lanzan a consumir estupefacientes a la primera de cambio), y una ristra de infidelidades “perdonables” (o así lo rueda el director) por lo mal que lo está pasando el chico, entre su mujer que quiere verlo entre gira y gira (vaya arpía) y la compañera de gira que no quiere romper su matrimonio. Luego toca capear el temporal de recaídas, enfrentamientos paterno-filiales, redención y blah, blah, blah, y así hasta las dos horas pasadas largas. Mejor habrían sacado un recopilatorio en DVD de los grandes éxitos de este fulano, y para los muy incondicionales la biografía reducida en edición de bolsillo con una gran nota en rojo en la portada que anunciase que la lectura de la obra puede causar somnolencia y advirtiendo de no leerlo en caso de trabajar con maquinaria pesada. En estos casos siempre me pregunto qué pasaría si el cine español rodara un biopic del “Dúo Dinámico”, las carcajadas llegarían hasta la luna. “Hola, soy Johnny Cash”, y yo digo: “¿Y a mí qué me cuentas, tostado?”.