Beethoven, uno más de la familia

Divertida comedia de Brian Levant, (Este chico es un demonio 2, Los picapiedra), donde un peludo san bernardo, hará las delicias de una familia típica americana de clase medio alta, comandada por el correcto Charles Grodin, un popular cómico estadounidense, su sufrida mujer, y un grupito de niños con cara de angelitos, que descubren un pequeño caso de tráfico de animales.
Sencilla y entretenida, la película resulta un puro divertimento gracias a la buena interpretación del can, que, como suele ser habitual, sobresale en la mayoría de estos productos.
Nuevamente a los más pequeños les encantará.

Beethoven es una película sencilla, sin alardes interpretativos de ninguno de los actores de la película que únicamente fomenta el amor a los animales y también a los niños como se ve en diversas escenas de la cinta. Es una muestra de lo maravillosa que puede llegar a ser la vida en la familia y lo grande que es el amor que puede proyectarse incluso a los animales, que son sin duda, los seres más indefensos en este mundo.

De nuevo las pelis de animales dando sus buenos frutos. De acuerdo, no es una gran película pero seamos sinceros: ¿no pasas un rato de lo más agradable viendo «Beethoven»?

Porque yo sí lo paso y espero ansiosa la segunda parte para empaparme de más perritos, a ser posible cachorros, y que se me caiga la baba cual niña pequeña. Qué ricura de cachorro de San Bernardo, qué monería. Es imposible no adoptarlo si amaneces con un animalillo así acostado a tu lado y, además, tienes una casa con jardín en el que puede criarse sin problemas. El padre de familia George, sin embargo, le tiene algo de manía a los perros por sus babas, sus pelos y sus destrozos varios en casa. Lo extraño es que nadie excepto él se preocupe por esas cosillas. No me lo creo, la verdad. Todos estaríamos gritándole al perro por haber convertido el dormitorio en una pocilga, no hay por qué negarlo.

El caso es que detrás del magnífico y entrañable Beethoven irán unas personas malas que llevan a cabo crueldades no especificadas del todo con un montón de perros que roban de sus hogares y de las calles. Lo que pasa y deja de pasar te lo puedes imaginar así que no es necesario que te diga nada más.

Muy divertida.

1992 nos trajo al perro más simpático y cinematográfico desde Lassie: Beethoven, ese San Berbardo estupendo que muchos quisimos tener como mascota.
Lo cierto es que Beethoven es una película muy entretenida y la mar de simpática, y no tiene ningún defecto salvo que es lo que es y nadie debería buscar en ella una gran tragedia shakespeariana. Pero si la buscan es su problema. Beethoven fue una parte importante de la infancia de muchos, y como tal debe ser recordada.

Lo mejor: Su encanto, su entretenimiento, y sus actores secundarios (¡Stanley Tucci, Oliver Platt, David Duchovny!)
Lo peor: Es lo que es, tampoco se le pueden pedir maravillas

Desde luego no es de esas pelis familiares que a veces no te importa ver solo, es más bien de las que solo ves si hay algún peque dispuesto a verla. Así, inconscientemente bajas tus requisitos, los mismos que cuando tenías 8 años. Porque, sí, es entretenida y tiene algún momento gracioso, pero no tiene tanta gracia como otras del género en las que no te importa ver ca da x años aunque sea tú solito.

Es simpática, con alguna escena tierna y graciosa que siempre acompaña cuando algún animal doméstico sale en pantalla, ganándose así más fácilmente al público infantil. Los actores simplemente correctos dado el tipo de cinta que es.