La ley de Brooklyn (Brooklyn Rules)

Es un tanto decepcionante ver como recurren a promocionar a Alec Baldwin por todas partes, haciendo creer en un papel protagonista por su parte (el primero del reparto, portada de la película). Creo que no llega a sumar cuatro minutos o cinco...

Por lo demás, no pasa del entretenimiento, habiendo momentos para no recordar... lo que mantiene el film es que el trío de amigos funciona muy bien.... aunque Freddie Prinze Jr. se debería quedar haciendo películas de segunda o tercera fila, es pura sobreactuación....

Mena Suvari pierde con los años???.... No os perdéis nada más que un gran mensaje final hablando de la amistad y, como perdura a lo largo de una vida....

Película de usar y tirar, que en sus cinco primeros minutos te hace pensar que vas a ver una película con inspiración en ‘Infiltrados’ o ‘Uno de los nuestros’, pero no va más allá. La película no termina de arrancar y la historia es bastante floja, por no decir mala o pésima. Lo único destacable de la película es Alec Baldwin (que apenas aparece 10 minutos), la escena de la carnicería y el mensaje de fondo sobre la amistad. Si esta historia la hubieran llevado Martin Scorsese y Nicholas Pileggi la historia habría cambiado, o no, porque ‘Uno de los nuestros’ se hizo 15 años antes.

Toda una sorpresa, una película de suspense que trata correctamente el tema de la mafia y la amistad en un barrio de Brooklyn. Uno de los repartos mejor formados, donde destaca un genial Baldwin reforzado tras "Infiltrados", en un papel hecho para el, a su lado actores también conocidos como Prinze Jr. en su mejor papel hasta la fecha, el hijo de James Cann, en otro papelon y Suvari y Sorvino. Narra como un grupo de amigos intenta sobrevivir a las adversidades entre revueltas de mafias y amores imposibles. Una magnífica película que la recomiendo, al igual que a mi me la recomendaron.

Advertencia si te dispones a ver esta película. Si te gustan las películas sobre la mafia NO TE VA A GUSTAR.
Aunque tenga una capa de pintura para clarificarla como película sobre la mafia nada más lejos de la realidad.
Es la típica historia de un grupo de amigos desde la infancia que intentan sobrevivir al barrio o irse del mismo.
Actores mediocres con la excepción de un Baldwin que el papel de mafioso le queda como anillo al dedo.
Como parte positiva es que se hace ligera gracias a la corta duración y a un argumento blando.

Una historia de Brooklyn sobre tres amigos de la infancia que pese a ser una historia muchas veces contada, tiene un gran guión.
Los tres deben aprender desde muy jóvenes las normas para sobrevivir en un barrio controlado por la mafia, saber estar, actuar y adaptarse ya que las calles no están exentas de peligro.

La película es correcta pero no posee nada fuera de lo corriente, la mayor parte de sus aspectos son mejorables y lo único que verdaderamente destaca es su guión, que incluso logra que varios de sus elementos estén por encima de lo habitual en ellos.

Cómo en la mayoría de historias sobre la mafia, Terence Winter, que ya había escrito en los Soprano y más tarde crearía Boardwalk Empire, el énfasis no está en la violencia, sino en el día a día, en la tragedia de la vida en la que se habla de muchas otras cosas, cotidianas y comunes a todos, en este caso de una de esas raras amistades para toda la vida, inmutables al paso del tiempo o a lo que pueda suceder.