Buda explotó por vergüenza

Los temas que se abordan en el celuloide, son muy humanos, con argumentos no fáciles, pero que sirven como punto de partida de lecciones a imitar. El respeto a los niños, a lo que piensan, lo que sueñan y, sobre todo, a su gran capacidad para comprender e interpretar el mundo.

El cine sirve de base para la labor de educar también y en algunos casos, imitar. Historias de niños además, que sirven al adulto. En este sentido, uno y clave en el film pero que negamos. Es que no nos debe gustar “jugar a la guerra”.

Respecto a los aspectos estrictamente cinematográficos, impresiona que una cineasta de 18 años, logre con su cámara, trascender más allá de lo que supone el campo y contra campo en el sentido de las oraciones cinematográficas (entienda mi licencia poética). De pronto en la sencillez está su grandeza.

Gonzalo Restrepo Sánchez (Film critic, Barranquilla, Colombia)

Eso es lo que muestra la película, y lo hace de forma magistral, impecable.
Quizás es un poco lenta y repetitva en algunos momentos, lo que pienso que está justificado, porque seguramente sea con la intención de que el espectador pueda entrar y ponerse lo máximo posible en la situación y el entorno en que vive la pequeña protagonista.

No niego que sea una película realmente impactante y bien hecha. Seguro que en el año 2007 esta era la vida cotidiana en Afganistán, país que actualmente ha desaparecido de nuestros noticieros. Pero como película actual realmente NO APORTA NADA. Sólo unas raciones más de "pornomiseria" cuando en el tiempo que nos ocupa (2020) en ese país el acceso a la electricidad es de un sorprendente 98% (Sí, sí, son datos reales del Banco Mundial). Total, que a día de hoy vale como documento sociológico de lo mal que se vivía en Afganistán antes del año 2013. Sin embargo no es la mejor opción para descubrir ese país en la actualidad.

En resumen, hoy en día la protagonista sería estadounidense o del sur de Europa.

Quizás sea lo malo de ir con pretensiones a ver una película, me habían hablado tan bien de ella que me he sentido un poco decepcionada.
En vez de una película me ha parecido un capítulo de Heidi en sus peores momentos, eso sí que conste que yo era fan de Heidi, por eso me ha resultado interesante. La veo muy infantil y exagerada, no me transmitió naturalidad, quizás si hubiese sido una obra de teatro en vez de un film me hubiese quedado más convencida.