Es un esperpento, una molestia en el ojo, en los oídos, causa picazón interna, que se yo; imaginen una película que trata de lo mismo que las anteriores, repitiendo los mismos errores, sin incorporar nada positivo, es más, ni siquiera los efectos especiales mejoran. En Jurassic Park 1, todo resulta fresco, espontáneo, es una pura y genuina película de aventuras, pero ya en la segunda parte va declinando bastante, y en la tercera, la tercera ya es un bochorno total. Es un plomo insufrible y creo que al director los dinosaurios le morfaron la saviola y por ende la ideas.

Trillada secuela que casi no aporta nada nuevo a la película. Con Spielberg únicamente de productor ejecutivo parece ser que la mano mágica voló. Es la primera que ya no está basada en la novela y se nota, además pienso que el tema ya fue demasiado explotado y queda poco que contar. Las escenas resultan insulsas y hasta cómicas.

No entiendo porque esta película tiene tan mala critica, no hay que compararla con la primera que nos enseñaba aquel mundo desconocido para la mayoría de nosotros, el mundo de los dinosaurios.
En esta película disfrutarás de nuevos dinosaurios, quizás el guión no sea el mejor pero te lo pasas bien y estas metido en la película en todo momento, te das varios sustos, recorres Isla Sorna de arriba abajo y no te deja un minuto de descanso, si vas al baño un momento y vuelves ya te has perdido algo seguro.
Además vuelve el mejor paleontólogo [No estaba en la 2] Alan Grant, y eso es sinónimo de aprendizaje en cualquier Isla con Dinosaurios.

Es cierto que a nivel técnico está bastante bien, pero sin llegar a la altura de Parque Jurásico. Se nota a leguas que esta tercera y "última" parte de la trilogía ha estado en manos de otro director muy inferior a Spielberg. Si que tiene acción y algunas escenas están muy bien, pero es que si el encanto de la primera parte se perdió medianamante en la segunda, pues es de imaginarse que esta tercera entrega ni siquiera lo huela, porque parece y es una película más de acción, y eso es muy poco para ella. Sam Neille repite papel y es lo único que genera algo de credibilidad a la cinta y se agradece. Otro punto a favor es el de la elección de William H. Macy, magnífico actor siempre perfecto en cualquier tipo de personaje. Y con eso hacen que el filme llegue al aprobado y a ser pasable de ver.

Como ya está más que dicho, esta tercera entrega de Jurassic Park pega un perceptible bajón respecto a las dos anteriores, pero no por ello es una mala película, ni mucho menos.

Es una película que busca entretener y lo consigue, pero no consigue nada más.
De hecho en cuanto a guión (un niño queda rezagado en una isla con dinosaurios, y sus padres acuden a buscarle con el protagonista de la primera película como guía) y a personajes (el niño, sus dos padres, un paleontólogo joven y el ya conocido Sam Neill), la película puede recordar a un telefilme. Un telefile con un presupuesto de 93 millones, eso sí. Y es que la película, argumentalmente, no tiene nada interesante que añadir a las dos anteriores. No descubrimos nada nuevo sobre Jurassic Park. Los personajes están viviendo una mera anécdota casual de la que sólo ellos se acordarán.

La película es básicamente una sucesión de encuentros con dinosaurios y huídas de los mismos. Los velociraptores no tienen gran novedad que mostrarnos, aunque tenemos un nuevo y digno invitado: el espinosaurio, el primo zumosol del tiranosaruio rex. Este dinosaurio corona la película con su cresta dorsal y sus mandíbulas alargadas.

Por supuesto, el compromiso con las dos novelas de Michael Crichton se ha esfumado. Esta se acerca a ser una nueva adaptación de la segunda novela de este prehistoríco parque temático, pero carece de la audacia innovadora de "El mundo perdido".

Entretenida, pero no interesante.