Alpha Dog

Tiempo líquido para un proyecto donde las grandes estrellas se limitan a interpretar personajes secundarios, entregando todo el peso de la historia (no podía ser de otra manera) a los actores más jóvenes.

Violenta, accidentada, construida a saltos y golpes de efecto que no afectan demasiado a su progresión. No me ha gustado, no me ha entretenido y estaba deseando que terminara.

Un trabajo del 2.006 que ha sido valorado generosamente en esta página, tal vez por sus estrellas o algo que contenía y con lo que yo no he logrado conectar.

Nick Cassavetes autor de “El diario de Noa” o “John Q.” no se despega del nombre de su pater. Obviamente pater sólo hay uno y esta película lo deja claro. Aparecen Bruce Willis y luego Sharon Stone mirando a cámara y uno se pregunta, ¿era necesaria esa estela de mockumentary?

Película de jóvenes mafiosos burgueses que dan forma a una investigación en forma de reportaje. Pese a estar basada en hechos reales resulta inverosímil. Tiene humor, algún momento y una combinaron de violencia con el genero teen que la deja a años luz de una partida al GTA o la reciente “Brick”. Acaba, simplemente, por agotar al espectador.

Justin Timberlake no acaba de cuajar nada en la gran pantalla. Al final viene el drama, tan dramático como ver a la Stone caracterizada con 40 kilos de más. Cosa que, seguramente, la salvó de otra nominación a los Razzies.

Basado en hechos reales. Seguro. Veamos, que una panda de chavales con ínfulas de narcos, secuestraran a otro, y al final se lo cargaran, me lo creo. Pero que durante el secuestro el chaval se drogue, vaya de cool, y hasta haga un trío simplemente no cuela.

Así pues, el intento de Nick Cassavetes, de mostrar una película dura, cruda y realista se hunde por todos lados; lo que parecía un intento de imitación de pelis de Larry Clark (por otro lado lamentables) acaba convietiendose en la translación visual de cualquier novela de Bret Easton Ellis.

Nos encontramos con un grave problema de reduccionismo, todo se limita a girar en torno a los manidos tópicos de niñatos que se creen gangsters, zorras, fumadores compulsivos de maría, carros, pipas y fiestas. No se indaga psicológicamente en los personajes, solo son patéticas figuras que responden al cliche que el espectador desea ver: el jefe chulito, el macarra que en el fondo es un buenazo, los sicarios empanaos, el sumiso con problemas de ira contenida y para rematar, una especie de trasunto del personaje de "The Believer", un judio que va de nazi (interpretado por un sobreactuado y repelente Ben Foster) y que es experto en artes marciales.

Pero lo peor está por llegar, puesto que a pesar de todo esto la película mola, tiene un buen sentido del ritmo y aunque el casting es desigual, las actuaciones por lo general son más que correctas.
Por tanto lo mejor que se puede hacer con un producto así, se trata de no darle demasiadas vueltas, verlo, y disfrutarlo como lo que es, otra más de gangster de tres al cuarto que, por un momento casi, tuvieron su momento de gloria.

Lo mejor: Su ritmo
Lo peor: un epílogo alargado innecesariamente.

ALPHA DOG trata la historia real de Jesse James Hollywood ( en la película se le llama Johny Truelove) que fue el delincuente más joven perseguido por el FBI.
El director Nick Cassavetes ("El Diario de Noa", "John Q") cambia totalmente de género para mostrarnos una historia de bandas y narcotráfico en un barrio de Los Ángeles (California) en una mirada y sobrecogeroda de la cultura juvenil actual tratando las últimas 72 horas de un grupo de jóvenes.
Johny Truelove vive su propia versión del sueño americano; es joven, nada en dinero, posee varios coches deportivos. Vive en una lujosa casa de uno de los vecindarios más exclusivos de Los Angeles, en la que organiza fiestas llenas de chicas y rodeado de sus amigos. Todo gracias a su próspero negocio como traficante de drogas. Pero esta vida de ensueño está a punto de desmoronarse por un problema de dinero con Mazursky.
Bruce Willis y Sharon Stone hacen un papel secundario como padres en diferentes situaciones aunque aparezcan en primera fila del cartel. (La Stone está bastante bien).
Timberlake hace de "Frankie" el amigo de Truelove, algo simplón y alocado, gana bastante protagonismo a medida que avanza el film.(Justin está mucho mejor que en "Ciudad sin ley").
Emilie Hirsch hace de "Truelove" en lo que es su mejor papel después de éxitos como "La vecina de al lado" y se convierte en un actor prometedor con gestos en pantalla que recuerdan a Leonardo Dicaprio en sus comienzos.
El joven Anton Yelchin hace del chico y el hermano de Mazursky en la que a medida que avanza la película se hace en el personaje principal por encima del mismo Truolove.
Mazursky es interpretado por Ben Foster y trata un rol de un adicto a las drogas y peligroso delincuente además de pirado. Ben está genial en su papel (recuerda algo a Edwar Norton en American History X).
A partir de aquí un elenco de caras conocidas de cine y TV como Olivia Wilde (la lesbiana "Alex" de THE OC), Vincent Kartheiser (Connor en la serie "Angel"), Shawn Hatosy (el Quaterback titular de la taquillera "The Faculty"),Paul Johansson (Dan Scott en "One Tree Hill"), Dominique Swain (la niña en "Cara a Cara" exitazo en el 97 con Cage y Travolta), Chris Marquette (siempre de pringao feo en comedias románticas como "La vecina de al lado" o "Solo amigos), Amanda Seyfried (de la televisiva "Veronica Mars")...

Para buena parte del público y para una no menos considerable proporción de la "crítica especializada" se trata, como mínimo, de una de las mejores películas estadounidenses de 2006. No hay que olvidar que, para toda esta peña, cualquier peli tiene un valor añadido si, como ésta:
a) Está basada en hechos reales.
b) No es la "típica película americana" (¿?).
Vayamos por partes. Por poner un ejemplo, Astérix también está basado en hechos reales; el que no se lo crea, que eche una ojeada a la "Guerra de las Galias", del mismito puño de Cayo Julio César. Otro: "La ciudad no es para mí", la de Paco Martínez Soria, también está basada en hechos reales, que se lo pregunten a los millones de españoles que durante los años sesenta abandonaron su pueblico en busca de la gran ciudad.
En cuanto al segundo apartado, ¿qué es una típica película americana? ¿Una de John Wayne -tal vez "Río Rojo" sea igual que "Boinas verdes"? ¿O tal vez una de Spielberg -supongo que "La lista de Schindler" es clavada a "E.T."-? Ahora bien, si resulta que la típica película americana es una con adolescentes descerebrados, sexo, drogas y mucho rap, entonces me parece que sí estamos ante una típica película, pero no americana, sino mediocre. Lo que las imágenes cuentan en casi dos interminables horas se podría haber ventilado en la mitad, porque creo que el director también debía de andar algo pasado de maría. Papás yuppies e hijos desbocados, cochazos, tías buenas y nada nuevo. Completamente prescindible. La Stone, histérica perdida. Lo mejor, Justin Timberlake, que ya tiene coña la cosa. Al salir de clase, pero por la puerta grande, con un par. Cassavetes y no vuelvas por una temporadita.
Otra cosa, ¿qué sería una típica película española? ¿"Raza"?, ¿"Manolete"?, ¿"Torrente"?, ¿"El castillo de Mete-saca"?, ¿Una de Almodóvar?