Oviedo Express

De lo último filmado por Suárez es de lo mejorcito. Trata de la llegada a Oviedo de una compañía teatral para representar "La Regenta" y el consecuente revuelo que se arma.
Suárez, a partir de un guión entre lo más lúdico y lo dramático, logra una adecuadamente entretenida comedia vodevilesca, dónde la Vida y el Teatro se solapan y confunden, desfilando, pues, Comedia y Tragedia también, cruda Realidad y sabrosa Ficción, Placer mundano y Sufrimiento posterior.
Bien servida por un grupo de intérpretes claramente implicados en la trama y en el trabajo con su director, "Oviedo Express" es graciosa, menos pretenciosa que otras obras de Suárez, moderadamente irónica y está bastante bien construida, incluidos los inevitables toques surrealistas. Recomendable.

La película comienza con una advertencia “No busquéis moraleja, ni lógica, ni …. si lo hacéis series castigados” firmada por Mark Twain, que seguramente es apócrifa.

El primer personaje que aparece tras los títulos de crédito, es un ángel, estéticamente muy feo, una especie de protector de los amantes de los libros y la literatura.

Dicho esto, podemos suponer que la imaginación irreverente de Gonzalo Suarez estará muy presente en la narración.

Si se conoce “La regenta” ayuda a seguir y comprender la película fácilmente.
Pero ojo: No se trata de una nueva versión o montaje de La Regenta; importan mucho más los líos que se traen los integrantes de la compañía teatral que llega a Oviedo para representarla.

En cuando captemos que se trata de una comedia loca, la disfrutaremos más.

Buen guion, con unos diálogos bien conseguidos, muy buena fotografía (tratamiento de imágenes) excelentes actuaciones en la que destaca la calidad en la vocalización, incluido Jorge Sanz. Banda sonora cuidada.

Llena de chistes cultos y culturales, referencias ingeniosas a otras obras de arte ya consideradas clásicas, con ironía respetuosa al mismo tiempo que iconoclasta.

Adjetivos que se pueden aplicar para definir esta obra: coral, inclasificable, diferente, excéntrica, histriónica, desconcertante, sátira burlona, fascinante.

“Toda historia real, termina con la muerte” (Hemingway) ¡Que casualidad que en “Oviedo Express” también!

Ensoñación que nos revela cómo realmente son los amores, las relaciones. Es una animación de la poesía.

Si en la SEMINCI 2006, El ciclo Dreyer consiguió dejar al público completamente descolocado, en Oviedo Express tenemos a una muy digna sucesora. Un lamentable guión, y unos personajes en su mayoría absurdos cuyas interpretaciones rozan el ridículo, pretenden sacar adelante una pretenciosa comedia que no tiene ninguna gracia.

La película prometía, en un principio, proponiendo un interesante juego entre el mundo del teatro y el de la política. En la primera mitad la película se ve incluso entre alguna carcajada que otra, denotando que los actores sí están bien en esa vis* Las partes dramáticas dejan que desear, y es que la actriz protagonista no está a la altura, y la película en esos tramos sólo se sostiene por la gran Maribel Verdú y el correcto Carmelo Gómez.

Lejos del fin deseado la película se sumerge en algo cercano al absurdo y termina, como prometía una vez adentrados en ella: en fracaso.

*Ver spoiler