Ojalá fuera cierto

Una pelicula muy linda que me gustó mucho porque además de ser entretenida, graciosa y simple tiene unas actuaciones muy conmovedoras y una especie de magia que hace que no te defraude y te alegre.
Muy recomendable

Película de intenso aire romántico y humorístico. Para los críticos puede que resulte algo floja pero en cambio a los empedernidos soñadores que creen el en destino resultará agradable.
La guionista Leslie Dixon sugirió que se usara su propio apartamento para el rodaje, y que el protagonista de Napoleón Dynamite Jon Heder asumiera uno de los papeles principales. Ambas sugerencias fueron aceptadas. Dina Waters, la esposa de Mark Waters (realizador del film) en la vida real, hace el papel de Abby, a pesar de que ése no quiso saber nada de esa parte del reparto. La eligieron los productores. Las escenas con los actores protagonistas (Ruffalo y Whiterspoon), la mayor parte de la película, se rodaron dos veces, una con los dos y otra sin la actriz para que, durante el montaje, el director pudiera pasar de la perspectiva de David a la de las personas que no ven a Elizabeth.
Reese Witherspoon acababa de mudarse cuando firmó el contrato que le unía al personaje en la película. Estaba abriendo cajas y colocando libros cuando encontró la novela “Ojalá fuera cierto” (en que se basa el film). La había comprado hacía mucho y recordó que había pensado entonces que sería una buena película. Witherspoon piensa que fue cosa del destino.

Estaba en casa aburrido haciendo zapping hasta que encontré que en un canal empezaba una pelí, decidí dejarla y me alegro de haber hecho eso porque me encontré con una de las mejores comedias románticas que he visto. De ese día ya pasaron 5 años y la he visto más de 10 veces y nunca me canso de verla, es más, cada vez me gusta más.
Es una historia simple, sencilla, tierna y emotiva con dos actores ideales para esta película como lo han sido Reese Witherspoon (agradable y encantadora como siempre) y un Mark Ruffalo simpático y querible.
Es una de las películas más hermosas que vi en mi vida, se la recomiendo a cualquiera, tiene buenos efectos, lindos paisajes y una historia hermosa. Si te gusto Ghost, vela porque te encantara.

Me recuerda a "Ghost", pero con otro desenlace. Quizás tenga menos escenas en las que se te hace un nudo en la garganta.

Es difícil saber por donde va a ir la trama, hasta que desvelan por partes, la continuación de una exposición que dejan cortada por la entrada en escena del segundo protagonista, que algo despistado y con golpes graciosos, nos va conduciendo a un final esperado, pero en suspense. No imaginaba el desenlace final, tal y como el director nos lo presenta, pero el detalle del jardín sabía que iba a ser tenido en cuenta.

Vidas predestinadas a encontrarse, con las dificultades cotidianas del quehacer diario.

Si te gustó Ghost, te recomiendo que la veas, se te hará corta o no te percatarás del paso de la hora cuarenta minutos que dura, porque la acción está bien encadenada, con una sensación de fluidez, no sabría decirte en cuantos días transcurre la acción.

Comedia romántica de las habituales, con sus fórmulas de siempre. Aún así, yo no desdeño una película simplemente porque no se salga de lo corriente, y si me ofrece elementos para el entretenimiento y el disfrute, entonces puedo apreciar sus virtudes, por pocas que sean.
Ésta es una historia sobre el destino, sobre las fuerzas de la providencia que actúan sin que los protagonistas se percaten al principio.
Elizabeth Masterson es una joven médica que trabaja muy duro para ser admitida en la plantilla de un hospital de San Francisco. No tiene apenas tiempo para otras cosas.
David Abbott es un joven que busca piso en San Francisco para pasarse los días tirado en el sofá, bebiendo y sin hacer nada.
Lo que ellos no saben es que van a conocerse en las circunstancias más extrañas y curiosas, de un modo que nunca hubieran creído. Elizabeth necesita ayuda desesperadamente y comenzará a despertar a David de su letargo cotidiano. Cada uno de ellos arrastra graves traumas en su pasado y descubrirán que se necesitan uno a otro para encontrar la liberación y restablecer el equilibrio.
Divertida y entrañable, con buenos papeles protagonistas y secundarios a la altura, con algunas sorpresas incluidas y una relación muy especial y nada corriente entre Elizabeth y David, que se va desarrollando de un modo que no llamaríamos precisamente convencional.
La fotografía se inspira mucho en hermosos planos y vistas de San Francisco y en ciertos toques de colorido y belleza cuando se recrea en los jardines. Los efectos especiales están bastante bien. La trama se desarrolla con agilidad, sin cansar ni aburrir. Los diálogos son muy naturales y, aunque no sean nada del otro mundo en cuanto a originalidad, tienen sus puntos. La música acompaña de una forma muy agradable.
Absténganse los detractores de comedias románticas, luego no digan que no se les avisó. Se la recomiendo a los que disfruten de una comedia de pocas pretensiones, sin importarles que no sea gran cosa.