Top of the Lake (Miniserie de TV)

"Top of the Lake" es una serie ciertamente hierática en la que es el marco, la atmósfera y algún que otro personaje lo que enganchan al espectador y hacen, de su conjunto, algo reseñable e interesante de ver, muy por encima de la trama como tal.

Jane Campion despliega todo su potencial y a su trabajo de dirección no se le puede poner un pero, pues la Nueva Zelanda rural que escenifica es realmente sugestiva. A eso hay que sumar tres nombres propios: Robyn Nevin como la madre de la protagonista, Peter Mullan como Matt Mitcham y, muy especialmente, Holly Hunter como GJ, uno de los personajes más hipnóticos de la década. Y ella está impresionante. Hunter es mucha Hunter.

Por el contrario, tenemos a Elizabeth Moss que, siendo una buena actriz, a mí no me termina. La veo, siempre, actuando, y haciéndolo de un modo forzado. Quizás aquí tenía sentido dentro del argumento, pero la he visto en varios lugares y siempre es así. Su personaje, a la par, es el menos interesante de ver. Los secundarios y la propia atmósfera se la comen.

Es una serie lenta y difícil, incluso podría decir que escasa en su conjunto, ya que no terminar de dar todo lo que promete, pero sin duda es un producto original, recordable y a tener en cuenta, recomendable para los fanáticos del thriller psicológico y también para los que aman los dramas intimistas. Es un poco de todo y ese todo está logrado.

Tiene un reparto magnífico. El punto exótico que le da el lugar donde transcurre es un aliciente más. Un guión con elementos surrealistas. La he recomendado a la gente a la que le gusta el cine, y no he tenido quejas. La directora era una garantía para mí... Con todo, una historia policíaca con una presentación especial.

Aprovechando el estreno de la segunda temporada de "Top Of The Lake", la serie australiana de Jane Campion, hemos aprovechado para recuperar antes la primera, cuya existencia desconocía por completo, con el marchamo de calidad que supone la presencia de la BBC en la producción, junto a Sundance Channel.

Dejando constancia de sus incuestionables virtudes, y que a mí desde luego me ha gustado (especialmente tras un poderoso capítulo final), me temo que puede tratarse de un ejemplo claro de serie que a duras penas soporta el formato, y que lejos de aprovechar la longitud del metraje para ahondar en las tramas paralelas y la hondura de los personajes, como por ejemplo ocurre en los 8 capítulos de "Godless" que comentábamos el otro día, anda demasiado en círculos, puede resultar reiterativa y hay elementos argumentales metidos con calzador, como todo lo relacionado con el personaje de la gurú interpretada por Holly Hunter. No puedo dejar de pensar que una película de 120' hubiera sido el metraje perfecto para contar esta historia de una forma más efectiva (dicho sea desde el respeto, claro).

Dicho lo cual, ahora lo bueno; una vez más un uso ejemplar de los espacios naturales, del lago y los bosques, para generar sensación de incertidumbre, misterio y amenaza, por momentos se pudiera relacionar con la primera temporada de "True Detective", que no es poco, o con "Twin Picks" o "Fargo". La composición de los personajes femeninos, inadaptadas sociales y víctimas directas de la violencia patriarcal, posiblemente el tema central en todo el cine de Jane Campion. Y las interpretaciones, con Elizabeth Moss a la cabeza, que interpreta a la detective que investiga la desaparición de Tai, y que como era de esperar, en virtud de su pasado, se ve involucrada en el caso más de lo que quisiera, y Peter Mullan, que interpreta al capo local y macho dominante.

Y como digo, el capítulo final con un par de giros argumentales extraordinarios, y que a mi modo de ver, cierra de manera solvente una serie que no anduvo lejos de hundirse en el propio lago.

A ver qué tal la segunda temporada que se estrenó hace poco, con seis capítulos esta vez.

Una historia llena de misterio que te atrapa y engancha desde el minuto 0.
Una naturaleza salvaje, unos paisajes increíbles, importantísimos dentro de la historia.
Personajes cautivadores, que producen empatía, y te enamoran.
El misterio, el interés, el suspense se mantienen a lo largo de cada minuto pegandote a la pantalla.

Es una de las mejores series que he visto hasta la fecha junto con Homeland, The Newsroom, y Game of Thrones.