El emperador y el asesino

Es una magistral pieza del arte cinematográfico oriental, posee una excelente estructura argumentativa, tanto así que no se diluye aún cuando su narrativa ha sido segmentada en capítulos, los cuales van encajando a lo largo de la película uno tras otro, encajando perfectamente hasta llegar a la deducción, similar a un silogismo, contiene además un gran desarrollo de personajes, las actuaciones no son tal sino verderas encarnaciones de dichos personajes, observar con detenimiento al Emperador, la rudeza y la suma crueldad que expresa ante los demás, pero el gran miedo y dudas que siente en su interior, a Lady Shao y su amor hacia el Emperador y su fragilidad, al primer ministro y su lealtad antes que su vida, al enigmático acompañante de la Reina Madre, quien es menos taimado de lo que lo aparenta, un verdadero Maquiavelo y al atormentado espadachin quien funge de asesino, hastiado de sangre en su ostracismo, su fotografía no es menos que maravillosa, en suma cuenta es un filme hartamente recomendable y notable.

4: La Dama Zao.
Comienza la invasión sobre Yan, pero ahora, en lugar de querer unir a la gente de los dos reinos, el emperador de Yin desea aniquilar a todos sus habitantes, incluyendo los niños. La Dama, que está viviendo en Yan con el otro emperador intentando convencer al asesino del capítulo 2, del que se ha hecho muy amiga, no se cree el cambio en su amigo de la infancia, y cruza clandestinamente las líneas enemigas para tratar de convencerle de que recapacite. Parece que lo ha conseguido, pero luego el malvado emperador continúa con su plan, capturando a todos los niños de Yan en masa y enterrándolos vivos en fosas comunes para que se asfixien. Ante tan genocidio, la Dama consigue convencer al mercenario de que intente el asesinato.

5: El Emperador y el Asesino.
El enfrentamiento que se lleva preparando durante toda la película por fin tiene lugar, pero al final la Dama Zao no va a prevenir al emperador de quién es el asesino porque está completamente desencantada. La trampa tiene lugar, aunque el asesino no consigue matarle de un solo golpe, y comienza un duelo de espadas en un escenario épico. La batalla en sí no lo es tanto porque esencialmente consiste en el asesino persiguiendo por toda la sala al cobarde e indefenso emperador, que por un capricho inesperado del destino consigue vencer y herir de muerte a su atacante, de una forma un pelín anticlimática. En un epílogo, llega la Dama Zao rogando recuperar el cuerpo del mercenario para realizar un funeral en condiciones. En su último encuentro, el emperador le recuerda su promesa de unificar los 7 reinos y construir la Muralla China. Un texto final antes de los créditos nos informa de que efectivamente lo consiguió, y que muchos milenios después su cuerpo fue desenterrado, y junto con él los famosos guerreros de Terracota (de los que no ha habido mención alguna en el resto de la peli).

Mis conclusiones sobre la cinta:
No está del todo mal, pero es un pelín decepcionante. Insisto: No tengo ni idea de Historia Oriental, así que no puedo saber qué aspectos están basado en hechos reales y cuáles se tratan de licencias artísticas; supongo que gran parte se tratará de licencias artísticas o de rumores pasados de boca en boca a lo largo de los siglos, especialmente la trama del mercenario, que es el foco principal de esta cinta pero no me suena a precisión histórica, porque al final no resulta tener mayor relevancia en el gran esquema de las cosas.
Digo que resulta decepcionante porque en ningún momento llegamos a ver cómo se las arregla el emperador para acabar unificando los 7 reinos, ni cómo construye la Gran Muralla, ni si al final el pueblo está contento o enfadado por este giro de los acontecimientos. También habría sido interesante descubrir algo de las esculturas de los guerreros de Terracota, mencionados gratuitamente en el texto del final. Aparentemente nos podían haber contado un cuento muy épico y ya de paso darnos una clase de Historia, pero se han quedado simplemente en el cuento pseudo-épico sobre la rivalidad entre el emperador y un asesino que puede o no ser ficticio.
Además, el resultado de este enfrentamiento no pillará por sorpresa a quienes no sean tan ignorantes como yo y sepan algo sobre la vida de este Emperador, ya que aunque no conozcan al asesino, sabrán que era imposible que cumpliera su cometido sin torcer la Historia de la Muralla China.
Estos dos personajes y los actores que los interpretan son muy interesantes, así como también lo es la chica. Podían haberse ahorrado muchas cosas innecesarias, y en el mismo tiempo contarnos mucho más, pero no me arrepiento de haberla visto. Ha sido interesante que se prestase a un análisis así.