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El arte de estrangular (Art School Confidential)

Comedia Jerome Platz (Max Minghella), un joven artista de gran talento, se escapa del instituto para ir a una modesta escuela de arte de la Costa Este. Allí sueña con llegar a ser como Picasso, el artista más importante del mundo. Pero, por desgracia, la belleza y el valor artístico de los retratos de Jerome no son debidamente apreciados. (FILMAFFINITY)
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Críticas 16
Críticas ordenadas por utilidad
9 de noviembre de 2006
33 de 43 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta vez, el dúo Daniel Clowes & Terry Zwigoff no ha dado buenos frutos. Esta película tiene carencias muy serias a nivel de guión, y no resulta demasiado inspirada en los demás aspectos.

El comienzo es prometedor: se toma la llegada del nuevo alumno a Bellas Artes como un pretexto para hacer una crítica tan facilona como realista sobre los patéticos bohemillos de tres al cuarto que estudian en tal facultad. También se dan un par de repasos sobre el arte moderno, dejándote Clowes muy clara su opinión al respecto; aunque no deja de ser, otra vez, una crítica muy simple y que cualquiera podría escribir.

Pronto la película evoluciona por unos terrenos que no interesan a nadie. El protagonista tiene el carisma de una caja de galletas y no se aguanta tanto primer plano y tanta introspección. Su "romance" es tan gratuito como forzado. Mientras el público sólo quiere ver a más frikis de escuela de arte hacer sus cosas de frikis, Clowes introduce otra subtrama menos interesante si cabe: la de un asesino en serie, de identidad desconocida. Personajes secundarios aparecen y desaparecen sin orden ni concierto, como el de Anjelica Houston o el de Steve Buscemi.

En definitiva, Clowes se centra en lo que menos le interesa al espectador y aburre. Merece la pena por el primer acto, no obstante. Y tampoco es que sea mala.
KesheR
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2 de octubre de 2006
18 de 26 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tras llamar la atención de la crítica con la interesante "Ghost World" y bajar algo el listón con la muy ácida "Bad Santa" Zwigoff nos lleva ahora al universo de las escuelas de arte. Y de entrada, ya hay que decir, que uno de los valores de esta película está en que, siendo básicamente una comedia, no renuncia a la reflexión, al drama ocasional y a toda una suerte de percepciones que comunican directamente con el mundo que retrata. Así, y también es un punto a su favor, la historia no deambula por senderos fáciles ni tan siquiera previsibles (aunque alguno haya) sino que sorprende básicamente en su parte final. Max Minghella (hijo del gran realizador Anthony Minghella) realiza un gran trabajo entre la jungla de tarados "artistas", y allí están John Malkovich, un corto papel de Anjelica Huston , otro de Steve Buscemi y un apocalíptico y abandonado Jim Broadbent bordando su papel. En general huye de los tópicos y consigue un film amable e inteligente, aspectos ambos que no suelen ir juntos demasiado en el género cómico estadounidense.
Vargtimmen
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25 de septiembre de 2006
19 de 30 usuarios han encontrado esta crítica útil
El señor Zwigoff promete. Tras su genial Ghost World aqui nos llega más de lo mismo, pero esta vez con personaje masculino que ingresa en una especie de facultad de arte. Mas allá de la historia resaltaremos los buenos modos del director, muy en la onda del nuevo cine independiente Estadounidense. La película poco a poco va perdiendo expresividad y deja de tener un estilo personal. Se desinfla al mismo tiempo que su personaje protagonista, si no fuera por eso podría ser de lo mejor del año (par a mi pretencioso juicio)

Un Saludo
mijack
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11 de febrero de 2007
11 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
La nueva colaboración entre Terry Zwigoff y Daniel Clowes, utilizando la materia prima de éste último en forma de ingeniosas viñetas, no encuentra los resultados con lo que sorprendieron en la a ratos estupenda y siempre más que interesante “Ghost World”.

Su problema es trasladar el universo de Clowes al celuloide con actores reales, como ha sido el aprieto de los traductores en ‘castellanizar’ “Art School Confidential”. Pero su principal inconveniente es encontrar un tono general ante la unión de diferentes condimentos, tramas y géneros: por un lado la comedia romántica adolescente y estudiantil en plan “American pie” indie, por otro el thriller que depara los asesinatos que comete un estrangulador y finalmente la crítica humorística al mundo del arte moderno y los freaks que perpetran sus atrocidades artísticas buscando un reconocimiento.

Meter todo el anterior desaguisado en unas viñetas puede ser tan complicado como funcionar a la perfección, pero en pantalla no acaba de cuajar en ningún momento hasta que en su desenlace Zwigoff combina los elementos para conseguir un final tan inédito como bressoniano.
Es lo mejor de “El arte de estrangular” y pese a su irregularidad resulta entretenida con ramalazos divertidos.
Maldito Bastardo
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28 de mayo de 2009
8 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Terry Zwigoff incide en la crítica al mundo del arte que ya bosquejó en Ghost World, adaptando de nuevo un cómic de Daniel Clowes, que es un estupendo y ácido retrato de todo lo que gira alrededor de una escuela de arte. La película mantiene ese retrato, pero centrándose más en la frustración del verdadero artista y en su esfuerzo no reconocido. Las ilusiones que Jerome, un joven estudiante con potencial artístico orientado a la pintura, deposita en una escuela de arte, caerán en saco roto al comprobar la clase de personas que por ahí pululan: un mar de modernos, gafapastas y pedantes de todo tipo.

Las escenas de las clases impartidas por John Malkovich resultan especialmente reveladoras. Puede verse un trozo de goma pegado en un cartón y defendido por su autor con palabrería vacía. No hay inquietudes plasmadas, todo es falso. Por eso conmueve la escena en la que Audrey, el amor platónico de Jerome, busca entre la basura de un contenedor un resquicio de autenticidad, de lo que debieron buscar el resto de estudiantes: el retrato que le hizo Jerome. La presencia de este amor platónico es necesaria para empatizar con el protagonista y evitar la sensación de monotematismo, así como la incursión de un estrangulador que redondea el mensaje final del film (explicado en el cuarto párrafo). Lo digo por comentarios que he leído en los que se decía que no venía a cuento.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Cinematic
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