No sos vos, soy yo

Cuando se estrenó esta película en el cine, todo el mundo que fue a verla decía que era una de las mejores comedias que habían visto. Años después la gente seguía diciéndome lo mismo. Así que el otro día que cogí el DVD y decidí verla por primera vez, me encontré con la sorpresa de que no me reí ni una sola vez.
La película en cierto modo no me ha resultado cómica, y la he visto sin ninguna pretensión de que me hiciera reír. No digo con esto, que el film no tenga escenas graciosas; pero por lo menos en mí no han hecho ningún efecto.
La historia que narra me ha gustado, pero sí que me decepciona pensar que se trata de una comedia y que no encuentro ni una escena que me produzca gracia.
Sí que es cierto que existen personajes cómicos como es el protagonista y la chica de la tienda de animales. Pero no consiguen hacerme tampoco gracia, aunque uno intuya que están creados para ese objetivo. Personajes que funcionan muy bien, gracias a que las escenas están bien enlazadas y resultan efectivas en muchos casos.
La música me ha gustado. Las canciones están a cargo de dos grandes de este género: Jorge Drexler y Andrés Calamaro. Ambos serán los encargados de presentar unas letras que mandan unos mensajes sobre el desamor y la esperanza de encontrar uno nuevo.
En fin, nos encontramos ante la comedia del año en Argentina del 2004, y una de las más taquilleras de ese año en España. Una comedia que ha hecho reír a millones de personas, pero que yo no le he encontrado ninguna gracia. Un guión interesante con unas interpretaciones correctas, pero que no me ha hecho reír.

No sos vos, soy yo, es un película que trata el tema del desamor y el amor, de forma que se nos es imposible desentendernos de lo que le esta suciendo al personaje principal, metiéndonos en él y sitiéndonos reflejados, pero a la vez de ofrecer esta realidad amarga de las rupturas es lo suficientemente ingeniosa en su diálogos y acontecimientos, para que de alguna manera nos alejemos de esta realidad y acabemos ofreciendo un gran sonrisa a esta maravillosa historia.

No sos vos soy yo de Juan Taratuto es una comedia romántica sobre un médico treintañero que es abandonado por su mujer a la semana de casarse. Dirigida con un ritmo vivaz y con un estilo peculiar que se basa el burlarse de las múltiples variantes de una persona que acaba de ser dejado por su compañera sentimental, es una obra divertida que se toma con broma el drama que sufre un hombre desamparado. Realizada de manera eficiente tiene un resultado divertido que merece la pena ser visto.
La fotografía es lumínica y vistosa al tener unas imágenes agraciadas que son competentes en su cometido. La música es melódica gracias a unos sonidos variados llenos de ritmo cuando todo va sobre ruedas y melancólicos cuando el protagonista sufre. Los planos y movimientos de cámara completan una suficiente labor técnica mediante el uso del seguimiento, reconocimiento, subjetivos, cámara en mano y primerísimos que exaltan el dolor y la desesperanza.
Las actuaciones son genuinas. Diego Peretti está carismático en un hilarante papel y estupendos son los acompañamientos de Soledad Villamil, Cecilia Dopazo, Marcos Mundstock y Hernán Jiménez entre otros. Emplea para estos la dirección artística unos vestuarios y caracterizaciones informales pero muy apropiadas, al mostrarnos la caída en picado del pobre hombre que ha sido abandonado y no tiene ganas de arreglarse y cuando decide hacerlo, lo hace de un modo exagerado.
El guion, escrito por el director junto con Cecilia Dopazo, es jocoso de principio a fin al ser basado en la exagerada consideración de desgracia continua que siente el protagonista, provocando en el público reacciones diversas de lástima o fastidio por no salir este de una espiral negativa y poco provechosa. Esto se lleva a cabo con una narrativa sugestiva del país, que es pesimista pero ocurrente en un buen trabajo lingüístico que sacará las risas de todos los públicos.
Para finalizar, la considero una obra cómica y entretenida que merece la pena ser vista y que cumple su cometido al divertir con una historia provocadora al mostrar cómo se desenvuelve una persona después de haber sido dejado por su mujer de la que estaba profundamente enamorado. Recomendable por su guion, actuaciones y diálogos que hacen de No sos vos soy yo, un film hilarante y ameno que hará pasar un buen rato a los buscadores de comedias cumplidoras con momentos de humor bien trabajados.

No sos vos, soy yo me la recomendó un amigo desde hace años pero nunca me llamaba la atención pero fue ver un par de películas de Diego Peretti y me gustó como actuaba que hicieron que le diese una oportunidad a esta comedia con tintes dramáticos y románticos. Cuando terminé de verla lo primero que se me vino a la cabeza fue Woody Allen porque es lo que más se asemeja y con lo que más puntos gana la cinta y el actor. Como película no es una maravilla como muchos la ponen aquí aunque si resulta agradable y entretenida durante su poco más de hora y media de duración. Las actuaciones a excepción de Peretti no sorprenden porque la trama gira en torno a el y su desolación por momentos. La música acompaña muy bien en una trama más que interesante donde muchos se identificarán y verán las injusticias que le acontecen al pobre protagonista. Quizás no asuma los riesgos que debería y podría haber roto el tópico en el acto final que resulta extremadamente previsible pero ciertos diálogos y situaciones hacen que la película resulte agradable de ver y graciosa aunque menos de lo esperado ya que resulta más dramática que otra cosa, aunque lo combina a la perfección.

Empieza bien pero poco a poco se vuelve monótona, falta de interés.

Javier, que inicialmente es simpático, se vuelve cargante ante su indecisión, indecisión lógica por otra parte por la etapa de cambio y crecimiento personal, pero tanta reiteración es un sufrir para la paciencia del espectador.

La vida sigue y pocas veces vuelve atrás.