Mud

La verdad es que esta película me ha gustado bastante. Los personajes de los dos niños son adorables, y la historia entre ellos y el protagonista se vuelve cada vez más emocionante. Por un lado, ese instinto aventurero que todos hemos vivido de niños se ve perfectamente reflejado. Por otro lado, las duras historias de los personajes hacen que te remueva por dentro. Por último, la moraleja final y la búsqueda de Ellis (el niño protagonista) de pruebas para no dejar de creer en el amor para mi le da una matiz de ternura muy bonito. En definitiva, se trata de una gran historia, con muy buenas interpretaciones (ole por Matthew McConaughey, y por Tye Sheridan que promete muchísimo como actor), un gran guión, y por tanto una gran película.

Película sencilla en cuanto a su producción, pero de contenido muy rico, variado, bien conjuntado en su guion y acertadamente desarrollado por el director; exponiendo muchos de los sentimientos y emociones de la condición humana, tales como el amor, desamor, odio, soledad, amistad, lealtad... Film, al mismo tiempo, iniciático para los dos jóvenes adolescentes, casi niños, que lo protagonizan, excelentemente interpretados por Tye Sheridan y Jacob Lofland.

Nada sobra, ni nada falta en este perfecto conjunto que nos muestra. además de lo citado al principio, la existencia de una fundada esperanza si no se deja de luchar por ella.

Por fin se estrena en España la última película del notable director Jeff Nichols después de la sombría "Take shelter". Aplaudida pero lamentablemente sin premio en el festival de Cannes, este es un precioso relato adolescente ( y no simplemente uno más) de iniciación a la madurez y la pérdida de la inocencia de dos niños, y en especial del protagonista Ellis. Bajo su perspectiva nos cuenta el director la historia, en la que su relación con el misterioso personaje que da título al film, será el causante del aprendizaje del niño. Y si Ellis ayuda a Mud para que intente lograr su objetivo, es por el amor hacia Juniper, la novia ausente. Todos y cada uno de estos personajes están muy bien interpretados por los actores, desde la naturalidad de la pareja de niños (sobre todo Tye Sheridan del que recae casi todo el peso de la película), hasta el veterano Sam Shepard. También, el carismático y complejo personaje de Matthew McConaghey, que desde que tiene una vida personal más estable, está haciendo buenos papeles: "El inocente", "Magic Mike" y aún nos falta por ver su actuación en un film por el que dicen que optaría al Oscar "Dallas Buyers Club"), y la chica del film, la oscarizada Reese Witherspoon, que en sus contadas escenas destaca en un papel poco habitual en ella. Quizá en el tramo final, el realizador no evita entrar en lo convencional propio de las propuestas de Hollywood, pero la realización elegante y segura, la narración interesante y la precisa descripción de los personajes hacen que estemos ante uno de los títulos más importantes del año que inicia la temporada de otoño.

Una pequeña gran película, con mucho cine dentro, que cuenta con un bonito y emotivo guión, apartado técnico cuidado y excelentes interpretaciones. Me sorprendió especialmente la interpretación de los dos jóvenes (Tye Sheridan y Jacob Lofland), ambos unos completos desconocidos que firman interpretaciones ciertamente emotivas y creíbles. Generalmente los niños, cuando los sacas de la comedia, en este tipo de cine con un tono más serio resultan poco creíbles y en ocasiones resultan hasta insufribles o irritantes. Obviamente me refiero a los niños o adolescentes reales y no actores de 30 tacos interpretando al jovencito de turno.
Matthew McConaughey y Reese Witherspoon también brillan, aunque esto sorprende menos ya que han demostrado otras veces que con buenos guiones en sus manos son grandes intérpretes. El actor tejano parece tocado con la varita mágica y está viviendo sin duda la mejor época de toda su carrera.
Pero las interpretaciones son solo una parte de los aciertos que contiene Mud. Otro de los apartados a destacar es sin duda la dirección. Jeff Nichols ya sorprendió anteriormente con Take Shelter (2011) y con este filme se confirma como uno de los directores de la nueva hornada a seguir, junto al canadiense Denis Villeneuve. Resulta increíble que no decaiga ni un minuto en sus 130 minutos de duración. Nichols maneja el tempo narrativo como un reloj suizo, mostrándonos poco a poco el corazón de los personajes, sus demonios interiores, inquietudes y miedos. A ello ayuda también el magnífico guión, firmado por el propio Nichols, con la amistad, el amor y la transición desde la adolescencia a la edad adulta como temas principales. Por ponerle un pero, quizás el personaje de su actor fetiche (Michael Shannon) queda un tanto desdibujado en el boceto final. Aun así el resultado es de notable alto.
Conclusión, recomendable para todo amante del cine independiente y minoritario. Para aquellos que vibran con filmes como Un mundo perfecto (1993) o Cuenta Conmigo (1986).

Mud es una película sobre la necesidad de protegerse. A lo largo de la narración se van aglomerando una serie de advertencias que permiten que el espectador se percate de la particular moraleja que el filme quiere brindar.
En primer lugar están los diálogos entre Mud (Matthew McConaughey) y los adolescentes Ellis (Tye Sheridan) y Neck (Jacob Lofland). Estas escenas ponen el acento en el buen rol que puede tener la formación por parte de un hombre rebelde y enamorado. Y aunque resulte irónico, lo cierto es que en el avance de esta amistad, lo que se perfila es más bien a un hombre que es educado por un niño (Ellis).
De todas formas, el filme no solo va de esta relación, sino de la vida del mismo Ellis tratando de hacerse el macho para ganar el amor de Pearl, una veleidosa chica que lo único que hará será refrendar la gran experiencia que el filme quiere brindar: no se puede vivir del cuento del amor. También para ello aparece Reese Witherspoon para acabar de abofetear al espectador esperanzado que asume confiadamente que Mud puede ser una historia feliz o, tratándose de Reese y Matthew, de una nueva comedia romántico. Incluso el papel de Sarah Paulson, como madre de Ellis, se afinca en el mismo esquema: mujer: protegerse. Más allá de las expectativas, esta es una buena historia sobre la formación, sobre la voluntad, la valentía y la desgracia. Ah, y el mal de amores.