Need for Speed

La adaptación cinematográfica de la famosa franquicia de videojuegos logra narrar una buena historia de crímenes que replica la acción y emoción de los videojuegos. Toda la historia gira en torno del querido Tobey dispuesto a poner en riesgo su libertad condicional para probar su inocencia tras la muerte de su mejor amigo. La película nos relata esta historia de una manera desenfrenada con múltiples escenas de autos corriendo a gran velocidad. La acción que esta película tiene no se limita y la película se vuelve todo un carrusel con muy buenas escenas de persecución que mantienen la esencia de los videojuegos. La historia no es muy original, pero los juegos tampoco son muy originales. Aun así, los juegos se caracterizan por ser emocionantes y la película tiene también ese nivel de emoción. Need For Speed es una buena película de acción que funciona muy bien como adaptación y logra ser lo suficientemente satisfactoria para quienes hayan jugado algún juego de la franquicia. Mi calificación final para esta película es un 9/10.

"Need for Speed" es una película que, sin duda, cautiva a los fanáticos de la velocidad y los videojuegos. Sus puntos fuertes radican en las emocionantes escenas de carretera, que nos sumergen en una trepidante acción llena de adrenalina, logrando capturar la esencia de las famosas carreras virtuales del videojuego homónimo.

La ambientación inspirada en el mundo de los videojuegos es otro acierto, ya que logra recrear el ambiente urbano y vibrante que los jugadores conocen y aman. Los detalles de los coches y los escenarios están cuidadosamente diseñados para asemejarse a las icónicas imágenes del videojuego, lo que resulta en una experiencia visualmente impactante.

Sin embargo, la película flaquea en el guión, presentando una trama predecible y poco original, que deja mucho que desear en términos de profundidad y desarrollo de personajes. Esto afecta a las interpretaciones en general, ya que el reparto no tiene suficiente material para lucirse y algunos actores parecen no estar completamente comprometidos con sus roles.

A pesar de sus puntos débiles, "Need for Speed" logra entretener a los aficionados de la franquicia del videojuego y a los amantes de la velocidad gracias a sus espectaculares escenas de carretera y la emocionante ambientación de videojuego. Si bien no se destaca por su guión o interpretaciones, ofrece suficiente acción y emoción para una velada llena de velocidad y diversión.

Lo único salvable me ha parecido Aaron Paul, y casi ni eso. Una película de automovilismo y carreras sin una historia ni argumento sólido. Leo críticas muy duras, y con razón, porque lo cierto es que ofrece entretenimiento durante un par de horas y poco más. No es una buena película, el reparto tampoco lo es, y no he visto la influencia de los videojuegos de Need for Speed por ninguna parte.

La verdad que las escenas de persecuciones y demás son entretenidas y hay que reconocer que se han currado la fotografía, las escenas, escenarios, cámaras onboard, accidentes con coches reales, etc Aunque es cierto que en ningún momento se ve a ningún coche a una velocidad alta, todo son vibraciones de cámara y engaño al ojo humano.

Pero claro, en general es una peliculilla que rinde tributo al videojuego y que esta enfocado a ser comercial para personas que no entiendan mucho.

Cualquier persona que le guste el motor o que tenga un coche deportivo, potente y que se haya hecho unos cuantos trackdays, todo lo que sale aqui le parecerá bastante ridículo.

Una fantasía ridícula para críos.

Si queréis ver alguna película de coches decente, ver Le Mans 66.

Siempre he dicho que una saga no es saga o una película supuestamente icónica no es suficientemente icónica hasta que no sale en una variante de “Scary Movie”. De hecho, ya cuando te dedican una película completa como “Casi 300” o “Híncame el diente” es que tienes que ser la caña. Curiosa e injustamente, la franquicia “A todo gas” ha sido ignorada por los productores de parodias (probablemente porque es una fórmula gastada en la que ya nadie quiere invertir) así que habrá que considerar esta “Need for Speed” como la pariente pobre que demuestra que “A todo gas” es un clásico del que pueden salir esquejes en forma de imitaciones o parodias.

Pero tampoco nos cebemos injustamente. Aun siendo indiscutible que es una obra nacida a rebufo de las películas de Vin Diesel y Paul Walker, tiene cierta personalidad, no cae en la astracanada y, desde luego, no es un truño. Entrañable y un poco hortera, pero no es mala. Por supuesto, está construida alrededor de sus espectaculares escenas de carreras con coches deportivos de alta gama y no hay que buscar demasiado sentido en todo lo que sucede alrededor de las persecuciones, tiroteos y explosiones. Cuanto menos se piense en esas carreras ilegales retransmitidas en tiempo real por streaming a través de una página de internet o en cómo organizar un viaje que atraviesa EEUU en unas pocas horas, mejor.

Está el habitual romance, la esperada venganza, los protagonistas guapetones y sobre todo mucho embrague y goma quemada. Ah, y sale Michael Keaton sudando tinta para intentar dar algo de sentido al papel más absurdo de su carrera. “Need for speed” no vale gran cosa, pero te pones a verla, entretiene y cuando te quieres dar cuenta se te ha pasado el tiempo volando. Que en el fondo es de lo que se trata, así que un pase sí que tiene.