Dolls

Estamos ante una película de terror que ofrece escenas que, si bien hacen que resulte inadecuada para ser visionada por los niños, son ellos los que principalmente entenderían su mensaje, o más bien, a los que realmente importa el mismo.

Vista desde el punto de vista de un adulto, la película tiene buenos momentos, algunos muy conseguidos, otros menos, pero su mensaje queda postergado a una tercera clase en el almacén de la memoria.

Terror y gore infantil, sería la definición más adecuada, siendo como es, si bien no contradictoria, más bien incompatible. Digna de echar un rato.

Me encanta esta película, por fin he podido incluirla en mi estante. La atmosféra es genial, la estética y el doblaje te meten en la historia de lleno, sencilla y al grano. Hilarante y grotesca, del estilo de Puppet Master, anterior y me gusta más. Dolls, en España bajo el pseudonimo de La casa de los muñecos diabólicos, que no hace justicia, son muñecas. La moraleja muy buena; siempre deberíamos conservar ese espíritu de niños, de jugar y ser descubridores.

Stuart Gordon se hizo un nombre dentro del cine de terror con su inolvidable "Re-Animator" (1985) dos años antes de firmar "Dolls". El efecto de "Re-Animator" fue tan impactante, que esta cinta parece floja en comparación, pero por desgracia en realidad lo es en términos absolutos.

"Dolls" tiene una buena ambientación siniestra que acompaña muy bien a la historia y a las simpáticas muñequitas, los productos de la mente de un viejo fabricante de muñecos con síndrome de Peter Pan. Son obras de terror artesanal realmente inquietantes aunque los efectos especiales de este filme no llegan a la maestría que se alcanzó con "Re-Animator", por ello da la sensación de que Stuart Gordon podría haberlo hecho mejor.

Entretenimiento simplón para una noche entre semana.

No tenía ningún dato de esta película, ni había visto nada de Stuart Gordon, pero "Dolls" me ha gustado mucho. La historia, el argumento, son muy sólidos y sugerentes; hay momentos y escenas verdaderamente terroríficos, y lo único que puede objetarse o criticarse es el sentido moralista del relato, según el cual los buenos se salvan, y los malos son castigados por sus pecados. Claro que este sentido moralista es frecuente en el cine estadounidense de terror y fantasía.

Aún teniendo muy en cuenta sus debilidades, "Dolls" es una gran película, prácticamente una obra maestra, que gustará a quien le guste, por ejemplo, "Pesadilla diabólica" (Burnt Offerings, 1976), de Dan Curtis, otra gran película sobre una familia en una casa diabólica.

Por cierto, la sinopsis de la ficha de esta película debería corregirse, porque no es exactamente así como transcurre la acción.

Película de gran impacto en videoclubs. Tuvo relativo éxito entre los amantes principalmente de la serie B. A medio camino entre película de terror y cuento infantil para adultos, con moraleja de por medio. Imprescindible para los amantes del cine de muñecos diabólicos.