Haz click aquí para copiar la URL

El contable

Thriller. Drama. Acción Christian Wolff (Ben Affleck) tiene desde niño un leve autismo que le hace ser muy meticuloso con el orden y poco comunicativo, pero al mismo tiempo resulta ser un genio de las matemáticas. Hombre extremadamente tranquilo, obsesivo y con mucha más afinidad con los números que con las personas, lleva sin embargo una doble vida: como contable local con una pequeña oficina, y como contable 'freelance' de algunas de las organizaciones ... [+]
<< 1 2 3 4 10 19 >>
Críticas 93
Críticas ordenadas por utilidad
23 de octubre de 2016
48 de 72 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me gusta la idea de que le hayan dado poca nota a la película y creo que ocurre con todos esos films que pocos entienden.
Me encanta que hayan mezclado la aburrida profesión de contable con la de mercenario del blanqueo de dinero y además con alguien autista. Tal vez porque no sólo es una idea nueva sino que además es algo que dá mucho juego. Es genial en muchos aspectos.
Pues bien, me voy al spoiler:
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Tierramedia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
22 de octubre de 2016
28 de 42 usuarios han encontrado esta crítica útil
“El contable” se podría enmarcar dentro de ese género de cine de acción “serio” al que pertenece por ejemplo “The Equalizer (El protector)”, de Antoine Fuqua, que a su vez bebía de la serie de televisión “El justiciero”. “El contable” también toma prestado de muchos films, si ignoramos las series que también inspiraron esas películas. Y es que parece que Hollywood ha decidido cambiar la fachada de sus películas de acción quedando atrás los productos simplemente mamporreros de Steven Segal o Stallone, por ejemplo, para ambicionar darles un barniz de “profundidad”, presentando héroes de muy buen corazón, con sus traumas y manías y con mala leche controlada que emplean solo contra seres malvados, ya que saben de todo, además de ser perfectos tiradores o luchadores, más que olímpicos.
Por eso decíamos cine de acción “serio” entre comillas, porque parece que el giro patatero dado a Bond en “Skyfall” abre una puerta definitivamente al género, mostrándonos que hay nuevos héroes que son más profundos de lo que parecen a priori. Ya no son como Charles Bronson o Vin Diesel en muchos de sus papeles donde buscaban venganza porque se han cargado a un ser querido, son más inteligentes, tienen “una psicología”, siguen reuniendo cualidades testosterónicas, como tener los huevos muy gordos, además de tener un bagaje cultural, en este caso pictórico, y mucha modestia, mucha humildad, más propias de monjes de convento. Ellos no pretenden ascender al poder, ni ser ricos o famosos, no necesitan el reconocimiento mediático aunque obtienen el de sus adversarios, solamente pretenden seguir haciendo el bien desde la sombra y de manera desinteresada, como llaneros solitarios con espíritu de Robin Hood.
Lo malo de “El contable” es que en su guión las pretensiones se multiplican, y además tener un nuevo héroe con estas condiciones, todo se ha aliñado con demasiadas supuestas sorpresas de guión, utilizando incluso reminiscencias shakespearianas, tomándose muy en serio, cuando la reacción de parte del público delata que le deberían haber echado más humor y menos dramatismo, que lo que provoca a fin de cuentas no son grandes interpretaciones o reflexiones en el espectador, si no “postureo”, y mostrando más las costuras con las que ha sido confeccionado que haber conseguido un logro en sí.
Su ritmo se resiente, sobre todo en la acción, que a veces se ralentiza, para dar paso a escenas “explicativas”, sean dialogadas o en “flashbacks”. Y el remate es que su protagonista, Christian, además padezca del síndrome de Asperger. No hay cosa peor que contar verdades a medias, aunque quizás este detalle facilite su familiaridad por parte del gran público que desconozca este trastorno relacionado con el autismo. A saber si este film en un futuro incluso hará una bonita labor social.
Pero bueno, obviando sobre todo su epílogo, “El contable” no irrita, es de esa clase de producciones taquilleras de usar y tirar, aunque vayan a convertirse en franquicia, como “The Equalizer (El protector)” que ya cuenta con secuela. Todo en ella, desde su dirección a su montaje, es meramente rutinario porque no se oculta que se trate de un film destinado a un público abiertamente palomitero, por más que el producto se haya adobado. Sus actores recurren a sus resortes personales para resolver los personajes, sobre todo en el caso de J. K. Simmons, que es lo que se espera de él, o de Jon Bernthal, que en algunos planos nos recuerda a Miguel Ángel Silvestre, incluso en su eficacia. Affleck, más comedido de lo habitual, compone un personaje al que le importa caer mejor que ser verosímil, cosa que al parecer logra.
Quizás lo que más me haya llamado la atención, a parte de su buen trabajo de sonido, sea la banda sonora del incombustible Mark Isham, autor de muchas bandas sonoras, algunas inolvidables, como sus trabajos para Rudolph, en especial la exquisita “Los modernos”, “Nell” o la oscarizada “Crash” de Haggis. En esta ocasión combina varias líneas de estilos, incluso hay acordes que nos recuerdan a Pink Floyd con excelentes trabajos de cuerda. Ha sido lo más grato de una película que podrá contar con el apoyo del gran público pero que, personalmente, a mí no me ha dejado huella.
Maggie Smee
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de noviembre de 2016
20 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gavin O'connor se marca un espléndido thriller. Sí, es brillante, con un principio más bien lento, pero que a lo largo del film nos mete en situación y vas comprendiendo al personaje .Wolff (Affleck), un hombre con un duro pasado y que ha aprendido por las malas a sobrellevar su problema y su existencia en general; un genio de los números, de la lucha y de las armas; hombre tranquilo y con su propia ética de lo que está bien y de lo que está mal; leal a lo que el considera bueno o buenas personas. Un personaje carismático, que indaga en ese extraño mundo de los distintos autismos y nos hace reflexionar en si realmente ellos no saben expresarse porque no tienen capacidad o es que nosotros no sabemos entenderlos. Lejos de ser aburrida o predecible, para mí ha sido una grata sorpresa. Acción, tensión, humor, un poco de todo para pasar un buen rato. Ben Affleck está correcto, como siempre, no es el mejor actor del mundo, pero él mismo es un genio en elegir películas que sorprenden. Anna Kendrick me encanta, como siempre, al contrario que Ben Affleck, que no tiene mucha expresividad, Kendrick sabes lo que piensa con sólo mirarla, no le hace falta hablar. Buena música y buena fotografía que en conjunto han hecho que sean dos horas entretenidas y que volvería a repetir.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Teresa
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de octubre de 2016
13 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
-Entretenida y sorprendente mezcla de géneros que va cambiando desde una excelente primera mitad, hacia el tópico y la incoherencia de la segunda.
-Gavin O´Connor se toma muy en serio al personaje principal y construye una película mucho más sólida de lo que parecía posible. Affleck demuestra de nuevo que sabe actuar.

Gavin O´Connor es un director al que le hay que mantener la vista encima siempre. Lo último que vimos con su nombre fue “Jane Got a Gun”, una cinta que sacó adelante tras marcharse su director inicial a raíz de una problemática preproducción. Antes de eso, O´Connor entregó su mejor película, “Warrior”, una joya infravalorada que aún no ha llegado a España, ni llegará. Ahora nos trae un thriller dramático sobre un hombre autista de ambiguo código ético, que lleva las cuentas de los mayores criminales del mundo y que también posee unas habilidades militares cuanto menos sobrenaturales. El director vuelve a tratar el tema de la familia como ha hecho en casi toda su filmografía, y en esta ocasión va un poco más allá, pues un tema como el autismo le toca muy de cerca ya que su hijo padece el “trastorno”. O´Connor aleja del autismo el término “enfermedad” y lo convierte en un conjunto de habilidades sobrehumanas; una decisión -inicialmente- encantadora y llamativa, que acaba convirtiéndose en un arma de doble filo. Pero bueno, vamos a empezar como se debe empezar. El guion corre a cargo de Bill Dubuque (“El juez”) y el reparto encabezado por Ben Affleck, lo completan unos secundarios de lujo, como por ejemplo: Anna Kendrick, J.K. Simmons, Jon Bernthal, John Lithgow y Jeffrey Tambor. Veamos a continuación qué nos ha traído Gavin O´Connor en esta ocasión.
La película tiene una premisa sumamente interesante y aunque algunos de sus elementos pueden parecer absurdos, el director consigue soldarlos todos otorgándole al conjunto credibilidad, atractivo y una magnífica extrañeza. El universo del personaje principal toma forma a la vez que lo va haciendo el propio personaje, las analepsis ayudan a conocer su pasado y la evolución del panorama familiar en el que creció (muy semejante al planteado en “Warrior”). A pesar de los flashbacks y las subtramas intermitentes con la trama principal, O´Connor logra un ritmo extremadamente sólido y que no decae nunca. No obstante, los espectadores podrían irritarse debido al empeño de la trama en no dar suficiente información e intentar ocultar elementos que simplemente hacen cojear una narración bastante pobre. Una narración en la que la trama criminal no importa demasiado, y con subtramas innecesarias con el único objetivo de dar cohesión mediante sobrexplicaciones. Los personajes secundarios tampoco sirven de nada más allá de su función como estereotipos engranados. Se salva el de Anna Kendrick, alejado del típico interés romántico, y el de J.K. Simmons gracias a una breve conexión con el protagonista, en la que el actor brinda una interpretación asombrosa a lo largo de un plano brillante de O´Connor.
Las escenas entre Kendrick y Affleck son de lo mejor que encontramos en la película, hay química entre los dos y resultan divertidas. Affleck vuelve a demostrar aquí que es un actor con habilidades, y más importante, sus otras facetas le hacen entender la importancia de favorecer al personaje por encima del resto de aspectos. Por otro lado, aunque el personaje se mueve en una franja de matices morales muy interesantes, O´Connor prefiere excusar a su personaje inclinando la balanza hacia el superhéroe en lugar del antihéroe. Lo que queda claro con el paso de los minutos, es que “El contable” funciona mejor como drama sobre su interesante personaje y su intrincada mente, que como thriller de acción empeñado en sorprender al espectador mediante una docena de giros de guion absurdos. Por desgracia los tramos finales siempre se le han dado un poco mal al director, con esa irrisoria pelea de bar en “Pride and Glory” y esa horrorosa escena final de “Jane Got a Gun”. En esta ocasión la cinta se desvía hacia la acción pura y dura de manual, después de un bloque de giros y explicaciones en un ratio de tolerabilidad entre cogidas con pinzas e incoherentes. El desenlace, casi todo lo fácil que podía ser.
Gavin O´Connor sorprende con una película que apunta siempre hacia direcciones interesantes como curioso thriller económico y en especial como estudio de un personaje complejo, contradictorio y fascinante. Lamentablemente la torpe narración, los obvios elementos de la misma y su desvío hacia el cine de acción aburrido; desinflan las virtudes de la trama. Hay escenas excelentes y el reparto funciona muy bien, pero el paso del tiempo la recibirá como un singular entretenimiento pop, cuando podía haber sido un denso thriller dramático de notables resultados.
ALESNAKE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de octubre de 2016
12 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gavin O'Connor dirige una película de acción que además aborda el autismo desde una perspectiva muy humana. Se explica a las mil maravillas la enfermedad; sus problemas y sus consecuencias. Asimismo se entrelazan escenas de acción formando una mezcla que aunque pega, no tiene un dinamismo con el que se evite caer en cierta pesadez en algunos momentos.

Ben Affleck demuestra nuevamente que la madurez la ha sentado bien, y su actuación está a la altura de sus papeles en 'Perdida' o 'Batman v Superman'. Su inexpresividad le va como anillo al dedo a un papel en el que interpreta a un hombre al que le cuesta relacionarse y expresar sus sentimientos debido a su enfermedad. La película va de mas a menos pero él consigue mantener el nivel.

Los diálogos son correctos, incluso acompañan acertadamente a las escenas más personales o delicadas de la historia. Por otro lado, las escenas de acción están bien rodadas al plasmar las habilidades del protagonista.

Es un conjunto de buenas decisiones amparada por buenas actuaciones, que lamentablemente pierde algo de fuelle por el camino.
rad
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 19 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow