Barbara

Dentro del panorama de la chanson, poblado de hombres (Aznavour, Brassens, Brel, Ferré, Gainsbourg, Moustaki et altri), Barbara es un extraño fenómeno, una mujer que empieza cantando a sus ídolos y acaba convertida en un mito a su altura. Obviando el caso de Édith Piaf, se trata de una excepción. Barbara consiguió todos los galardones habidos y por haber, sedujo a multitudes, tocó el cine y el teatro, amó y conoció a hombres ilustres, y es imposible escuchar su voz sin que una fibra se rompa en tu interior. Poco conocida, y escuchada, en España, gozó de una breve popularidad gracias a la versión de L'aigle noir interpretada por Maria del Mar Bonet.
Mathieu Amalric, un actor inquieto, también ha seguido una carrera de director no exenta de interés. Su aproximación a Barbara, la persona, no deja de ser original. Un director de cine (el propio Amalric) quiere rodar un biopic sobre la cantante. Su actriz se mete en la piel de su personaje (asombrosa interpretación/transformación de Jeanne Balibar), hasta que los límites empiezan a disiparse y, como cantaba Moustaki, "Je ne sais pas où tu commences, tu ne sais pas où je finis". Es la historia de una doble obsesión: la del director por Barbara, y la de la actriz, Brigitte, por Barbara. Hay que seguir con atención el discurso de la película, porque es fácil perderse entre los efectos espejo que abundan a lo largo de todo el metraje. Tal vez forzado en algún momento, el sistema ideado por Amalric para abordar una personalidad tan rica y compleja se sostiene por el empeño del director y guionista en sacar adelante su proyecto. Las canciones, fotografías, documentales y demás información sobre la cantante se van engarzando en la trama con la mayor naturalidad, lejos del postureo de otros biopics (estoy pensando en Bohemian Rhapsody, por ejemplo). Al menos, no queda otro remedio que aplaudir la osadía de Amalric a la hora de rendir homenaje a un icono nacional.
Por supuesto, imprescindible para los amantes de la chanson. No es redonda, pero merece la pena el visionado.

En los últimos años están llegando una gran cantidad de películas francesas a los cines españoles, ya que es una cinematografía bien vista por el público medio, y que tienen unos intérpretes reconocidos por esos espectadores y por los más cinéfilos, pero sobre todo porque son propuestas sencillas, que abordan asuntos que interesan a la gente y bastante amables, pese a que en sus arranques tratan temas de aparenta dureza social. Pero siempre hay excepciones, y una de ellas es el nuevo trabajo como director del actor Mathieu Amalric, que van dirigida a un público que busca experiencias diferentes, por ser poco convencional a nivel formal y narrativa. El cine del ganador de 3 premios César por sus trabajos interpretativos gusta bastante en Cannes, y ese reconocimiento en su tierra provoca un reconocimiento en cadena del resto de festivales, que están deseando proyectar películas francesas para dar caché a sus diferentes secciones, y mucho más si se han proyectado en el festival más prestigioso del mundo. No he visto las primeras películas dirigidas por Amalric, y no conecté para nada con sus dos anteriores, " Tournée ( 2010 ) ", nominado a 7 premios César incluyendo el de mejor película y ganador de 2 premios en Cannes 2010 ( dirección y el Fipresci ) y " La habitación azul ( 2014 ) " ( presentada en Cannes, en esta ocasión en Un Certain Regard y candidato al César al mejor guión ). Esas dos películas tienen bastantes elementos en común, que en otras ocasiones si consigo conectar cuando los proyectos me interesan, como son sus momentos oníricos y ser demasiado repetitivo a nivel visual y a la hora de presentar los personajes.

En esta ocasión su nuevo proyecto se presentó en el festival de Cannes de 2017, y tuvo el honor de ser la cinta inaugural de la sección Un Certain Regard, recibiendo el premio a la poesía en el cine. En España se estrenó en el pasado festival de Sevilla, en donde Amalrric fue premiado como el mejor director de la sección oficial. En los pasados César obtuvo 9 nominaciones ganando los de mejor actriz y sonido, en los dos apartados más destacados de la película.
La película es una historia dramática, no un Biopic como se intenta vender desde la productora y distribuidora, que se sitúa en el rodaje de una película sobre la vida de la cantante Barbara ( esa otra película sí está más cercana a una película de tono biográfico ), en donde Amalric es Yves Zand, curiosamente también el director de esa otra película, y el personaje de Brigitte, que tiene que dar vida a esa cantante tan popular en Francia y desconocida en otras partes del mundo, lo saca adelante de manera excelente Jeanne Balibar, la actriz y cantante que fue esposa de Amalric durante 7 años. La protagonista se llevó el premio César por su trabajo en esta película, y logra hacer creíble su personaje tanto en las escenas de la vida real como en las del rodaje de ese otro largometraje.
Ella es toda la película y se nota que tiene experiencia en su faceta como artista, tocando el piano y cantando los temas más populares de la parisina nacida en 1930 y que tuvo su época de gloria en las décadas de los 60 y 70 del siglo XX.

El problema es que la película no está bien narrada, a diferencia de " Cosas de la edad ( 2017 ) ", otra cinta francesa de cine dentro del cine estrenada el mismo día que esta película, y sus poco más de 90 minutos se hacen interminables, resultando soporífera y con muchas escenas en donde se enfoca muy de cerca a los personajes de manera innecesaria, lo que aplaudo en otras películas cuando aportan algo a la trama. No me parecen buenas ni la dirección de Amalric ni la fotografía de Christophe Beaucarne, y del reparto tampoco salvo a nadie, salvo a Balibar, que sí está magnífica en su papel lleno de matices.
La película no es fácil de recomendar, y veo difícil que guste al público medio, y tampoco creo que salgan contentos los que acudan a la proyección pensando que van a ver un Biopic de un personaje del que les interesa conocer lo fundamental de su vida personal y profesional, ya que después de ver la película no sabemos casi nada acerca de esa cantante francesa. Es una película de extremos, y gustará a los que buscan un cine diferente y arriesgado a nivel formal, y diferente a los proyectos tan convencionales que tienen tanto éxito en los cines españoles y franceses.

LO MEJOR: La actuación de Jeanne Balibar. Las canciones.
LO PEOR: La fotografía. El montaje.

Pueden leer esta crítica con imágenes y contenidos adicionales en: http://www.filmdreams.net y http://habladecine.com

Amalric se toma todas las licencias para pulir su pretenciosa película. ¿Dónde está la emoción en un producto cuya narración, incomprensible, no existe? Aún me sigo preguntando por qué utiliza ese intercalado en las imágenes, Amalric propone una "rareza" en el peor sentido de la palabra. No nos cuenta nada de la historia de la cantante para que podamos comprender mejor sus letras e interpretaciones. Aunque son películas muy diferentes, "La vida en rosa" sí posee ese binomio vida-obra, la comprensión de una implica el entendimiento de la otra. Pero aquí solo encontramos un experimento, ni siquiera bello en su forma. Una película absurda que desea ser moderna, pero que solo es olvidable.

No conocía a la cantante a la que se dedica esta especie de biopic.
Me ha parecido un auténtico ladrillo. Pesada y aburrida son los dos adjetivos que vienen a la mente al recordarla.
Sólo la recomiendo a los que conociesen a la artista, a ver si ellos sacan otra conclusión.