The Bay

El faso documental, que empezó siendo un género que se constituía a partir de "cintas encontradas", ha evolucionado y se basa en la moderna sociedad de la información y de la Web 2.0 para integrar grabaciones de móvil, conversaciones de chat y de Skype, en fin, cualquier material vale para contar una historia. The Bay es la madurez de este género y traza un nuevo camino para construir películas en torno a un acontecimiento social.

Como película de terror coral, que incorpora distintos enfoques y perspectivas (el periodístico, el médico, el político, el meramente social y anecdótico), resulta estremecedora. El agua contiene unas larvas que causan el terror durante la celebración del 4 de julio en Maryland. El realismo es asombroso y se consiguen escenas muy logradas, que ponen el pelo de punta. Por no revelar demasiado, podemos fijarnos tan sólo en el momento en que la reportera empieza a oír gritos de dolor y desesperación desde distintas procedencias, en medio de un entorno urbano más o menos idílico. De esta manera tan sencilla se nos muestra la tragedia que viven miles de personas durante aquel día, en soledad y absolutamente desamparado por los estamentos que deberían protegerlas, pero que aquel día fallan: es el poder de la política y de la economía.

Absolutamente recomendable tanto por lo que cuenta, como por cómo lo cuenta. Reconozco que estoy muy interesado en los "falsos documentales" y que lo he visto todo a este respecto, también los malos. Pues bien, "The Bay" es de los mejores.

Tenía buenas referencias sobre este film, todos me decían que era el resurgir de el género "cámara en mano", nada más lejos de la realidad.

The bay, es como un experimento de lo que ocurriría si las bacterias de los peces dieran el salto evolutivo, hacia nosotros.

No tiene nada especial, empieza como todas, incluso entra en materia rápido, pero ahí se queda, porque en definitiva no hay nada que mostrar.

Todo son conversaciones por skype, hablar y más hablar entre médicos, en verdad es interesante, pero cuando me di cuenta de que al cabo de una hora, no ocurre nada relevante, mi mosqueo crece, esperas y esperas hasta el final, pero nada.

Total, una extrana cinta, que ni contiene terror, sus tintes ecologistas son más que evidentes, no entiendo cómo un director así hace semejante esperpento, con un montaje tan frío que es imposible empatizar con nadie.

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A mí me ha parecido una historia enormemente desgarradora. Para mi gusto está muy bien realizada y consigue su objetivo. Es difícil decir que he disfrutado viéndola, pero creo que ese precisamente es su objetivo, incomodar profundamente al espectador.

La película trata de un desastre ecológico con terribles consecuencias. Soy una persona preocupada por el medioambiente, aunque poco paranoica a corto plazo. Sin embargo esta película acojona y te hace preguntarte si algo así de horrible podría llegar a pasar.

En mi opinión, lo que quizás a mucha gente le parezca un montaje barato y chapucero (ya que las imágenes y los diálogos están muy enmarañados), en realidad es un trabajo de increíble precisión, medido a la perfección y con el único destino de crear desasosiego en las mente del público, dándole una apariencia de realidad que hace que la historia te cale hasta el fondo y que te produzca verdadero temor ante la situación que estás viendo.

En realidad situaciones parecidas han sido reales: petroleros que se hunden, centrales nucleares con fugas, etc… quizás está cinta aparentemente de ciencia-ficción, no debería estar tan enmarcada en la ficción. El cine a veces trata de exagerar ya que la pantalla nunca nos puede producir las mismas sensaciones que la realidad, y para ello usan el mecanismo de la exageración. Pero en cualquier caso a mi me ha causado la sensación de que debemos exigir mayor control sobre la industria y las autoridades que velan por la seguridad.

Mi recomendación es que no la escojas un día que te apetece una de Zombies o algo así para desconectar un rato. El tráiler y la portada pueden engañar un poco y parecer que eso es lo que vas a ver. Ya os digo yo que no hay zombies. En lugar de eso te vas a encontrar una cinta bastante seria, que intentará absorberte dentro de la pantalla en una historia de apariencia muy real (pero que nadie se confunda, que esto es una peli), y que no pretende hacerte pasar un buen rato y evadirte, sino más bien comprometerte y hacerte reflexionar.

Años han pasado desde "The Blair Witch Project", pasando por "REC", la mismísima "Paranormal Activity" esta última del director de "The Bay (2012)", y antes de ésta a mi criterio no creo que hayamos visto la mejor película dentro del género "falso documental", bueno, tal vez "Diary of the dead" the George A. Romero.

La cuestión es que The Bay, nos presenta el horror vivido por una población costera en Maryland (EE.UU.) a causa de un brote bacteriano por un parásito voraz, muy salido del cine de ciencia ficción, pero que por cierto, no lo es del todo de ciencia ficción, ya que el parásito citado, que infecta a la población en cuestión no es inventado, existe, y se trata del único parásito que en peces puede suplantar la función de un órgano, la lengua del pez. Es en esto que la película en cuestión está perfectamente lograda, puedo asegurar que Barry Levinson (Director) y Michael Wallach (Escritor) no escatimaron esfuerzos en mantener al espectador soldado a la pantalla durante un lapso de una hora y media.

Puesta aparte argumentos como el de ésta película nos recuerdan a documentales ambientales reales como el desastre de Chernobyl, se han realizado muchos documentales desde lo sucedido en 1986 en Chernobyl, y como en aquel año, el gobierno y demás yerbas se ocuparon muy cuidadosamente en ocultar los hechos. Básicamente, si comprenden a donde voy, diría que The Bay, al mejor estilo ciencia ficción, terror, misterio y hasta thriller nos muestra todo el esplendor de la censura que se le coloca a los medios de prensa sobre la comunicación de ciertos acontecimientos y en este caso la protagonista Donna Thompson, aparece narrando en el año 2012 sucesos que corresponden al año 2009 en Chesapeake Bay, Maryland, donde este brote causado por un parásito voraz ocurrió.

Mi opinión es que ésta película es original y bien centrada, como falso documental nos da a pensar sobre el daño que hacemos al ambiente al arrojar desechos a océanos, lagos, ríos, etcétera, y lo que éstos pueden causar a nosotros mismos.

Pero para finalizar, puedo decir que la variedad de grabaciones que éste falso documental pretende mostrarnos nos atrapan, las "supuestas" grabaciones de testigos de la catástrofe natural están perfectamente ordenadas, lo que logra que el espectador se mantenga atónito frente a la reproducción, y no está de mas para finalizar el mencionar que el hecho de un cuerpo extraño que amenaza y se alimenta de las entrañas de una persona constituye quizás una de las mas ominosas experiencias no tan mostradas adecuadamente en pantalla.

Sin mas que decir, recomiendo éste film para quien tenga ganas de deleitarse con un falso documental a mi criterio perfectamente logrado.

Barry Levinson es autor de unas cuantas (bastantes) películas detestables, de las que tal vez salvaría El mejor, Rain Man y Bugsy, las que me dejaron mejor sabor de boca. De repente, cuando ya lo había borrado de mi lista de habituales, se descuelga con una cinta barata, en ese estilo falso documental que tanto se prodiga en los últimos tiempos, hilvanada a base de retazos de grabaciones encontradas en cámaras, móviles y demás artilugios que tanta seguridad prestan a nuestras vidas (¡oh, cielos!). Partiendo de unos hechos reales, la espantosa contaminación padecida por el lago de Chesapeake, en el que murieron millones de peces, y con la evidente intención de abogar por un cambio en la permisividad hacia quienes destruyen alegremente nuestro planeta para forrarse, Levinson compone una angustiosa historia en que es la propia vida humana la que es amenazada por el resultado de la altísima contaminación. Rodada con cuatro chavos y el entusiasmo de un chaval (siempre una buena combinación), The Bay bebe de las fuentes de Tiburón, de Piraña y de tantas otras que se han acercado a esta temática, pero en un tono casi apocalíptico y unas imágenes descarnadas que acongojan por su tono realista. Tal vez sea éste el camino que deba tomar Levinson en el futuro: menos pretensiones y más humildad. De momento, nos ha dejado una cinta de terror que tardaré en olvidar.