Al límite

Cansino y aburrido thriller protagonizado por Mel Gibson (al que ya se le ven los años) y dirigido por un poco inspirado Martin Campbell, donde la interpretación de Gibson, la dirección de Campbell y el entretenimiento son completamente inexistentes.

Uno se hace un cacao enorme con el argumento, sin fuste, carente de lógica e inverosimil, mezclando un homicidio con política, armas nucleares y radiaciones. Una mierda de argumento, hablando claro. Siempre he pensado que un buen argumento es el que tiene un hilo directo, sin ramificaciones. Mel Gibson está más soso que de costumbre, y el estilo de su personaje no ha cambiado en absoluto en lo que respecta a sus papeles anteriores. A Gibson no le ha sentado bien estar 8 años sin hacer ninguna película como actor. Casi mejor que siga dirigiendo películas, que ya está viejo para hacer películas de acción, y el abuelo Gibson ya está pasado de moda.

P.D. Joder Gibson, para estar 8 años sin hacer nada como actor y que después vengas y hagas esta mierda de película resulta decepcionante, incluso para los que no somos fans tuyos. Si no hubieras hablado tanta gilipollez antisemita los grandes productores y directores (que en su mayoría son judíos) te habrían dado mejores oportunidades.