Erik el vikingo

Creo que pese a lo anticuada que está y a los efectos especiales algo chapuceros estamos delante de una gran historia.

Se trata de una aventura de vikingos en clave de humor, y pese a que tiene sus fallos tiene otras muchas virtudes, como la vestimenta, los escenarios, escenas de humor y un peculiar homenaje a la cultura nórdica (todo lo referente al Ragnarok, y algunos nombres de dioses).

Escenas que permanecen en la memoria como la de la entrada en el Ragnarok a bordo del barco vikingo... totalmente recomendable.

Entretenida y a ratos divertida película de aventuras de bajo presupuesto, en el que se nos mezclan la mitología escandinava con La Odisea. Pese a contar con casi todos los miembros de Monthy Phyton, no es ésta una de sus típicas películas y su surrealista e irreverente humor se nos brinda a pequeñas ráfagas, por lo que para los más fervientes seguidores del grupo británico puede ser una decepción. A destacar el personaje del cura cristiano, cuyo escepticismo llega a ser lo más brillante e importante de la película.
Recomendable para, como dijo el amigo Txarly, pasar una tarde entretenida, pero si esperar demasiado.

Uno de los integrantes de los Monty Python, Terry Jones dirige esta película que no forma parte del conjunto global de la obra del grupo, sino que se sitúa entre las actividades, por así llamarlas, "laterales" de los miembros de tan insigne pandilla. Aquí el protagonismo recae sobre un jovencísimo Tim Robbins en el papel de Erik, un vikingo que se embarca en una inverosímil aventura, la cual empieza bastante bien (los primeros veinte minutos son puro Monty Python) y deriva en un maremágnum de surrealista inconsecuencia que renuncio a tratar de explicar, en primer lugar, porque cometería solemne acto de spoiler y en segundo, porque a día de hoy y después de haber visto la peli tres o cuatro veces, todavía no he acabado de entenderlo.

Si se es fan del humor del combo inglés, hay perlitas apreciables como el cachondeo de los tópicos vikingos -el Valhalla, el Ragnarok, la fama de saqueadores y violadores, etc...- pero para los neófitos no constituye de ninguna manera una iniciación recomendable al mundo Python, de modo que pueden abstenerse tranquilamente y dedicarse a visionar otras obras muy superiores como "La vida de Brian".

Uno de los grandes, Terry Jones, nos dejó hace apenas un par de meses y era mi responsabilidad cinéfila ofrecerle mi homenaje personal. Las circunstancias actuales no son como para echar unas risas precisamente, mientras unos estamos confinados en casa con un bombardeo de información insano los hospitales andan saturados y colapsados. La tristeza puede ocuparlo todo en cuestión de horas, y es por ello que he querido meterle mano a "Erik el vikingo", sin muchas ganas la verdad, pero con la esperanza de recibir lo que creo que necesitaba. Y así ha sido.

No hay duda que ante estados de debilidad interior lo mejor es el humor, nada como unas risas, nada como evadirnos de la mierda de realidad que nos toca vivir hoy y nada mejor que esta locura de viaje de unos vikingos comandados por un Tim Robbins espectacular, subidos a su barco, con una actitud desconcertante, con un humor surrealista que tiene algún altibajo pero que tan necesario es. La presentación, la manera de empezar la película, es un diez. Lo mejor que he visto en mucho tiempo, una barbaridad.

Es cierto que los efectos son algo chabacanos y más que rechinar directamente son un desastre; sin embargo sospecho que hay mucha premeditación en esa dejadez porque lo más importante es llegar al Valhalla y descubrir la realidad del misticismo vikingo. Ver "Erik el vikingo" ha sido una gran manera de usar el confinamiento forzado de hoy, a saber mañana, mierda de incertidumbre, ojalá los días que quedan por delante tenga la suerte de encontrar alguna película tan buena de vez en cuando.

Contra la depresión Terry Jones, contra el coronavirus Terry Jones...

Una gran comedia sardónica, dirigida por uno de los Monty Python. Incluso diría que está por encima de algunas comedias dirigidas por Terry Gilliam. Mantiene el humor y al mismo tiempo la aventura en un alucinante viaje a través de la mitología nórdica. Seguramente se podría criticar del guión que es un poco disparatado y está demasiado basado en golpes de fortuna, pero bueno, es el estilo de los Python. La cinta está llena de situaciones de humor inteligente. No sé si algún experto podría decir que aquí hay muchos estereotipos de la Edad Media pero se muestran contradicciones, situaciones de malos entendidos que te hacen pensar sobre determinados aspectos de esta época: por ejemplo, la incapacidad del misionero por ver lo que el resto de personajes ven, o la secuencia inicial de la "violación", donde se pone en crisis de la imagen tradicional del vikingo. No sé si esto es "friki", no sé muy bien lo que eso significa, yo creo que es sencillamente inteligencia y hacer pensar al público con humor. Vamos, lo que para mí es la definición de genialidad.