Magic Mike

Cuando Channing Tatum comenzó a mover un proyecto contando su pasado como stripper, casi nadie le escuchó, y tuvo que pasar mucho tiempo hasta que alguien, ni más ni menos que un tal Soderbergh, quiso abordar el proyecto y llevarlo a la gran pantalla. Y es raro teniendo en cuenta que si en vez de tratarse de chicos, los protagonistas hubieran sido chicas, se lo hubieran rifado casi todas las productoras.

Así somos. Y aunque Soderbergh haya querido crear una película independiente con bajo presupuesto, su desarrollo no puede alejarse menos de cualquier película con mayores recursos, con su trama de superación personal, su drama, su historia de amor...El truco está en contarlo todo de la manera en que se hace: a su manera. Sin mayores pretensiones que crean falsas expectativas y sabiendo lo que se está haciendo.

La verdad es que, por momentos, parece que importan más los bailes extremadamente coreografiados que la vida de los protagonistas, porque exceptuando a Tatum y su protegido Pettyfer, el resto incluido McConaughey son simples comparsas que bailan, se mueven y actúan al son que marca el jefe. No sabemos nada de sus vidas, ni sus motivaciones ni cuales son sus aficiones. Bueno, de los otros tampoco, pero por lo menos parece que importa un poco más. Actuaciones sencillas y poco trabajadas, mas bien porque no era necesario esforzarse más.

Finalizando, la pequeña crítica que se hace al sistema bancario no es más que una anécdota dentro de una película que no quiere trascender a pesar de que durante su duración parezca querer hacerlo, pero que parece haber encontrado un hueco que le permitirá producir una segunda parte. Así somos.

Aquí tenemos el nuevo film del prolífico Steven Soderbergh, una película entretenida aunque no es una de sus mejores obras.

En ella nos narra como Adam (Alex Pettyfer), un perdido veinteañero llega a Tampa para buscarse la vida. Adam conoce a Mike ( Channing Tatum ) y le introduce en un nuevo mundo, el de los strippers. Abdominales perfectos, bailes sensuales y un publico femenino extrañamente joven y atractivo ( se hecha de menos alguna señora mayor en su clientela no??? ). La película se centra en la relación de estos dos personajes, Adam el jovencito ha descubierto una nueva vocación, el dinero fácil, las mujeres y todo lo que conlleva. Por otro lado Mike esta cansado de este mundo nocturno y siente la necesidad de cambiar de rumbo empezando su propia empresa, como nexo entre los dos aparecerá la hermana de Adam.

Película que en ciertos momentos me ha recordado a otras que han tratado este mundo peculiar como Show girls aunque sea levemente, o también a boggie nights.

A medida que avanza la película pierde ritmo, se hace un poquito lenta y previsible, desde mi humilde opinión le sobran minutos. A destacar el papel de Tatum que por lo que he leído tiene de autobiográfico y impresionantes también los bailes que se marca.

Y no el tamaño de "eso", malpensados, sino el de la película.
Lo primero y mejor que se puede decir de Magic Mike es que no es El Bar Coyote, aunque en principio lo pueda parecer. Las similitudes acaban en unos personajes que se dedican a dar un espectáculo sexy para miembros del sexo opuesto. Pero donde la película de David McNally era un prodigio de estulticia, diálogos vacíos y machismo rampante, Magic Mike triunfa como una película mucho más interesante y dramática de lo que cabía esperar viendo las fotos promocionales.
No es una película de tíos en pelotas haciendo striptease a diestro y siniestro. Nada más lejos de la realidad. Es un drama acerca de la mala vida, los sueños rotos, la caída en un pozo sin fondo del que cuesta mucho salir, la rivalidad y la amenaza de todo lo extraño en algo que ya está consolidado (la presencia de Adam en el grupo de strippers). Magic Mike habla de todo eso, y lo hace con unos diálogos muy cuidados (cosa que tampoco tenía El Bar Coyote) que logran transmitir ese dramatismo y esa trascendencia que baña la película entera. No se trata de plasmar conflictos shakespearianos con exquisita prosa, pero el libreto de Reid Carolin triunfa cumpliendo los propósitos que se ha propuesto. Ese es el mayor éxito de la película: da lo que promete (escenas sexys para que babee con los guapos muchachos quien así guste) y además un muy buen drama que, pese a ser convencional y nada arriesgado, funciona a la perfección.
Gran parte del mérito, más que de Soderbergh (cuya mano maestra se deja ver, sin embargo, en la escena en que Adam colapsa en el club) es de los dos protagonistas. Channing Tatum está fantástico, dejando de lado su habitual cara pétrea para mostrarse más vulnerable que de costumbre (ver la conversación en que Mike anuncia a Brooke sus planes de futuro). Alex Pettyfer, al otro lado, plasma con dolorosa credibilidad el descenso a los infiernos de su Adam, un buen chico que, como tantos, se deja llevar por el lado salvaje de la vida. Matthew McConaughey completa el trío maravillas con una actuación que, si bien tampoco es para darle ese Oscar que tanto se anticipó (muy exagerada, la verdad, esa apreciación), si resulta la mar de divertida y carismática, y demuestra el gran actor que es y que no siempre se deja ver, la verdad.
Es una pena que los personajes femeninos sean tan pobres y estén tan llenos de clichés, y sobre todo que el guión no desarrolle algo más los roles de los otros strippers (unos Matt Bomer, Kevin Nash, Joe Manganiello y Adam Rodriguez que hacen lo que pueden con lo poco que les han dado para trabajar) y, sobre todo, que olvide dar una conclusión a la trama de adicciones de Adam (¿qué hay que inferir al final? ¿Seguirá con su estilo de vida o no?). Son fallos que impiden que la película alcance una nota más alta.
Pero aun así, es un ejercicio muy interesante de Steven Soderbergh, y una película perjudicada por los prejuicios y por el hecho de que parezca que sólo importan los cuerpos de gimnasio de sus atractivos protagonistas.

Lo mejor: Tatum, Pettyfer, el tono dramático de la propuesta y los buenos diálogos de que dispone la película.
Lo peor: Los personajes femeninos son un desastre (y las actrices, excelentes, quedan desaprovechadas) y el guión se olvida de los otros strippers y de cerrar algunas tramas.

Me gusta el cine que no se toma a si mismo demasiado en serio. MAGIC MIKE, es una peli de strippers, sin argumento... pero, también es cierto que para mostrar a un grupo de tíos buenos frotándose con chicas, no hace falta mucha trascendencia argumental.

Es divertida, un poco loca... y al parecer fue una especie de película de encargo al director Steven Soderbergh, que desliza su ¿talento? sin desafiar jamás lo esperado. Una especie de paseo con piloto automático.

Los añadidos a la trama, no aportan mucho. Parece como si gustase que el espectador percibiera cierta humanidad, añadiendo secuencias donde mostrar el lado mas tierno de Channing Tatum.

Voy a empezar mi crítica dando un consejo: Estar en el desierto 2 horas tirando pan para las palomas que nunca van a llegar es más fructífero que estar viendo esta película. Dicho esto, me explico. Los 75 primeros minutos no ocurre nada trascendente, sólo se ven strippers desnudándose, emborrachándose y de fiesta. ( Lo único q se salva algún baile y en especial el doble del actor principal que sabe moverse, no voy a decir que no, de ahí mi 3) la verdad que tampoco me ha quedado claro el género de esta bazofia, se supone que es de comedia y de drama. Bueno pues ni una cosa ni la otra, ni me ha parecido divertida ni un drama. simplemente vacía y sin contenido.
Tengo que decir que he leído las críticas que hay puestas en la portada de esta peli en filmaffinity y sinceramente creo que los que le dan un 4 de 5 en puntuación( Que es más de 1) deberían replantearse seriamente su trabajo, aunque prefiero pensar que la noche antes de hacer las críticas estuvieron todos juntos de fiesta y se tomaron lo mismo ( a saber que se tomarían)

POSDATA: Parece ser que cada día es más fácil ser director, guionista, productor, etc, etc ya q la exigencia es mínima o en casos como este nula.