Cuando menos te lo esperas

Dijo Dalí la frase (entre cien mil): "Muchas personas no cumplen los ochenta porque intentan durante demasiado tiempo quedarse en los cuarenta". Esta adorable comedia de Nancy Meyers siempre me recuerda a este dicho. En la cinta, un solterón irredento, Harry Sanborn (Jack Nicholson) sólo alterna con mujeres mucho más jóvenes que él, coche deportivo, copas, etc. El buen señor ha planeado una fiesta en la costa con Marin (Amanda Peet), una atractiva joven, en la casa de la madre de esta. Pero hete aquí que, como no podía ser de otra manera (Dalí dixit), tanto jolgorio a edad avanzada hace que Harry se infarte teniendo que ser atendido a regañadientes por Erica Barry (Diane Keaton), la madre de la joven y escritora de fama. El resto es pura dinamia de buena onda y humor fino con un Nicholson inconmensurable y una Diane Keaton para quitarse el sombrero.

Excelente comedia con gags de primer orden, sutil, sarcástica, entrañable y romántica. Comedia en estado puro que Meyers conduce por el mejor de los senderos ayudada por el estupendop trabajo de una Keaton propuesta al Oscar y al golfillo Nicholson que se autoreplica con notable superación y todo su repertorio en línea. Incluso podría decirse que el guión de la Meyers no habría funcionado tan bien de no ser por el reparto.

Película entretenida que a la vez sirve para pensar un poquito sobre la edad, también sobre el amor con la edad, igualmente para sentir ese íntimo regalo con que la vida nos obsequia a veces cuando cumplimos los años de una manera exitosa. Y que cuando no ha sido así, puede que quede otra oportunidad que no hay que dejar pasar.

Muy buena, genial. El Nicholson es un actorazo y aunque a la Keaton no la tenía vista, me ha gustado la pareja que hacen. Es una comedia estupenda, me ha encantado. Es para estar todo el tiempo riendo, y el guaperas del keanu pone un toque precioso a la película. A mí también me gustaría tener un médico así, je, je. Lo más curioso fue encontrar de nuevo a alguien que ya hacía años que no veía, Paul Michel Glasser, el de aquella serie tan televisiva de Starky y Huch, que me encantaba de jovencita. Un poco cambiado, pero vale.

Comedia romántica muy ordinaria. Es decir, normalita. Después de ver la película y, sinceramente, aburrirme durante gran parte de la misma, me sorprende ver tanta crítica positiva. Imagino que el género no es precisamente para mí si este filme representa el canon.
Pero, reitero, ¿tan complicado es comerse más la cabeza, aunque sea un poco, para no hacer un metraje lleno de clichés y de empalagosidades? Una comedia romántica, a mi juicio, puede ser bastante más.
Y que se enteren los críticos, que no por meter a varios actores de prestigio como Keaton, Nicholson, e incluso, McDormand, vas a hacer una gran película.