Al final del edén

La vi por cumplir, por poder hablar con autoridad y de primera mano de la filmografía de Larry Clark, cosa que intento hacer siempre que puedo con todos los directores. No me esperaba mucho después de las "decepciones" (nunca otorgué demasiada credibilidad a quien me las recomendó) que me llevé con "Ken Park" y, en menor medida, con "Kids". Antes de esto, la verdad, ni siquiera sabía que existiera esta película; ni de oídas.

Pues me gustó, y bastante. Tenía curiosidad por saber qué opinaban otros, así que me senté delante del ordenador y busqué su ficha en esta página. ¿Un 6 de media? Joder, sí que me extrañó.
Intenté buscarle los defectos y encontré un lenguaje soez (¿esto es un defecto?), un par de situaciones poco creíbles (sobre todo lo del "cura" traficante de armas), un acompañamiento musical en ocasiones indebidamente seleccionado y unos pocos momentos en los que alguna de las actuaciones cae en la exageración. Pero nada más, el resto me pareció interesantísimo.

Lo último que hice fue mirar las opiniones de los críticos. Dos la alaban, y otro, no parece. Bueno, por lo menos hay dos que opinan como yo (¡menudo consuelo coincidir con un crítico!).

No sería la primera vez que me quedo solo defendiendo una película. Pero soy cabezota, sobre todo cuando hago caso a mi corazón.

Dura película que narra con la habitual sordidez de su autor la historia de dos parejas de yonkis ladrones de poca monta. Violenta y escabrosa en su desarrollo, plagada de tacos y muy explícita. Como siempre James Woods interpreta con garra al protagonista, bien secundado por Griffith y el joven Vincent Kartheiser. También aparece en un pequeño papel, un sorprendente Lou Diamond Phillips interpretando a un marica de poco fiar.

Film intenso, de gran realismo y desagradable que puede no ser plato para todos los gustos.

El segundo largometraje de Larry Clark no se alejaba mucho de la línea establecida en ‘Kids’ (1995). Cierto es que con una historia distinta, pero con un trasfondo muy similar: el retrato de una adolescencia maltratada, errante y calamitosa.

Drogas, addiciones y robos marcan el día a día de nuestros dos protagonistas. Dos yonquis más, de apenas 16 años de edad. Malviven entre la escoria de su apartamento, camuflándose entre ella, sintiendo el poder del jaco en sus venas, en el fluir de la sangre, en su atozado coco. Un mal robo con sangre a borbotones de por medio, supondrá poner en el abismo a Bobbie, debatiéndose entre la vida y la muerte, decantándose finalmente por la primera opción, gracias a la ayuda de un nuevo padre, Sammie.

Las andanzas entre el dúo adolescente y el dúo adulto suponen un continuum, una herencia de vida peligrosa, de pozo sin fondo, entre dos generaciones distintas, el ayer y el mañana, congeniando, para mal, en el hoy.

La vida al límite de los que se sitúan al margen de la ley, ha sido plasmada en el cine en repetidas ocasiones (Réquiem por un sueño). El riesgo y la acción desbordante de su supervivencia son ya de suyo muy cinematográficas (Thelma & Louise). Sus finales trágicos, cuando además afectan a personas jóvenes, aportan un punto de truculencia a las historias (Bonnie & Clyde).
Al final del Edén, mejor con su título original "Another day in paradise", es un ejemplo más de este tipo de películas, un buen ejemplo, en cuanto que no cae en la descripción tópica de personajes esquemáticos, como muchas otras. Los personajes son reales y notas que el drama te llega. El núcleo de la historia es una atípica relación paterno-filial en que se confronta la inocencia directa del joven con el carácter amargo y profundamente inmoral del mayor. Casi puede interpretarse en clave de valores y posición ante la vida. Esta relación me parece lo más interesante del film y por sí solo hace que éste valga la pena.

He visto esta pelicula hace unos instantes y realmente me ha sorprendido. Una película de la que no había oído hablar, un director del que tampoco había visto nada y unos actores protagonistas jovencísimos me han sorprendido para bien; junto a la gran interpretación que para mi gusto hace sobre todo James Woods junto a Melanie Griffith. Es una historia que plantea a un joven incapaz de resolver los problemas de una vida que no le ha sido muy agradecida debido a las circunstancias en las que se rodea escondiéndose detrás de las drogas y de su protector.
P.D. Se merece más de un seis (yo no la veo con tantos fallos)