Warlock, el brujo

Maravillosa caza de brujas genialmente guionizada por David Twohy. La historia te atrapa desde el primer momento y tuve la suerte de verla cuando salió en vídeo. Yo tenía 8 añitos y me la alquiló mi padre -nunca se lo agradeceré lo sufucinete-. El terror por Warlock (aún hoy me recorre un escalofrío al ver la portada clásica -no la que aquí aparece-) me duró años. Tengo dos iconos de terror muy marcados en mis miedos infantiles. Angus Scrimm haciendo de Hombre Alto en Phantasma y Julian Sands como Warlock. La vi años después y ya no me dio miedo, claro. Pero me evocó toda mi infancia y esos miedos tan maravillosos que viven ¿sólo? en la imaginación de un crío. Lo que más echo de menos con la edad es que esos miedos infantiles se fueron para siempre y ahora soy más realista. Pero siempre me quedará Warlock, su incansable cazador Redferne y esa genial Kassandra en un final antológico en medio de un cementerio.

Ésta es una buena opción de terror sobrenatural desplegado con mucha intensidad narrativa en las variantes.
Un brujo que viaja a tiempos modernos para una misión satánica, una joven de la actualidad que se involucra en su despiadado y destructivo plan, y un hombre de épocas antiguas que viene a dar un poco claridad e información para cazar al hechicero.
Tres personajes que sustentan en forma sólida un guión muy dinámico y enérgico. El ritmo narrativo es vibrante, además hay mucha magia negra, atractivos efectos especiales, una cuidadísima fotografía para recrear ambientes místicos y lúgubres, escenarios sagrados que sugieren y absorben, mucha oscuridad en la atmósfera, una opresiva y asfixiante banda sonora de Jerry Goldsmith con base electrónica… todo ello inevitablemente redunda en una inquietante aventura salvífica que no decae ni un segundo en su palpitante argumento.
Julian Sands compone un villano perverso y cruel, el cual no repara en nada con tal de lograr sus maquiavélicos planes. Un antagonista brillante.
Lori Singer y Richard E. Grant son los dos protagonistas que llevan el peso del filme y logran dos interpretaciones potables para lo que el entramado narrativo requiere.
La recomiendo con un 7, es una buena opción de terror sobre brujos y hechicerías macabras. Me trae las nostalgias propias de la época del VHS; me sobrevienen recuerdos de los trucajes y los efectos especiales característicos de ese período donde el terror se lo vivía de una manera más artesanal pero con mucha intensidad desde la agitación propia de esos relatos incesantes que combinan acción, suspense y horror sin necesidad de ser explícito en vísceras ni sangre.

Como la vi hace muchos años la he vuelto a ver y la verdad es que me sigue gustando, no ha envejecido, me parece un buen intento de cine fantástico serio, si hay algo que le echo en cara es que se me parece mucho a terminator pero la verdad es que está bien resuelta y la narración se sostiene a lo largo del filme. En el soporífero cine de hoy plagado de efectos 3d (sobre todo baratos ) sigue asomando la cabecita.

P.D. mejor no ver las secuelas, son infectas.

Película de fantasía-terror muy entretenida y con un gran guión. No es como el resto de las películas de terror de los 80 de ver y tirar. Muchos planos medios, narrando muy bien la acción. La banda sonora nos acompaña durante toda la película aportando dinamicidad. Años mas tarde, se grabo la segunda parte, y en el 2000, la tercera. La última, bajo mi punto de vista es una basura, y le quita el encanto a las dos primeras.
Un clásico que debes tener en tu videoteca.

Podríamos decir que es una película de terror, ciencia-ficción... pero podríamos hablar del subgénero de "brujería" . Totalmente recomendable para todo aquél que le guste la serie B de los 80. Es una película muy aceptable; contiene fallos que resultan hasta cómicos (algo habitual en este tipo de películas) , pero en general, todo está llevado con un guión bien estructurado y con un buen ritmo. Contiene pequeñas brisas de elementos documentados dentro de lo que es la temática de brujería.

Destaca su buenísima banda sonora. El gran Jerry Goldsmith hace que la película se engrandezca muchísimo y se generaren escenas de gran acción y tensión,-por poner un ejemplo: la recuperación de la pulsera de la "joven" en los vagones del tren-. Julian Sands y su rostro inquietante contribuyen también a dar ese toque especial.

He leído algunas críticas donde se hacía referencia a las similitudes con "Terminator"; tampoco es para tanto: hay viajes en el tiempo, hay cazador y cazado, hay una chica... aparte de esto, la película tiene suficiente sustancia y entidad propia.

Por último y a modo de consejo: no dejen de tener sal, martillo y clavos, para disfrutar de la película sin problemas ,-nunca se sabe el alcance de un brujo.