La morada del miedo

Penosa e indigna adaptación/remake donde más importan las ganas de Michael Bay de forrarse que rehacer y mejorar la película antigua.

Yo no sé si los responsables se han leído el libro o mínimamente se han informado sobre todo el cuento montado a raíz de los asesinatos en la dichosa casa, por que las licencias que se han tomado son verdaderamente alarmantes. Ya no hablamos de fidelidad al material original, si no de empeorar la trama a propósito para que muy lejos de resultar terrorífica, sea una sucesión de payasadas y chorradas con bastante ruido pero nula veracidad o creatividad.

La historia de Amityville (que ya se ha probado que es una farsa bien montada) tenia un contexto creíble, bien indagada era inquietante y además apasionaba a cualquiera. La película original intentaba rescatar todo eso en un largometraje aunque me temo que se quedaba a medio camino, Bay y su gente directamente pasan de todo y filman un más que típico subproducto de terror que además aburre por lo predecible.

Casa encantada, apariciones, niñas que hablan con niñas...

A pesar de todo se deja ver, no llega a aburrir y entretiene. Eso sí, miedo lo que se dice miedo... el mismo que un capítulo de Halloween de Los Simpsons.

Vaya por delante que, aunque me encanta el cine de terror, el subgénero de casas encantadas me produce bastante indiferencia, por dos razones, principalmente: porque es un terror bastante localizado, que, en caso de ser real, nunca llegaría a afectarme, y porque, por esa misma limitación, está ya todo muy trillado y es difícil encontrar una película medianamente original sobre el asunto -ya veremos "Paranormal Activity", pero no sé yo...


En fin, el caso es que esta es una de las cintas más decentes que he visto sobre el tema, que sabe crear una atmósfera muy adecuada e inquietante. Correctamente dirigida e interpretada, se ve sin pesar y con cierto desasosiego, si bien es cierto que tampoco -valga el juego de palabras facilón- es nada del otro mundo.


Para pasar el rato.

El 13 de Noviembre, a las 3:15, unas voces le dirán a mi hermano mayor que nos mate a todos. ¡Esperemos que no pase eso!

La película me dió tanto miedo, que incluso creo lo que puede pasar en el futuro. ¡Mi hermano nos matará!

Si la ves solo en casa, medianoche a oscuras y lloviendo, no duermes en 3 semanas.

No está a la altura de otras del género, de psicópata que va matando por culpa de unas voces, como en el Resplandor, pero está bien lograda, por lo que es muy entretenida.

Según la Wikipedia "El miedo o temor es una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable ante algo que nos asusta o creemos que nos puede hacer daño".
Esta película, el único sentimiento que ha provocado en mí es tristeza porque se hagan tales bodrios. Si todos utilizáramos la tecnología para plasmar una historia real de una manera tan pésima como esta, estoy seguro que a estas alturas no existirían ni las calculadoras. Lo único interesante de la película es el argumento, que si hubiese sido bien llevado a la pantalla, hubiera podido ser un buen film. Sólo empeora la manera que se ha realizado, la pésima sobre-actuación de los actores y actrices. No expresan sentimiento alguno, ni hacen que empatices con ninguno de ellos, pero sí con los abdominales y músculos del protagonista (Ryan Reynolds), que como todo en esta película, no vienen al caso.