Según la Wikipedia "El miedo o temor es una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable ante algo que nos asusta o creemos que nos puede hacer daño".
Esta película, el único sentimiento que ha provocado en mí es tristeza porque se hagan tales bodrios. Si todos utilizáramos la tecnología para plasmar una historia real de una manera tan pésima como esta, estoy seguro que a estas alturas no existirían ni las calculadoras. Lo único interesante de la película es el argumento, que si hubiese sido bien llevado a la pantalla, hubiera podido ser un buen film. Sólo empeora la manera que se ha realizado, la pésima sobre-actuación de los actores y actrices. No expresan sentimiento alguno, ni hacen que empatices con ninguno de ellos, pero sí con los abdominales y músculos del protagonista (Ryan Reynolds), que como todo en esta película, no vienen al caso.