The Midnight After

Una película que no dejará indiferente a nadie. Difícil de entender, difícil de meter en la cabeza del espectador occidental que ya ha salido espantado de su propuesta. No es la mejor película de Fruit Chan, pero sí que es de las más personales.

The Midnight After es una carrera de excentricidad. Es una película cuyos protagonistas son la excusa para el entretenimiento y donde el colapso socioeconómico reina por encima de cualquiera de las otras muchas ideas que se nos presenta. Un montón de ideas puestas en pantalla y sobre todo de preguntas que no reciben respuesta en ningún momento, principalmente porque no tienen que recibirla. Es normal que con esta premisa el espectador poco acostumbrado haya salido repelido por lo que ha podido ver: una capa superficial de locura con demasiado poco sentido.

Y es que The Midnight After es un amago de thriller amnésico que tanto reina últimamente en la clase media del cine. Fruit Chan hace suyo ese género de "¿qué hacemos aquí y cómo salimos?" y lo convierte en una "extravagancia espacial" que a más de uno le hará recordar al sobresaliente Tetsuya Nakashima. The Midnight After es mucho menos que todo eso, pero de alguna manera se perciben guiños y destellos del verdadero poso que tiene la película.

Una película incomprendida, ni siquiera sé si buena porque en esta oda al sinsentido se peca de previsible. Fruit Chan se queda a medio camino, pero en ese objetivo que se persigue nuevamente lo que importa es el viaje y no el destino.

Al saber que Fruit Chan había firmado otra cinta de terror estaba ansioso por echarle el guante. Pues el creador de Dumplings merece como mínimo el beneficio de la duda ante un nuevo título en su haber.

Un grupo de personas sube en el bus de medianoche, cuando pasan por el puente que conecta con su destino, se darán cuenta que la ciudad está totalmente vacía. No hay nadie por las calles, ni por la carretera. Aparentemente solos en el mundo deberán descubrir que ha pasado y lo más importante, ¿porque ellos?

Muy a mi pesar, la euforia que tenia con The Midnight After se ha ido diluyendo minuto a minuto, hasta el punto de tener que mirar el reloj para saber cuándo iba a terminar mi pesadilla. No entiendo como un director de su calibre, contando con la presencia de actorazos de la talla de Simon Yam, Lam Suet o Kara Hui, es capaz de regalarnos tal despropósito de película.

Después de rodar una de las mejores historias para el ómnibus Tales From The Dark, había recuperado mi esperanza que Fruit Chan volviera al camino del mejor cine de terror. Pero me doy cuenta que todo aquello es un espejismo. No sé si su nueva película ha sido un encargo, o es que ya está cansado de todo, o simplemente ese guión absurdo escrito a tres bandas por el director, junto a Chan Fai-Hung y Kong Hiu-Yan es tal despropósito que no ha sabido ni como plasmarlo en la pantalla.

Actuaciones de risa, un guión incomprensible, estirada hasta la saciedad, lo que bien podría haber sido un mediometraje decente se convierte en una tortura de dos horas de duración. Duele ver como un gran actor como Simon Yam se ha convertido en una caricatura de sí mismo con el paso de los años. Sin duda alguna del numeroso elenco de esta cinta me quedo con el inmenso Lam Suet, un secundario de lujo, que te llena el solo la pantalla.

Volviendo al despropósito de guión, en que pensaban juntando una historia de fantasmas, con el fin del mundo, metiendo desastres nucleares, historias de viajes en el tiempo y todo ello aderezado con unas actuaciones cuanto menos bochornosas.

Aunque en esta cinta no solo el guión es lo que falla, no puedo dejar de mencionar esos efectos especiales... he visto after effects que dan más el pego. Por no hablar del síndrome Michael Bay, donde todo lo que tocan con la furgoneta explota... en fin lo mejor que puedo hacer es pensar que The Mindnight After nunca ha existido, y volver a poner el DVD de Dumplings mientras disfruto del buen cine de este buen director.

Por último y para quitarme un poco el mal sabor, me quedo con una escena bastante épica. Auyeung Wai bailando al son de Space Oddity de David Bowie, inmensa escena. Una lástima porque por momentos la trama se torna muy interesante, pero el señor Fruit Chan deja claro en todo momento que no es una película a tomar en serio, puesto que ni ella misma se toma en serio. Una locura? una genialidad? solo el tiempo lo dirá...

http://www.terrorweekend.com/2014/10/the-midnight-after-review.html

Última película que me permitía ver mi abono matinée en Auditori, y la más larga, 120 minutos. Papelón para 'The Midnight After', que debía sufrir ser la película que proyectaban 'después de 'The Guest' (por su gran recibimiento). La película del veterano director independiente de Hong Kong, Fruit Chan, empieza con 17 personas, o mejor dicho personajes a cual más variopinto y sobreactuado, viajan en un minibús por la ciudad de Kowloon, y que al pasar por un túnel descubren que el resto del mundo ha desaparecido. Suena a 'Lost', a un telefilm de Stephen King, a un capítulo de 'The Twilight Zone', ¿no? Pues sí, sonar suena, pero ahí se queda. Con un arranque inmejorable, intrigante y prometedor durante la presentación de todos los personajes acompañado de una banda sonora potente, y cuando digo potente me refiero a estridente y muy asiática, la película cae de una manera estrepitosa, volviéndose cansina, tomando el rumbo que menos esperaba el publico. De hecho, la espantada de la sala ha sido de órdago. El misterio queda relegado a un segundo plano, se da más importancia a los futuros de los supervivientes, a sus relaciones, al histrionismo asiático sin sentido, o con sentido pero sin cordura... es posiblemente lo peor que he podido ver en Auditori junto a 'La Distancia', aunque preferiría repetir la experiencia con 'The Midnight After' antes que la del surrealismo de Sergio Caballero.

Crítica completa en BLOODSTAB: http://bloodstab.blogspot.com.es/2015/08/festival-de-cine-de-sitges-2014-dia-3.html

Una alocada y divertida película. Aquí se coloca todo en una "licuadora" drama, suspenso, acción, efectos especiales, ciencia ficción, humor, violencia, para convertir el filme en un despropósito. Si está construída con ese fin, sólo el director CHAN lo sabe. Las actuaciones sobreactuadas muy común en el cine chino, están a la orden del día. El guión nos lleva para atrás y hacia adelante con buenos flashback, cámaras ágiles en secuencias, motion blur, casi todos los recursos están aquí. Una fotografía excelente, nos muestra las locaciones de Hong Kong desolado y colores rojos y amarillos permanentemente en la escena. Para mi gusto es una buena película Bizarra, me reí como loco.

Un mini bus con 17 personas dentro atraviesa un túnel en mitad de la noche. Al salir del túnel descubren que todo a cambiado a su alrededor y que son los únicos habitantes de la ciudad a excepción de un tipo con máscara anti-gas que les observa desde las sombras.

¿Qué puedo decir de este engendro? Un planteamiento aceptable, estropeado por algunas actuaciones que quitan el hipo y que aportan los momentos más terroríficos de la peli. Penoso. Los intentos por aportar algo de trasfondo a los personajes se quedan en eso, en intentos nada convincentes. El desarrollo de la trama es complejo y no demasiado sencillo de comprender al menos bajo mi prisma. Un thriller psicológico con ambientación postapocalíptica que no hay por dónde coger porque se pasa del "terror" y el misterio al humor más absurdo y patético en un suspiro, pasando por escenas carentes de sentido y que no vienen al caso.

En realidad, han sido dos horas de una mezcla tal de cosas que al final no sé lo que he visto y no he entendido prácticamente nada. Un claro error por mi parte el dar una oportunidad a una película que aparentaba al menos un punto de partida prometedor pero que algo en mi interior decía que estaba a punto de ver un ladrillo. La próxima vez haré caso a mi intuición.


- Lo mejor: una escena que no tiene sentido, que no viene al caso y que sin embargo aporta lo que en realidad es el único momento realmente entretenido de la cinta. Hablo del momento videoclip de Space Oddity de David Bowie, coreografía incluida. Inenarrable.
- Lo peor: casi todo lo demás.

http://plumakatana.blogspot.com.es/2016/07/the-midnight-after.html