Carretera perdida

Muchos dicen que intentar contar un sueño es muy arriesgado, sólo al alcance de grandes genios bendecidos por el talento, tanto en el cine como en la literatura, dada la gran complejidad de reformular en imágenes o palabras la irracional composición de los sueños.

Pues Mr. Lynch crea una obra única donde plasma con increible precisión la locura, los sueños y la más perturbadora sensación de inquietud que jamás se haya visto en una pantalla de cine.

Incomprensible, irracional y maravillosa.

Abrumador espectaculo visual y sonoro. Brutal.
Nadie consigue crear esa atmósfera de misterio como lo hace el propio Lynch (al igual que en "Terciopelo Azul").
Intentar comprenderla es perder el tiempo, esta película está hecha para los ojos y para los oídos. Métase en la película y disfrute de esta obra maestra.

Increible muestra de la sobradez audiovisual a la que este maestro del cine moderno nos tiene acostumbrados, superando sus propias metas y llegando más allá de la locura y la esquizofrenia, sobrepasando las barreras de lo imaginable tenemos este triangulo de amor, odio y muerte que nos lleva por toda esta locura, aparentemente sin pies ni cabeza. David Lynch va dejando caer partes de esta enredada trama que cada cual ya le de su interpretación y juzgue según las partes de la cabeza por las que le haya llegado el terremoto hecho imagen y sonido. Increible Patricia Arquette, su relación con la cámara en esta cinta es pasional haciendo que vayamos del amor al odio en un solo y corto paso.

David Bowie a través de Nathan Adler, persiguiendo las líneas discontinuas amarillas, intentando cazar algo de cordura en el mundo de los sueños rotos....I´M DERANGERED. Rebobina y que continue el juego.

Carretera perdida es una obra de director. Compleja como ninguna, solo es superada en este aspecto por la ópera prima de Lynch Cabeza borradora.

No son pocas las escenas memorables que contiene esta pelicula, tiene una fuerza inusual que hace provoca a la vez que perturba al espectador. El onirismo vuelve a tener un papel vital en la pelicula, en este caso linda con la esquizofrenia,la locura, los deseos ocultos...

El recital de planos y enfoques imposibles del director es asombroso, sin duda Lynch hace grande esta pelicula. Para disfrutar una y otra vez. Un prodigio técnico que se podria colocar entre las mejores de la década de los 90.

Espléndido Bill Pullman. Increible Robert Blake.