Zipi y Zape y la isla del capitán

Otra película de la que no vi el trailer y ya van unas cuantas para así asegurarme de lo que veo sin ningún spoiler y que ningún momento sea chafado por algo que ya he visto y con el aliciente de la simpática y entretenida El club de la canica que antecede a esta historia repitiendo compositor y director pero no actores, he de decir que he disfrutado igualmente de ella siendo esta incluso algo más aventurera que la primera aunque más vergonzosa en cuanto a secundarios a excepción de una malvada y brillante Elena Anaya que resulta creíble en su personaje cosa que algunos de los chicos sobretodo a ese al que llaman Pinkfloyd (versión infantil del padre de los protas) se le nota forzado y muy sobreactuado tanto que saca de contexto cuando habla. Por lo demás, me gusta esos paralelismos a personajes conocidos de grandes obras literarias y como ensalza el valor de la familia y la amistad. No hay mucho más donde rascar porque tampoco hay mucho potencial así que cumple con lo establecido sin arriesgar y para evadirse poco más de hora y media. No le pidas peras al olmo porque ni los chavales son los Goonies ni pretenden serlo. Pasable.

Vuelve a entretener, pero me esperaba mas. Tenia ganas de verla con mi mujer e hijas. La verdad es que entretiene, la historia esta bien hecha, tiene buenos efectos pero al contrario que la primera no tiene sentido de humor o eso me pareció a mí. Mis hijas la disfrutaron, estaban intrigadas, emocionadas pero no las oí reírse prácticamente nada al contrario que la primera parte. De todas formas, entretenida y disfrutable en familia, pero inferior a la primera. Buena idea el meter a personajes históricos aventureros pan, sherlock, el hombre invisible. Un placer. Aventuras a la española, Disfrutadla.

Creí que Pipi representaba a "Pippi Longstocking"...
Me sorprendió el secreto de la señora Pam, nunca me lo imaginé.
Te hace ver 2 veces la película para comprenderlo todo mejor, pero no más de 2 veces.
Su anterior película: "Zippy y Zappe y el Club de la Canica (2013)" me pareció mucho mejor que ésta.
Porque la anterior película nos enseñaba un poco más: que podemos aprender jugando, divirtiendonos, y eso esta comprobado que es verdad; ésta película en cambio no nos deja casi nada, salvo una enseñanza implícita (del padre de los niños) que, si leyesemos más reconoceríamos a personajes (y autores) famosos, y sabríamos qué queremos hacer o quién queremos ser (eso nos enseña implicitamente la señora Pam que, después de leer cientas de novelas finalmente descubrió quién quería ser ella).
Esta película también trata de ser una réplica del orfanato anterior pero "en un país de nunca jamás", pero el hogar aquí no trae ningún misterio oculto como sí lo traía el orfanato de la anterior película.
Aquí el misterio tan solo están en unos pocos personajes y nada mas; es una isla entera y no tiene mucho que esconder o que contar.
La "moraleja" sería esa: "lee libros para descubrir qué o quién quieres ser", como la señora Pam, y así conseguirás realizar tus sueños.
Eso es lo mejor que puedo rescatar de esta película.

Tres años después nos ofrece Oskar Santos esta secuela quizás inesperada en su momento porque no se tenía clara la recepción que iba a tener, pero el tema es que funcionó y rindió en taquilla. Se estrenó cuando tenía que ser, en verano que tanto triunfan los cines de las playas. Así que se ha hecho igualmente este año. En esta ocasión el escenario tiene bastante de magia y menos de lógica, pero da rienda suelta a más imaginación.

La película conecta con el público al que está orientada. Que no es precisamente el habitual lector de los tebeos. Sino los niños, principalmente. Cualquier nostálgico debe de saber que aquí no hay ni rastro de los cómics de Escobar, aunque se agradece una nueva versión de Don Pantuflo y Doña Jaimita. Aunque siempre será recordado Joan Monleón como el Pantuflo perfecto. Aquí son bastante más sosos, pero su participación es más reducida. El peso lo llevan sin duda los niños, con cuatro protagonistas (entre ellos los hermanos Zipi y Zape) y cada uno con una personalidad distinta que arranca no pocas risas, entre mayores y pequeños. Las suficientes como para pasar un rato divertido. Y los chavales lo hacen bastante bien, sin ser ningunos expertos dada su edad pero encajando bien en la idea de la obra. Aunque también tenga su humor tonto.

Tiene buenos efectos especiales, muy apropiados en una película de aventuras y el argumento no está mal, aunque recuerda desde el principio a la obra anterior de El club de la canica. Demasiada copia de ésta en sus inicios, pero afortunadamente en el desarrollo se independiza y evita proseguir en el autoplagio. El resultado final es una película que merece la pena ver y que está a la altura de la anterior, con otros actores distintos.

Incluso mejor el trailer que la película. Voces dobladas, disfraces mal hechos y un argumento y time que incluso a los niños adormece. Muy anunciada en televisión, un comecocos para ir a verla y luego.... Decepción.