Cómo defender a un asesino (Serie de TV)

El comienzo atrapa por presentar una visión distinta de las series de abogados mostrando como se defiende a un culpable embarrando la cancha pero a medida que va avanzando la trama abruma con todo lo que va mostrando.¡ haciéndose cada vez menos creíble.

El guión apela mucho a la estética visual tipo 'videoclips' musicales (escenas rápidas, idas y vueltas de imágenes) que es un estilo que no me gusta en series y largometrajes (quizás por un tema de edad) y también se abusa mucho de los 'flashbacks' para explicar situaciones que sucedieron y serían inentendibles sin esos retornos al pasado.

Hay mucho erotismo vulgar que termina ofreciendo libertinaje e infidelidades por doquier; quizás podría verse como un logro, que para mí no lo es, el contacto físico entre personas de un mismo sexo..

A medida que avanzan los episodios la serie se va enredando cada vez más hasta que terminan cansando y agotando todas las jugarretas y argucias legales como así también los enredos en las vidas íntimas de los personajes.

Regular fue mi voto; me cansó: ¡dejé de verla!

Ritmo trepidante, juego de espejos con un guión descaradamente a la inversa, pero con giros que no sospechamos pero que necesitamos como espectador. Sus puntos fuertes pueden llegar a ser sus desventajas: el espectador puede llegar a necesitar de giros dramáticos, al ser llevado al límite, pero nunca cayendo en la falta de verismo, aunque sea ficción. Personajes tópicos pero esculpidos a base de cincel interpretativo de calidad, que se deshace de las muescas que le pueden sobrar, sobre todo Viola Davis. Sus desgarradores momentos interpretativos pueden llegar a ser míticos. La trama, aunque convulsa nos va llevando sin casi pedírselo, contando con diálogos y tramas engarzadas y sin fallo alguno.

HTGAWM, o Como Defender A Un Asesino (en España), es sin duda una muy buena serie, tiene todos los ingredientes: excelente reparto, gran guión y ritmo frenético, pero su problema es ese, que tras mas de 80 capítulos se ha convertido en eso, en una receta con todos los buenos ingredientes que se pueden tener, pero sin mucho sentido.Y digo sin mucho sentido, porque es evidente el desgaste que ha sufrido, por eso se agradece mucho que tras 6 temporadas, esta ya sea la última.
Destacar sin duda a la gran Liza Weil, que está magnifica como Bonnie, un personaje que tiene un arco argumental brutal y una interpretación magistral, siendo sin duda mi descubrimiento de esta serie. Viola Davis no es un gran descubrimiento, porque ya estamos acostumbrados, pero su Annalise Keating es uno de los mejores personajes de la ficción americana de la historia, sin palabras.
Resumiendo, merece la pena porque es adictiva y engancha como ninguna otra, pero esperemos que le sepan dar un buen final, un final que falta le hace para morir como la gran serie que es (o fue).

Creo que alguien debería decirle a los creadores de series que paren un poco. No vale toda aquella serie en la que el rompecabezas es tan tan grande que no hay quien se entere de la trama, con tanto salto de montaje de planos y saltos temporales.
La serie no esta mal, es decir, esta bien para pasar el rato, pero es que se le va la cabeza a los guionistas y al final parece que matar a alguien deja las mismas secuelas que tomar un café algo caliente.
Otra cualidad de esta serie es la cantidad de personas bisexuales que aparece en ella, eso le da su punto.

Una serie USA del 2014, de 6 temporadas y 90 capitulos, de una media de 42 minutos, con una valoración de 5/10, bajo dirección y guión de Peter Nowalk.

Que solo en el cine eeuu se le podría ocurrir, con argumentos y situaciones, en que la imaginación podría conseguir. Una fantasía judicial, bajo una mezcla universitaria, que personalmente creo no aporta nada, y se convierte en una americanada del montón sin pena ni gloria, en la que a la media hora me entraron ganas de cambiar.