Acero azul

Una de las primeras películas de John Wayne, donde aparece con una de sus mejores imágenes de juventud, de prestancia y carisma, las cuales serían luego sus señas de identidad por muchas y más grandes películas.

La cinta está filmada en blanco y negro y en escenarios naturales del Oeste USA. En muchos momentos los personajes parecen típicos del cine mudo.

Acerca de una banda de bandidos mandados por un hombre que se hace pasar por un ciudadano honesto del pueblo. Pero entonces llega el intrépido John Wayne, acompañado del viejo sheriff del lugar, y se las harán pasar canutas.

Se ve con nostalgia pero no va más allá de ser una simple película buena.

No nos vamos a engañar: esta película es mala, a pesar de que en ella figure John Wayne.

"Acero Azul" se trata de un western muy sencillo, prácticamente podría clasificarse como una especie de western de serie "B" en el que descubrimos a un joven John Wayne (hasta tiene cara de niño) dando sus primeros pasos en el mundo del celuloide.

La película, en sus aspectos técnicos, falla por muchos lados. Pero no nos demoraremos en eso y simplemente lo perdonaremos porque es una buena muestra de la visión que en aquella época se tenía sobre el western y que hasta que no llegó Ford con "La Diligencia", fue un modus operandi generalizado.

A ratos la película parece una comedia muda, acompañada por la música mientras vemos el movimiento un poco brusco de los actores, como en películas de humor. Luego asistimos a algunas escenas bien rodadas en los exteriores (no todo iba a ser malo) pero acompañadas de unos efectos de sonido MUY CUTRES.

Aún así, como he dicho antes, tiene su encanto y de alguna manera sirvió para forjar poco a poco la leyenda del gran John Wayne. Si tenéis un hueco, podéis echarle un ojo. siendo fans del western hay que verla sí o sí: no deja de ser una de vaqueros ;)

John Carruthers (John Wayne) es un incógnito agente del gobierno que busca capturar una banda de delincuentes que opera dentro de un pueblo del oeste norteamericano. Estos malosos se dedican a desestabilizar la economía del sitio, mediante robarle los transportes, el dinero y los comestibles, para que sus habitantes abandonen el pueblo y ellos quedárselos. ¿Con que propósito? Eso es lo que descubrirá nuestro héroe.

“Blue Steel” (1934) es un film de 54 minutos, y es parte de la colección “John Wayne-Ultimate Collection 25 Movies”. En este film el legendario John Wayne (1907-1979) se luce por todo lo alto, cabalgando y manejando su caballo como todo un experto, aunque las peleas a puños resultan todavía flojas. En síntesis, el film es un “western” sencillo, pero entretenido.

También pudimos ver al actor George 'Gabby' Hayes (1885–1969), un icono del genero “western”, este actuó en más de cuarenta películas entre 1939 y 1946, trabajó al lado de John Wayne unas veinte veces.

Muy poderosa era todavía la inercia del cine mudo cuando, a comienzos de los años treinta del pasado siglo, la industria del cine empieza a introducir el sonido en las cintas con diálogos más o menos sincronizados que hizo que fueran conocidas como "películas sonoras".
Un buen ejemplo es este "Acero azul", cuyo nombre parece responder a la especial aleación de este metal con la que se fabricaban cuchillos y otras armas blancas que, por cierto, brillan por su ausencia en la obra. Hemos visto de la misma una copia mal coloreada que parece propiamente del cine mucho. Frases cortas, largos silencios, sonido deficiente del que destacamos el "tocotom, tocotom" de los cascos de los caballos y, sobre todo, rostros enormemente expresivos que no precisan usar muchas palabras.
A todo esto hay que añadir un guión de lo más endeble, donde se suceden los robos y las persecuciones sin tener muy claro qué papel juega cada uno hasta transcurrido un buen rato.
Pues bien, a pesar de todo esto nos ha parecido una cinta interesante por varios motivos. Uno, contemplar lo que consideramos los orígenes del western tal como luego cuajaría. Dos, hacerlo también con un jovencísimo John Wayne en los inicios de su carrera actoral; montado en su caballo blanco anuncia ya el actor en ciernes. Tres, la presencia de notables especialistas en saltos y otras acrobacias ecuestres.
Otro detalle que hace recomendable a los aficionados al género darle un vistazo a la obra, la indumentaria de los vecinos con sus lazos, pajaritas y corbatas. También su escaso metraje: lo regular si breve se hace más pasable.

Trama sencilla. En el aspecto técnico le doy un aprobado. La he visto porque me gusta ver películas de todas las épocas. Hay que tener en cuenta que es de 1934 y que el cine sonoro no llevaba mucho tiempo y valorarla en ese sentido. Hoy en dia seria una castaña, pero si la ves teniendo en cuenta su época es de suponer que al público de entonces le bastaría.