Kairo

Parece inevitable comparar "Kairo" con su remake americano "Pulse", pero hacerlo sería de una futilidad enorme. Los dos films, aunque comparten un mismo hilo argumental, son distintos en todos los sentidos, no solo por el abismo de calidad que los separa, sino porque los temas tratados difieren absolutamente. Mientras "Pulse" se movía en los tópicos del terror adolescente, "Kairo" va mucho más allá.

En realidad "Kairo" no es una película de terror al uso. A pesar de contar con espíritus, dista mucho de películas como "La maldición" o "The Ring"; aquí no encontramos niñas con el pelo largo dispuestas a asustarnos, aquí lo que asusta es la soledad.

Porque la película, en definitiva, va de esto, de un análisis casi filosófico de la condición humana, de sus miedos más primarios, la muerte y la soledad. Filmada con un estilo lacónico y deliberadamente frío, la desesperanza y la sensación de un mundo que se consume lentamente son las sensaciones que poco a poco van creando un clima malsano de inquietud. Lo que se nos muestra es una sociedad deshumanizada, donde a pesar de vivir en multitud, hace de las personas islas solitarias, seres que no hablan, que no se comunican, y (sigue en spolier)

Lo mejor: que es mucho más que una película de terror
Lo peor: Algun personaje sin sentido en la trama

"Kairo" se aleja de las convencionales películas de terror. Sin duda Kiyoshi Kurosawa es un director singular digno de arrastrar tras de sí a un abundante número de seguidores. "Kairo" es un film muy peculiar que cuenta una historia fuera de lo normal, pero que no me ha terminado de convencer. Cero empatía de los personajes con el espectador.

Partiendo del hecho de que "Kairo" no es un film de terror, no cabe la comparación con otro de los cineastas de culto japonés, Hideo Nakata, director de "Ringu" y "Dark Water" entre otras. Kiyoshi y "Kairo" es más psicológico y busca más, dejar mal cuerpo que dar sustos, aunque los sustos de Nakata, tampoco se quedan en lo superficial.

Kiyoshi crea una gran atmósfera en su film, es inquietante y claustrofóbica, pero la película es anodina y bastante aburrida. No llega a complacer más factores que el de la simple curiosidad, y el film acaba por ser una singular pero muy irregular propuesta.

No suelo ser muy dado a visionar primero un remake antes que la película original, pero las dificultades en las que me he visto envuelto para encotrar "Kairo", de Kiyoshi Kurosawa, hicieron que viera previamente su homónima americana, a la que obviaré en esta crítica.

El film de Kurosawa, a quien empezaré a seguir y espero que no me decepcione como lo hizo Nakata en su dia, difiere muy mucho de sus hermanas "Ringu" o "Ju-on". Aquí la sutileza, el "no mostrar" y la atmósfera como verdadero motor generador del horror se llevan hasta sus extremos más minimalistas. Así, la pelicula avanza tranquila, lenta, sin sustos, ni sobresaltos ni demás recursos cinematograficos propios del género. Imagino que se trata de transmitir más que terror, incomodidad, angustia y desolación. Pues puedo afirmar que es esta una de las películas más tristes que he visto en mi vida. Gris, melancolica....la desesperación y soledad de los protagonistas es tal, que dicho sentimiento se contagia al espectador de la misma manera que los extraños sucesos que se nos narran contagian a los protagonistas, llevandoles a un desenlace apocalíptico y desesperanzador. Y es que son en efecto la desesperanza, el aislamiento y sobre todo la soledad los temas principales de la película, sintomas de una sociedad alineada que vive en un entorno que les lleva sin querer al auto-aislamiento. Merece la pena recalcar esta base, la materia prima del argumento de esta película, pues ello nos lleva a deducir por qué está pasando eso ahí, por qué los protagonistas se ven abocados a tan terrible destino. Y ya, pues no quiero destripar nada.

Muchos han criticado esta película por no dar explicaciones, pero es que no hacen falta. Lo que pasa, pasa "porque si", no hay que darle más vueltas, no es tan importante la razon sino las consecuencias que implica.

Tecnicamente, la película es tan oscura como su tematica. Fotografia grisacea, planos largos sin dialogos, tirando de vista lejana; música minimalista que pone la piel de gallina (que no es lo mismo que asustar)....impecable.


Una gran obra, no os la perdais.

Director ignoto de policiales, pero mucho más prestigioso a la hora de colgarse del terror, Kiyoshi encontró en Pulse una sensibilidad que no se frecuenta dentro del género. Elude el tópico y apuesta a la sugerencia, al detalle y a las sombras; por eso mismo Kairo se acerca más a una cinta de pura angustia que a una peli de terror al uso. La premisa es sencilla: el mundo está siendo invadido por fantasmas...o por seres que supieron ser concretos para devenir cada vez más en meros entes abstractos. Aquí es donde quiero detenerme, porque si bien en la obra hay escenas que te erizan el pelo en realidad el planteo subterráneo está más enfocado hacia el vacío existencial que hacia la aparición de seres de otros planos. Por decirlo mejor: la trama del fantasma chocarrero es una excusa para que el director esboze una realidad mucho más consistente.

La cuestión es que los resultados son debatibles: priman los escenarios cerrados y poco definidos por el uso de las penumbras en contraste inmediato con otras escenas plenas de color que sirven para medir en la balanza el sentir gradual del espectador hacia una experiencia de desasosiego. No obstante, hay demasiados planos cerrados para tratar el sentimiento global que nos ocupa, mientras que los planos generales son contados, por lo que la noción de un mundo hundido en las sombras vá más por la palabra que por lo netamente mostrado. Y las palabras: al principio contadas, luego exageradamente redundantes...por momentos la imagen ya nos explica todo y la palabra viene después a corroborar lo ya evidente. Por último: el concepto detrás de la sinopsis. Este se siente y comprende a la hora y veinte, el resto de la peli es un corretear desesperado detrás del mismo mensaje, por ende la peli termina por cerrar su idiosincracia mucho antes de lo debido. O le sobra metraje o le falta síntesis, o las dos cosas.

Sin embargo, por hacer de nuestro mundo un lugar cada vez menos definido e intangible, por lograr hacernos pasar un mal rato a fuerza de meras presencias oscuras sin mediación del susto barato. Por estos factores Kairo se acerca mucho más a la idea del cine de terror ideal que el resto de las pelis del género actuales.

Una película de...¿terror? japonesa, o al menos eso es lo que promete el trailer.
A algunos les parece una obra maestra del terror y del suspense, a otros, entre los que me incluyo, una decepción. No soy experto en cine, pertenezco a ese "gran público" que ve películas principalmente para entretenerse, para sentir emociones, y a veces para evadirse un poco y dejar volar la imaginación. En este sentido, la película, como ya he dicho, es un fiasco. Si esperas sentir terror, simplemente no es esta la película. Puede que contenga un profundo y filosófico mensaje, como algunos han dicho, pero desde la casi falta de argumento, hasta la interpretación de los actores, es un film que decepciona a quien sencillamente quiere ver una película de terror. La película es oscura, hay muy poca luz, personajes aislados y fríos, y las apariciones de los fantasmas no dan ni miedo... acabas acostumbrándote a ver de vez en cuando alguna sombra contoneándose, pero sin sorpresas. Recuerdo cuando vi otras obras de terror japonesas, como The Ring, The Eye o La Maldición... aún se me pone la carne de gallina. Sin embargo "Kairo" sencillamente no da miedo... tiene momentos de suspense, pero ninguna imagen asusta.
Si te gusta el cine de autor, con mensaje profundo, puede que saques algo en claro. Pero si perteneces al gran público, al que le gustan las películas comerciales, probablemente pases dos horas de aburrimiento.