Brothers (Hermanos)

Bien, acabo de terminar de ver esta película. Debo decir ante todo que no voy a entrar en comparaciones con la película original, hablaré como mero espectador "virgen" ante la historia que nos cuenta Brothers.

Y debo decir que me ha dejado un muy buen sabor de boca. Los tres pilares de la película (refiriéndome, obviamente, a Portman, Gyllenhaal y Maguire) están especialmente brillantes, realizan unas interpretaciones verdaderamente intensas, naturales y sin duda alguna, convincentes. No es de extrañar que los críticos hablen aquí de su mejor trabajo hasta el momento.

Soy plenamente consciente de lo sencillo que resultaría infravalorar esta película. Porque viene de Hollywood. Porque es un remake. Porque no es danesa. Porque no tiene ese toque tan intimista de la original. Sí, pero alejémonos de las comparaciones. Lo que tenemos delante es un film que emociona, que te atrapa desde los primeros instantes. El ritmo en el que se suceden los hechos que forman la trama es perfecto, con secuencias devastadoras en contraposición a otras verdaderamente tiernas (y cómicas, incluso), llevándote de un lado a otro en la balanza emocional. La banda sonora quizás no sea demasiado llamativa, pero ayuda a formar ese ambiente a veces dramático e intenso que se da.

Brothers no pretende ser más de lo que es, y eso me gusta. Tampoco entra en batallas políticas ni cuestiones "físicas" de la guerra. Se mantiene al margen, mostrándote únicamente las conscecuencias, los sentimientos de las personas que se involucran en algo tan horrible como es una guerra, y cómo eso afecta a las personas que le rodean.

Haciendo una breve síntesis, probablemente lo mejor son las interpretaciones, como ya dije, y por eso le doy un nueve de puntuación.

Esta película es muy fácil de prejuzgar, empezando por que se llama "Hermanos" y en la tapa tiene una mujer entremedio de dos hombres. Parece obvio.
Lo segundo es Tobey Maguire, ex-spiderman y sombra de Leonardo DiCaprio a quien nunca aposte mucho.
Pero a medida que la trama avanza, resulta que la película trata de un tema mucho más interesante que un trillado triángulo amoroso, y las actuaciones son fascinantes.
Absolutamente recomendable, hace tiempo no veía algo que parecía tan típico y resultara tan bueno. Una pena que no haya obtenido nominaciones al Oscar, y sí otras.

Aunque no se prodiga mucho, Sheridan es siempre un director que me da cierta garantía en sus trabajos, incluso en los menos logrados. Y teniendo en cuenta que el último film suyo que vi fue la magistral The Boxer, me generé a mi mismo unas expectativas con Brothers que luego no se vieron satisfechas, al menos plenamente. Brother mantiene alrededor de 2/3 de su metraje a un nivel maravilloso. Es el Sheridan que sabe retratar personajes y hacerlos cercanos al espectador, captando la atención con los pequeños detalles, sin necesidad de forzar situaciones en el guión y creando de forma sutil emoción. Todo se va construyendo con elegancia y clase, acompañado por las excelentes interpretaciones de Gyllenhaal y Portman y en menor grado McGuire, dejando preparado el drama para su resolución. Pero justo en ese punto el drama se estanca, pierde credibilidad y empiezan las concesiones fáciles en el guión, resultando muy apresurado su desenlace y dejando un sabor agridulce después de lo que nos había mostrado antes. No es que sea mal final, pero un trabajo con la calidad que nos ha dado durante casi todo el metraje merecía un final más redondo. Tal vez el problema es ese, que hemos saboreado la gran obra durante la mayor parte del film y al final ‘solo’ se queda en buena. Aún así ya me gustaría que todos los estrenos que veo tuvieran la calidad del film de Sheridan. Pudo ser mucho más, pero aún así merece la pena ver este sensible retrato sobre las relaciones familiares y los traumas post-bélicos.

El trabajo de Tobey Maguire tendría que haberse premiado con un Oscar, o al menos nominación. Excelentes las escenas al regreso de Afganistán, cuando lo vivido, conduce al protagonista hacia un demoledor trastorno de conducta.

El trabajo del resto de actores, se queda en simplemente correcto, muy por debajo. La película se cimenta sobre un puñado de secuencias impactantes acompañadas de otro buen puñado de momentos absolutamente prescindibles.

"Brothers" es un buen film de Jim Sheridan (“En el nombre del padre”, “The Boxer”), que se sustenta ante todo en unas meritorias interpretaciones de Natalie Portman, Jake Gyllenhaal y Tobey Maguire. Lejos de caer en el panfletismo antimilitarista, trata una historia de pérdidas y reencuentros, de furia y perdón, mostrándonos con sobriedad y sin grandes aspavientos las consecuencias de la guerra en los soldados y cómo éstas afectan a los que les rodean.

Maguire es un soldado felizmente casado al que envían a Afganistán, su helicóptero es alcanzado por el fuego enemigo y las fuentes oficiales le dan a él y a su escuadrón por muertos. Tras el consabido funeral, el bala perdida de su hermano tratará de ayudar a su mujer e hijas a sobrellevarlo, adquiriendo paulatinamente el rol de cabeza de familia; pero él no ha fallecido y permanece prisionero de los talibanes que, muy cabrones ellos, le someterán a traumáticas experiencias. Tras lograr ser rescatado, volverá a casa, pero…

Donde mejor funciona es en ese tramo inicial en que seguimos las desventuras de Maguire cautivo, paralelamente al día a día de su familia y la inevitable la atracción que nace entre su mujer y su hermano; y es que, aunque a uno le den por fiambre, el mundo sigue girando y dicho sea de paso, ¡a esa Natalie Portman viuda cualquiera se le resiste, madre de Dios! En su posterior desarrollo, el retorno al hogar, es cuando el film muestra sus cartas: el hombre que ha regresado ya no es el mismo que partió y la carga que le subyuga, acarreará consecuencias para aquellos a los que ama.

Que conste que no he visto el original "dogma" en que se basa, pero me ha parecido un relato efectivo, digno y bien ejecutado, aunque le falta ese "algo" para llegar a convertirse en un gran film. Tal vez es que en esa circunspección de que hace gala, la trama no acaba de desarrollarse con todo el dramatismo que pudiera; y es que los personajes resultan al fin un tanto herméticos, cuando una exploración más profunda e intimista de sus caracteres, hubiera ayudado a proporcionar una mayor intensidad al conjunto. Aún así, una apreciable película a la que vale la pena echar un vistazo.