La telaraña

Primera película que veo del cineasta Antoni Verdaguer nacido en la ciudad de Tarrasa en 1954. Esta Teranyina o telaraña basada en la novela del catedrático Jaume Cabré Fabre y adaptada por Jaume Fuster, nos cuenta la historia de la familia Rigau, ricos industriales del Textil Catalán y el conflicto con sus obreros, accionistas, miembros de la familia y comunes visitadores del lupanar. Enmarcada en los hechos ocurridos en la llamada Semana Trágica de Barcelona. La acción discurre en una ciudad próxima, en el verano de 1909, que bien podría ser la ciudad del director. La desastrosa guerra de Marruecos necesita de la logística textil catalana bajo el gobierno conservador presidido por Antonio Maura y los talleres de la familia Rigau suministran los uniformes y el pueblo la carne. El movimiento obrero y los anarquistas tejen otra tela de la misma telaraña donde el conflicto y la muerte tejen la escena. La ambición por el poder desencadena los acontecimientos, mientras la araña sigue tejiendo sin ser vista.
Hechos que propiciaron la caída de Antonio Maura, pero eso es otra película del mismo carrete.
Interesante propuesta de Cine político-Histórico- Social de Verdaguer, Ayudante de Dirección de Directores como Antoni Ribas, Eloy de la Iglesia, Ventura Pons, Antonio Drove o Francesco Rosi entre otros.
Quizá sea una de las películas Catalanas y Españolas mas destacadas del año 1990. El actor Jordi Dauder gano el premio Sant Jordi.
Saludos Cordiales.

El momento histórico en que se encuadra la acción es algo circunstancial. La turbulenta conflictividad en un ambiente industrial, donde la electrificación era todavía algo de ciencia ficción, las jornadas de trabajo abusivas y las prestaciones sociales inexistentes, era campo abonado para la radicalización y la lucha de clases. La trama no es nada maniquea. Hay, por parte de patronos y obreros, posicionamientos moderados y otros extremistas y anarquistas que dieron lugar a la semana trágica. Pero las circunstancias sociales no son el eje central. En realidad se trata de una intriga empresarial que es el escenario de una lucha por el poder entre socios. El accionista mayoritario y gerente de la empresa familiar es un auténtico villano, ex militar y cacique inmisericorde, hasta tal punto que hasta los copropietarios optan por su destitución. Sin embargo, ello sirve de base para urdir maquinaciones conspirativas para hacerse con el control de las acciones, con la complicidad y encubrimiento de notarios y abogados, formando un red de corrupción como la de una "telaraña". El film es muy ilustrativo de cómo era el trabajo, las fábricas, el mundo de los negocios, la legalidad y la política de la época. Muy buena la ambientación y el trabajo de los actores. El film merece la pena.

Nos movemos de la China de 1911 a la España de 1909. Yo pensaba que situándose en la Barcelona industrial de ese año de 1909, con el conflicto entre empresarios y trabajadores, lo que me iba a contar "La telaraña" iba a ser la Semana Trágica, esa rebelión abierta disfrazada de huelga general que causó alrededor de 137 muertos en la Ciudad Condal, además de otros desmanes. Sin embargo, sólo se la menciona de pasada, lo que no deja de ser decepcionante. Es como si estuviéramos en el París de 1789, en los ambientes revolucionarios, y no saliera nada de la Revolución Francesa.

Dicho esto, lo que tenemos es un relato que nace de una novela de Jaime Fuster, que se deja seguir, no está mal ambientado aunque la fotografía es demasiado oscura y el casting en algún caso concreto patino lo suyo. Cada vez que salía la Tineta (Montse Guallar) no podíamos dejar de decir, "pues vaya prostituta más fea que han puesto". Y se supone que todos los hombres pierden la cabeza por ella. Haber buscado una belleza, leche. Con todo, lo peor es el maniqueísmo tan de izquierdas de la película, los obreros son inocentes, idealistas y justicieros, los de arriba, unas auténticas víboras.