"Bienvenidos al fin del mundo" es el perfecto broche final a una trilogia morrocotuda, seguramente de las mejores del cine reciente. La "Trilogia del Cornetto", que es como se conoce formalmente a esta atípica saga creada por Edgar Wright y Simon Pegg, ha servido como perfecto vehículo para homenajear a determinados géneros. Si "Zombies party" (2004) rendía pleitesía al cine de muertos vivientes, y "Arma fatal" (2007) al de acción, "Bienvenidos al fin del mundo" es una oda a las películas de ciencia ficción. Definitivamente nunca les estaré lo suficientemente agradecido al tándem Wright y Pegg por entregar estos tres films tan magníficos.
"Bienvenidos al fin del mundo" es una película que posee las mismas virtudes que sus dos predecesoras, y también el mismo defecto. El film es tremendamente divertido poseyendo unos diálogos realmente chispeantes, destacando especialmente el momento en el taxi con "los cinco mosqueteros", y además en conjunto goza de un sanísimo sentido del espectáculo. Simon Pegg y Nick Frost han conseguido formar una de las parejas cinematográficas más solidas y desternillantes. Además, leyendo entre líneas, en el film se atisba un cierto tono de crítica social que le sienta genial al producto final.
Antes hablaba de un defecto que se ha repetido a lo largo de la trilogia, y ese fallo son los terceros actos en general. Unos desenlaces endebles, por distintos motivos, pero endebles. En "Bienvenidos al fin del mundo" el clímax final no es que sea malo, es que más que un clímax es un anti-clímax. Es un poco lo que acaecía en "Zombies party" pero llevado a la máxima expresión. Toda la frescura y el ritmo que derrocha la película en general, es abducido por completo en un desenlace que es como un gatillazo. En fin, ya lo tenía claro pero esto me sirve para reafirmarme en que Edgar Wright es un magnífico realizador que debe de pulir los terceros actos. Para todo lo demás me sigue pareciendo uno de los directores con más personalidad y con unas señas de identidad más marcadas de todo el panorama actual.
"Bienvenidos al fin del mundo" es el perfecto cierre a una trilogia de órdago. Un film muy recomendable, al igual que sus dos predecesoras, que garantiza diversión y entretenimiento a mil por hora.