Al ver el trailer todos pensábamos que Disney nos iba a traer una película Woke, y no. Nos trajo una maravilla sin dudas. El título también podría decir: cuestión de identidad. Y no es imprimirnos la personalidad de alguien que tiene lo que queremos, o imprimir en nosotros algo de nuestro pasado, sino crear algo nuevo. Explora y logra a la perfección este relato, además de mostrarnos como es, con suma precisión, lo que es la ansiedad y como su mayor extremo nos hace palidecer ante, no los demás, ante nosotros mismos.

Tal vez no es tan innovadora como la anterior, pero maneja su narrativa de una gran manera. Pixar y Disney cuando se lo proponen son los mejores, ya que su propia idiosincrasia los delata.

Mi nota es 9.0/10.

Secuela de 'Inside Out'. Riley entra en la adolescencia y el Cuartel General de su cabeza sufre una repentina reforma para hacerle hueco a algo totalmente inesperado propio de la pubertad: ¡Nuevas emociones! Alegría, Tristeza, Ira, Miedo y Asco, con años de impecable gestión a sus espaldas (según ellos...) no saben muy bien qué sentir cuando aparece con enorme ímpetu Ansiedad. Y no viene sola: le acompañan envidia, vergüenza y aburrimiento.

Ansiedad, con su energía inagotable, está constantemente preocupada por todo, desde los exámenes hasta los mensajes de texto sin respuesta. Envidia siempre está comparándose con los demás, lo que provoca tensiones en el Cuartel General. Vergüenza se sonroja con cada pequeño error, y Aburrimiento... bueno, Aburrimiento simplemente no encuentra nada interesante.


Lo que mas me gusto:
La película hace un trabajo brillante representando la adolescencia: un cóctel hormonal que ni el mismísimo Freud podría descifrar. Las nuevas emociones son hilarantes. Ansiedad parece el primo nervioso de Miedo, siempre preparado para gritar "¡ESTO VA A SALIR MAL!". Vergüenza se roba las escenas con su habilidad para hacer que todo sea incómodamente gracioso, y Aburrimiento... bueno, ella es todo un "mood".

Los veteranos como Alegría y Tristeza siguen siendo entrañables, pero su intento de mediar con las nuevas emociones es un show digno de reality. Entre risas y momentos emotivos, la película nos recuerda que sentirse perdido es parte del proceso de crecer.

Animación como siempre Espectacular: Los colores vibrantes y la creatividad visual son un festín para los ojos. Cada emoción tiene su propio estilo y personalidad, lo que hace que el Cuartel General sea más dinámico y entretenido que nunca.

Lo que menos me gusto::
Puede que algunos encuentren que el exceso de emociones en pantalla sea un poco abrumador, algo irónico para una película sobre emociones.

Aunque Ansiedad logra captar toda la atención con su intensidad (y, de paso, ponerte los nervios de punta), esto deja a las emociones originales algo relegadas. En especial, Envidia parece perder protagonismo, transmitiendo exactamente lo que representa: "¿Y yo qué? ¿Acaso no soy lo suficientemente brillante?"..

Conclusión:
Inside Out 2 es una explosión de humor y reflexión que nos invita a abrazar el caos emocional que trae la adolescencia. Nos recuerda que, entre contradicciones y dramas, siempre hay espacio para reírnos de nosotros mismos. Es una película para toda la familia, aunque algunos de sus chistes y situaciones harán que los adultos suelten carcajadas mientras los niños solo parpadean confundidos.

En definitiva, esta secuela no solo cumple con las expectativas, ¡las supera de largo! La película retrata la adolescencia como un viaje lleno de retos, crecimiento y muchos momentos de 'tierra, trágame'.". Es imposible no reírse, emocionarse y reflexionar sobre nuestras propias emociones (y agradecer que nuestro Cuartel General no tenga que soportar una reforma tan radical). ¿Riley encontrará su lugar en este torbellino llamado adolescencia? ¿Sus emociones lograrán coexistir sin destrozar el Cuartel General? Para saberlo, ¡no te la pierdas!

Secuela correcta de la obra maestra con la que Pixar tocó techo hace nueve años. Revive en cierto grado la magia de su predecesora, pero pierde toda la originalidad y sorpresa de la original.
Muy bien realizada, aunque ciertamente muy sobrevalorada. La escandalosa taquilla debe ser algo casual, bastante incomprensible.
Pixar ha hecho otra gran película (que ya tocaba), precisa en lo emocional y en lo psicologico, pero lejos de la brillantez suprema de hace diez años.

Inside Out 2 tenía el difícil reto de continuar una de las películas más queridas de Pixar, y aunque no alcanza la frescura ni el impacto emocional de la primera entrega, sí consigue desarrollar con sensibilidad e inteligencia el siguiente paso en la evolución de Riley: la adolescencia. El gran acierto de esta secuela es cómo representa la llegada de nuevas emociones —Ansiedad, Envidia, Vergüenza y Ennui— como parte inevitable del crecimiento. Especialmente destacable es el tratamiento de la Ansiedad, que lejos de ser una villana, se presenta como una emoción legítima que, mal gestionada, puede desestabilizarlo todo.

La historia es más convencional que la original, centrada en un conflicto aparentemente pequeño —un campus de hockey—, pero que le sirve a la película para hablar con honestidad sobre la inseguridad, la presión social y la construcción de la identidad. Aunque algunos personajes nuevos quedan poco desarrollados y ya no hay tanta invención visual como en la primera parte, el film mantiene un ritmo ágil, un guion sólido y momentos muy emotivos. La animación sigue siendo excelente, con un diseño visual que potencia el mensaje sin subrayarlo.

Inside Out 2 no es una revolución, pero sí una evolución coherente. Pixar apuesta aquí por la continuidad emocional más que por la sorpresa, y acierta. Una secuela luminosa, empática y útil tanto para adolescentes como para adultos, que confirma que Pixar aún tiene mucho que decir cuando escucha con atención a sus personajes.

Como profesional de la salud mental no tengo palabras para describir la excelencia de esta película. Sin entrar en demasiados detalles técnicos han sabido expresar las emociones de la protagonista de una forma TAN delicada y profunda que me pasé la película asintiendo cada 2 segundos.
Claramente es una película destinada al público infantil, pero está creo que la entenderán mejor los jóvenes y adultos, muchos y muchas de vosotros/as os sentiréis identificados/as en varios momentos.
Recordad que es una película sobre la complejidad de la mente humana y sobre la interacción de las emociones, y he visto una crítica profesional que indicaba: solo mente y cero corazón, lamento contradecir a ese crítico, pero el corazón no es parte del SNC.
Sinceramente recomendable.