Los buenos modales

Sencilla y divertida. Subyace la soledad de las abuelas en los nidos ya vacíos, su fundamental papel en la crianza de los nietos y la crueldad de nueras desagradecidas. Buena interpretación, magistral en el caso de Elena Irureta (como siempre). Es una película a la que sólo un buen cuadro de actores puede darle sentido.

Acabo de ver esta película española y me ha parecido una cinta bastante conseguida. Con unas actrices soberbias en todos los registros y un guion decente, lo que no es poco en los tiempos que corren, me parece un buen ejemplo del cine que nos representa.
He visto que se la considera almodovariana en varias críticas y, aunque no llegue a la maestría del manchego, bebe de las mismas vivencias que todos los mayores de cuarenta recordamos. Así que, aunque darle un notable puede parecer demasiado, a mí me entretuvo y me hizo pensar, sonreir y emocionarme en algún momento y admiro el trabajo de su directora, de quien ya vimos "Mi querida cofradia", donde apuntaba maneras aunque no me resultó tan redonda como ésta.

Es una lástima que unas actrices de semejante potencial se vean desaprovechadas en esta historia de guion escuálido. Un oscuro secreto planea sobre la cinta y es lo único que nos salva del bostezo, aunque se intuya por dónde van los tiros. La película parece un episodio de cualquier serie de sobremesa. Humor tampoco hay, a pesar del juego que podrían haber dado los conflictos familiares y vecinales, y la cosa se queda en un par de escenas que apenas arrancan una sonrisa. La verdadera chicha de la historia, los nidos vacíos y la vida de las abuelas, está algo mejor desarrollada. Poco memorable, en resumen.

Gira en torno a dos hermanas que se reencuentran después de años sin hablarse debido a un secreto familiar. Los niños de ambas se han conocido gracias a sus cuidadoras, Trini y Milagros, quienes intentarán reconciliar a las familias a pesar de los conflictos que existen entre ellas.

Aborda temas como la soledad, los secretos de familia y la reconciliación. Me ha gustado especialmente la forma en que se han tratado estos temas, con un enfoque costumbrista y en clave de humor. La película logra transmitir ternura y pureza a través de los niños, quienes a pesar de los errores cometidos en el pasado por los adultos, mantienen una relación inocente y sincera.

En cuanto a la actuación y los personajes, destaco la interpretación de Gloria Muñoz y Elena Irureta como las dos hermanas enemistadas. Ambas actrices logran transmitir la tensión y el resentimiento que existe entre ellas de una forma muy realista. También me ha gustado mucho el papel de Trini y Milagros, las cuidadoras de los niños, quienes aportan mucho humor y frescura a la película.

En cuanto a la dirección, creo que Marta Díaz ha hecho un gran trabajo. La película está muy bien dirigida y logra mantener un equilibrio perfecto entre el drama y la comedia. La partitura y la cinematografía también son destacables, ya que logran crear una atmósfera muy adecuada para la historia que se cuenta.

Es una película que recomiendo ver. Aunque aborda temas profundos y dolorosos, lo hace de una forma muy amena y entretenida. La película logra transmitir un mensaje de esperanza y reconciliación que creo que es muy necesario en estos tiempos.

No hay nada malo en Los buenos modales.
Tampoco nada especialmente bueno o memorable.

La película de Marta Díaz (qué maravillosa explosión la de las directoras en nuestro cine los últimos años) es una comedia amable sobre dos hermanas enfrentadas durante décadas que se reencuentran debido a sus respectivos nietos, y en torno a esa premisa la directora reflexiona sobre lo bueno y lo no tan bueno de la familia, y sobre cómo siempre merecen la pena la reconciliación y las segundas oportunidades.

Correcta, sin más.

Lo me: Las actrices, sobre todo Elena Irureta y Gloria Muñoz.
Lo peor: Es lo que es. No esperen nada relevante y original.