Haz click aquí para copiar la URL

Múltiple

Thriller. Intriga A pesar de que Kevin (James McAvoy) le ha demostrado a su psiquiatra de confianza, la Dra. Fletcher (Betty Buckley), que posee 23 personalidades diferentes, aún queda una por emerger, decidida a dominar a todas las demás. Obligado a raptar a tres chicas adolescentes encabezadas por la decidida y observadora Casey (Anya Taylor-Joy), Kevin lucha por sobrevivir contra todas sus personalidades y la gente que le rodea, a medida que las ... [+]
<< 1 2 3 4 10 58 >>
Críticas 288
Críticas ordenadas por utilidad
27 de marzo de 2017
36 de 42 usuarios han encontrado esta crítica útil
«Somos lo que creemos que somos», dice Bestia, la creación de otras veintitrés personalidades que conviven al interior de Kevin Wendell Crumb, un ser con segundo nombre al igual que los grandes asesinos estadounidenses. Ese diálogo frente al espejo es respondido por Hedwig (personalidad de un niño de nueve años): «Ahora sí creerán que existimos», es la estrategia que escoge el director de origen indio para hacer visible el mundo de la locura a una sociedad que tiende a esconder a sus locos. No es de extrañar que el director sea depositario del conflicto entre el pensamiento oriental y occidental para sorprendernos con su tesis extravagante: «los quebrados» producto del dolor representan a los puros, los únicos que tienen valor por sí mismos debido a que han sido anteriormente destrozados. En este universo ideado por Shyamalan «los quebrados» serían los seres evolucionados. Son puros (de sangre purificada), seres mágicos (Harry Potter) que mediante su pensamiento pueden despertar el gen dormido y aprovechar todo el potencial del ser humano. Por eso la existencia de la doctora Fletcher es tan importante, ella personifica al mundo científico que observa las paradojas del trastorno de personalidad disociativo, una mirada comprensiva ante la enfermedad que intuye algunos alcances, pero que en ningún caso está abierta a lo sobrenatural: un ente terrorífico de fuerza descomunal trepando por las paredes. Interesante y reflexivo planteamiento de Shyamalan que entiende que detrás de la tesis aparente, reflejada en un espejo, se esconde su antítesis: los seres quebrados (aquellos que sufren trastornos mentales) no representan a ningún movimiento, tan sólo son el fruto del dolor incubado a través de los años. Hábilmente el director introduce otra arista: en este universo «los quebrados» pertenecerían a una especie de religión que a través del dolor (no de la culpa) purificarían la sangre del hombre. Tan descabellado es este último argumento, que nos hace entender que la antítesis de este universo es el enfoque buscado por el director. Es un juego magistral de espejos que requiere el cien por ciento de las dotes actorales de James McAvoy, con el objeto de ver reflejados en su rostro las múltiples caras que componen a esta Bestia, multiplicidad de mundos internos que se contraponen a aquellos externos: la sociedad representada a través de un noticiario de televisión, las calles vacías y nocturnas. Casey Cooke (el otro personaje con apellido) constituye la otra cara de la moneda, la víctima que no ha enfrentado sus miedos, aquella que no ha dejado salir a su bestia y que espera al interior del auto (antes cárcel y ahora protección).

El juego entre luces y sombras es perfecto, pero deliberadamente confuso en su significación. La oscuridad está presente en los túneles, en los cuartos aislados tras los cerrojos, que simbolizan materialmente los diferentes recovecos de la mente de Kevin. Los cuartos subterráneos están definitivamente bajo el alero de la oscuridad, en gran parte de la película son el campo visual, en tanto el fuera de campo sería la luz, el mundo exterior, aquél donde se emplaza el zoológico humano, un lugar que tampoco es seguro.

Ese mundo oculto es el lugar donde descubrimos el conflicto profundo, el quiebre de este personaje fragmentado: el maltrato físico y psicológico de una persona en formación, peor si esa violencia proviene desde el interior de la familia y aún peor si se trata de abuso sexual. En la mente de Kevin no existe una familia funcional, sus múltiples personalidades son espejos rotos. Esperen de esos fragmentos un ser atormentado que quizás se refugie en el arte para catalizar el sufrimiento, o un ser perturbado que deba ser recluido en un hospital psiquiátrico, o bien esperen a la Bestia que canalizará su dolor en furia descontrolada, ya no sólo contra la familia sino contra la sociedad, un ser capaz de generar esa estremecedora imagen de James McAvoy doblando los barrotes con un rictus endemoniado.

M. Night Shyamalan utiliza el recurso del fuera de campo de una manera perturbadora. El espectador no estará a salvo en la luz ni en la oscuridad, tampoco encerrado en una habitación, en definitiva, los recuerdos implacables harán que cualquier lugar sea inconfortable. El «espacio exterior» no será lo visible a través del tragaluz de «Room» (2015), cinta de Lenny Abrahamson donde un niño secuestrado percibía el mundo externo como algo esperanzador. Ese punto de vista inocente de un niño que recibía todo el amor de su madre hacía del cautiverio un asunto secundario, en cambio, Shyamalan propone una dispersión del punto de vista en múltiples personalidades creadas para hacer frente al sufrimiento.

La película logró desatar el conflicto a escasos cinco minutos del inicio. Tuvo un desarrollo psicológico de gran espesor, el terror se fue colando desde lo claustrofóbico hacia lo sobrenatural. El origen de la violencia proviene del ser humano y una vez activada esa bomba de tiempo, el director nos sumergirá en aguas profundas para hacer aflorar emociones genuinas. «Somos gloriosos… ya no tendremos miedo», anuncia Bestia hablando en plural. «Sólo a través del dolor… podrás alcanzar tu grandeza».
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Anibal Ricci
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
31 de enero de 2017
68 de 107 usuarios han encontrado esta crítica útil
*********** Nota de cabecera (puedes saltarla) ************
Siempre que he leído críticas he esperado lo mismo de ellas, explicaciones con objetividad, criterio y concreción, tal vez por no encontrarlas mayoritariamente de este modo, me he decidido a registrarme como usuario.
Yo no tengo la razón absoluta pero intento aplicar toda la coherencia posible y considero que todo el que ama el cine puede criticarlo.
A mí personalmente, me fascina el amor con lógica.
******************************************************************

M. Night Shyamalan es un director que en cada película nos regala un destello de grandeza, pero por alguna razón pasó a ser el eterno director incomprendido, tiende a plasmar relatos cotidianos vistos desde un punto inusual y creo repite en exceso esa fórmula, pero por gracia divina es que nadie más lo hace como él, fíjate que en sus películas nada es lo que aparenta ser: El Sexto sentido, El bosque, La joven del agua o El protegido y ahora Múltiple mostrando de nuevo otra película con la misma idea y no solo le sigue funcionando, si no que aparentemente cada vez lo hace mejor, sí, no cabe duda, es la misma formula, pero que bueno que existes Sr. M. Night Shyamalan.


CRÍTICA en 3 puntos:

1) La historia
Creo que este director ha visto la película Marthyrs, tal vez pensó que podía hacer algo más comercial y menos gore y siendo dueño del thriller psicológico va y nos planta una película que nos tiene en tensión de inicio a fin, eso en si y después de las fallidas Nunca apagues la luz o No respires ya es un logro y es que Múltiple es una película bien construida, pero lamentablemente creo que es esa su única virtud, la historia esta bien pero tiene grandes incongruencias, ¿23 personalidades?, ¿para que tantas? si apenas me vas a mostrar a 3 o 4 y además no te vas a tomar la molestia de construirlos bien, todas las personalidades son prácticamente superficiales, la fotografía no acompaña, la bso tampoco, ni las subtramas y se espera mucho más del papel de Anya Taylor Joy, el giro de guión es nulo y solo el final es la gran vacilada de M. Night Shyamalan, porque admitámoslo, para los que entiendan el final todo parece apuntar que M. Night Shyamalan vendrá con la segunda parte de una de sus grandes obras y cuidado que la confrontación entre el bien y el mal puede ser apoteósica si lo que plantea se convierte finalmente en una película.
Creo que la historia podría haber sido más oscura, con mayor profundidad y que podría haber creado una obra maestra del cine de terror, aun así, la película se sufre y se agradece.

2) Interpretación
James McAvoy está en el punto de mira, interpretar a un personaje con personalidad múltiple parece de esos papeles de Oscar, pero su trabajo es fallido, creo que todo está estereotipado en este aspecto, con alguna que otra personalidad ridícula y la escena del desdoblamiento donde va de personaje en personaje en un mismo plano lo acerca más a un hombre con tics en la cara que a las expresiones de una mente desfragmentada, también creo que era una labor difícil.
Anya Taylor Joy debería tener un carácter con secuelas psicológicas mucho más presentes en cada plano, dignas de un giro de guión o de una oscura subtrama, predecible, plana y casi innecesaria.

3) A destacar
La tensión, la personalidad número 24, las explicaciones de la doctora sobre como una mente da vida a una personalidad haciéndola real y adoptando físicamente sus cualidades y sobretodo, sobretodo a destacar el guiño del final.


CONCLUSIÓN:
Hay que verla, no lo dudes, no tendrás muchas oportunidades de encontrar thriller psicológico de esta calidad.

OTRAS PELÍCULAS INTERESANTES:
Identidad, Gothika, Session 9, Aparecidos, Alta tensión (2003), Frágiles, El resplandor, El sexto sentido, Los otros.

Gracias por entender mis maneras.
Cine Logic
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
29 de enero de 2017
76 de 127 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es que no aprendo. No hay manera. Porque las de cal ya no superan las de arena, y Shyamalán para algo interesante que pueda hacer, hace cuatro o cinco espantos que no hay por donde cogerlos. Vale, son muy chulos, muy bonitos, muy bien rodados... pero aunque tengan buenas ideas -en eso podemos estar todos de acuerdo en que los planteamientos de casi todas sus películas son por menos que "sugerentes"...- ¡¡¡menuda forma de cagarla, por favor!!! Por eso me pone auténticamente frenético que con envites tan inteligentes luego se queden en fuegos artificiales infantiles, con nulo interés.

Claro que después de "La visita", y aún más por la serie de televisión "Wayward Pines" (sobre todo, en la primera temporada) para mí este director volvió a coger algo de credibilidad. El problema es que las "sorpresas" que se guarda en la manga este director, a las que tan acostumbrados nos tiene, ahora son mamarrachadas de tamaño XXL.

Como en todas sus películas, el arranque promete: un enfermo mental con múltiples personalidades secuestra con intereses aterradores a tres chicas. En el desarrollo vemos el esplendoroso trabajo de McAvoy convirtiéndose en un niño pequeño, una elegante mujer o un implacable obseso. Una galería de personajes tan terroríficos... que terminas muerto de la risa. Un momento pero ¿risa? Pues sí, el peor pecado que puede cometer una película de terror: no solo no provocar miedo, sino una carcajada, porque es quizás el género más difícil, ya que pasar del miedo a la risa es cuestión a veces de muy poco.

Fui a ver la película con la sala llena a reventar -eso sí, el tráiler y toda la campaña de marketing ha sido impecable- y observé que la gente no saltaba de la silla, ni pasaba miedo, ni nada. Sólo había dos opciones: A) Roncar y B) Reírse. Como suena. Es lamentable desperdiciar el talento actoral del escocés James McAvoy -por otra parte demostrado en otras muchas ocasiones- con un guión no ya flojo, sino directamente estúpido, infantil. Y no lo digo porque además de crítico y guionista sea Psicólogo Sanitario y conozco perfectamente el Trastorno Disociativo de la Personalidad (que es en lo que basa el guión y toda la película), sino porque toda la historia no sabe encajar el tono adecuado: me explico, desde el principio uno de los personajes principales de la historia es precisamente la Doctora en Psicología que lleva tratando durante años a este chaval, enmarcada en un fuerte sentido científico, estudios, etc. Bueno, pues además de demostrar que esta prestigiosa señora (según la película, hasta da conferencias por Skype a las más importantes universidades del mundo...) es una terapeuta inútil (lleva años tratando a este señor y no es capaz de descubrir que su patología es muy peligrosa para él y para los que le rodean...), resulta que con esa pátina de "veracidad" nos intenta hacer tragar auténticas ruedas de molino argumentales -cambios en la estructura física por el pensamiento, entre otras muchas burradas de nula credilidad...- retorciendo el argumento según los propios intereses del guión.

Y así no funcionan las cosas: a ver, en un género tan particular como el del terror o la ciencia ficción la coherencia ha de ser de acero, o si no la historia no es creíble y no te la tragas, que el público de tonto no tiene ni un pelo. O sea, que si desde el minuto uno nos dicen, por ejemplo, que fulanito vuela por los motivos que sea (es un mutante, un extraterrestre, tiene una máquina en la cintura, está colgado de cables, o sencillamente levita por telekinesis...) pues muy bien, y ya no nos extrañamos de que vuele cuando le salga de los cojones. Pero si resulta que desde el principio estamos viendo una película realista, científica, sin artificios fantasiosos... y por la cara el protagonista sale como Supermán cuando va a rescatar a Lois Lane, todos los espectadores pensamos lo mismo: Perdona... ¿Me he perdido algo? Es exactamente lo que pasa en esta película. Todo es gratuito y surge porque "le viene bien" al guión, y cuando eso pasa una, dos, tres y así muchas veces, terminas por desconectar de la historia y ya te da igual si McAvoy aparece vestido de mujer, de fallera o de hombre rana.

Si encima tenemos un desarrollo realmente lento, que entra en bucle a partir de la primera media hora, y así se lleva hasta prácticamente el final de la película, pues tenemos una película muy bien vendida, pero que es un auténtico tostón. Y lo que es peor, un tostón por el argumento (que es de lo más rocambolesco, e indignantemente intentado vender como "realista") y por el desarrollo de la historia (tan lento como ver derretirse un cubito de hielo. Y con el mismo interés).

Ya no se lo perdono más: le rompo el pasaporte y no le sello más ni una de sus películas, por muy guais que sean -y lo son...-. Ya no me la metes más, Shyamalán, no me creo nada de ti y me he quedado con tu cara.
Federico_Casado
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de enero de 2017
44 de 64 usuarios han encontrado esta crítica útil
James McAvoy es espectacular, hipnótico, no agrego nada nuevo a lo ya dicho. Coincido con todos. Igualmente con respecto a Ana Taylor Joy, sobresaliente. Brillante también el uso de la cámara y toda la parte técnica. Tampoco agrego nada, Shyamalan sabe rodar, y muy bien.
El resto... hum... no sé. No termina de funcionar. No salí del cine diciendo "Qué peliculón de Shyamalan", antes bien al contrario. Lo que siento es que el tono de toooooda la laaaaarga primera parte, no tiene nada que ver con lo que sucede en el tercer acto y que no desvelaré aquí. Me da la sensación de Shyamalan quiere desesperadamente volver a que le llamen genio -como sí lo fue en El sexto Sentido, El Bosque y para mí, Señales- y se mete en jardines muy artificiosos y artificiales.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferquina
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de enero de 2017
38 de 55 usuarios han encontrado esta crítica útil
El año ha empezado con un buen thriller, una película que crea tensión a través de un argumento original e inquietante, un guión que tiene una gran investigación por detrás para plasmar bien un trastorno tan complejo como lo es el de la identidad disociativa.
Numerosas personalidades conviviendo en una sola persona es sinónimo de varios personajes distintos, dejando a la interpretación en un complejo plano al que McAvoy ha sabido hacerle frente, pues su actuación no deja nada que desear. Lo mismo tengo que decir de Anya Taylor, que es una joven actriz con una breve filmografía a su espalda pero que nos dejó clara su profesionalidad desde La Bruja de Robert Eggers.
Una vez más M. Night Shyamalan nos ha sorprendido con sus creaciones, una película con una buena trama que plantea la cuestión del límite de la capacidad de la mente humana, destacando que nada es lo que parece, a través de la tensión y algún susto.
Un consejo útil: No veáis el trailer.

Una opinión más personal es lo que me ha transmitido la película, desde el principio te mantiene en tensión, si no sabes de qué va Múltiple, te vas a identificar más con las chicas, ese miedo, desconocimiento, agonía... A su vez, se combina una especie de humor negro que le da un toque muy especial a la película. Otra cosa que me gustaría destacar es el dinamismo de los planos y de los detalles, pues dota al filme de una estética notable.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Bell
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 58 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow