Bienvenidos al fin del mundo

Otra vez más el gran Edgar Wright junto con sus infaltables "amigazos" de siempre Simon Pegg y Nick Frost se sacan de la manga el pilar final de su famosa trilogía "Cornetto" que la completan "Shaun of the Dead" y "Hot Fuzz". Se cierra un ciclo divertido, rompedor, honesto, original y probablemente la mejor saga "Freakie" del nuevo siglo.

Espectacular y sencilla, muy fuerte en lo emocional y atrevida visualmente. Contiene un verdadero coctel de tópicos que van desde la comedia, pasan por la nostalgia (de un pasado que no volverá jamás) e incluso se deja tentar por la ciencia ficción pura y se da tiempo para llamar a visitantes de otros mundos (Por favor Mr. Wright, era lo único que le faltaba filmar).

Del reparto, obviamente la pareja "fetiche" del director está como siempre en su punto, también se lucen Paddy Considine, Martin Freeman (otro que siempre está presente en los proyectos de este "trío de locos") y Eddie Marsan en una interpretación conmovedora. También destacar a la bella Rosamund Pike, a quien no le queda mal la comedia de vez en cuando y en cortas apariciones a un genial Pierce Brosnan y David Bradley, un "viejito" que me saco algunas sinceras carcajadas.

Otro punto ya al final de mi crítica es la espectacular banda sonora en la que aparecen bandas como "Primal Scream" (espectacular inicio con la memorable e Indie "Loaded") o "The Doors" con Alabama Song (Whiskey Bar).

Muy recomendable Soundtrack y película desde luego.

Sí, creo que es la peor de la trilogía de Edgar Wright con Simon Pegg y Nick Frost de protagonistas... pero eso sigue haciéndola más hilarante y entretenida que la inmensa mayoría de las comedias que se ven hoy en día.
Creo que toda la película se resume con la primera parte de la canción "Loaded" de Primal Scream:

"Just what is it that you want to do?
We wanna be free, we wanna be free to do what we wanna do
And we wanna get loaded and we wanna have a good time
That's what we're gonna do, no way, baby, let's go
We're gonna have a good time, we're gonna have a party"

Y eso es la película, una fiesta de lo absurdo y lo cómico, una sucesión épica de locuras, situaciones idiotas, peleas a toda velocidad con robots extraterrestres que se rompen como nada, diálogos de borrachos y con grandes actuaciones de los 5 actores principales, a los que acompañamos a lo largo de la milla de oro de pubs de una pequeña ciudad inglesa. Destacables así mismo los efectos especiales que adquieren relevancia según avanza la película y que está muy logrados.
Una comedia que merece la pena, que como película individual ganaría más que comprada con sus 2 predecesoras, pero que te dejará un graaaaan sabor de boca.

Como ya demostró en películas anteriores como Zombies party y Arma fatal, Edgar Wright se conoce muy bien los resortes de la comedia ingeniosa y sabe fusionarlos con los géneros a los que pretende homenajear, en este caso, la ciencia ficción. Así lo demuestra en Bienvenidos al fin del mundo, una comedia descaradamente divertida y disfrutable que marca otro punto de inflexión en la comedia gamberra, en la que ese rollo ci-fi de alto standing funciona como valor añadido.

La película nos habla de una panda de amigos que no se veían desde el instituto. Han pasado 20 años, cada uno ha hecho su vida pero Gary King se niega rotundamente a asumir responsabilidades, lo que él quiere es divertirse y emborracharse con sus amigos como en los viejos tiempos.

Con Bienvenidos al fin del mundo, lo que realmente Wright pretende es dejar al espectador con esa sensación final de terrible resaca, como si al verla nos estuvieramos cogiendo la mayor cogorza de nuestras vidas. Bienvenidos al fin del mundo es un divertimento tan sobresaliente como demencial, que al igual que los protagonistas a medida que avanza te vas sintiendo cada vez más lleno de cerveza, hasta rebosar en un climáx tan absurdo como metafórico.

"Bienvenidos al fin del mundo" es el perfecto broche final a una trilogia morrocotuda, seguramente de las mejores del cine reciente. La "Trilogia del Cornetto", que es como se conoce formalmente a esta atípica saga creada por Edgar Wright y Simon Pegg, ha servido como perfecto vehículo para homenajear a determinados géneros. Si "Zombies party" (2004) rendía pleitesía al cine de muertos vivientes, y "Arma fatal" (2007) al de acción, "Bienvenidos al fin del mundo" es una oda a las películas de ciencia ficción. Definitivamente nunca les estaré lo suficientemente agradecido al tándem Wright y Pegg por entregar estos tres films tan magníficos.
"Bienvenidos al fin del mundo" es una película que posee las mismas virtudes que sus dos predecesoras, y también el mismo defecto. El film es tremendamente divertido poseyendo unos diálogos realmente chispeantes, destacando especialmente el momento en el taxi con "los cinco mosqueteros", y además en conjunto goza de un sanísimo sentido del espectáculo. Simon Pegg y Nick Frost han conseguido formar una de las parejas cinematográficas más solidas y desternillantes. Además, leyendo entre líneas, en el film se atisba un cierto tono de crítica social que le sienta genial al producto final.
Antes hablaba de un defecto que se ha repetido a lo largo de la trilogia, y ese fallo son los terceros actos en general. Unos desenlaces endebles, por distintos motivos, pero endebles. En "Bienvenidos al fin del mundo" el clímax final no es que sea malo, es que más que un clímax es un anti-clímax. Es un poco lo que acaecía en "Zombies party" pero llevado a la máxima expresión. Toda la frescura y el ritmo que derrocha la película en general, es abducido por completo en un desenlace que es como un gatillazo. En fin, ya lo tenía claro pero esto me sirve para reafirmarme en que Edgar Wright es un magnífico realizador que debe de pulir los terceros actos. Para todo lo demás me sigue pareciendo uno de los directores con más personalidad y con unas señas de identidad más marcadas de todo el panorama actual.
"Bienvenidos al fin del mundo" es el perfecto cierre a una trilogia de órdago. Un film muy recomendable, al igual que sus dos predecesoras, que garantiza diversión y entretenimiento a mil por hora.

Cuando la estaba viendo me estaba recordando mucho visualmente a Scott pilgrim, Shaun of the dead...., además del reparto. Y claro, cuando he visto los créditos, ahí estaba Edgar Wright, es inconfundible este hombre.

No quiero decir mucho por si alguien ve esto sin haber visto ni siquiera la portada como yo, ni nada de ella.

Solo diré que es muy divertida, sorpresiva y con un muy buen ritmo. (Como todo lo que hace Edgar Wright).