La isla

Basada en otra novela de Peter Benchley, autor de "Tiburón","Abismo","La bestia"...todas ellas relacionadas con el mar. En esa época el autor en pleno apogeo de ventas, debido a los éxitos recientes en la gran pantalla de "Tiburón"(Steven Spielberg,1975) y en menor medida "Abismo" (Peter Yates,1977), vendió otra novela más para el cine,”La isla”, una historia mezcla de aventuras, misterio y en parte ciencia-ficción.En aquellos tiempos el tema del Triangulo de las Bermudas estaba en plena ebullición, y la película de hecho se vendió, como un barco que se perdía en dicha zona…que de hecho era la misión del protagonista, que como reportero debía averiguar que sucedía en la zona. Una historia que una vez llevada a la gran pantalla, podía haber dado más de si. El afán de un padre por recuperar a su hijo en un mundo irreal, como es el hecho de que unos piratas del siglo XVIII estuviesen viviendo en la actualidad con las leyes de dos siglos atrás y sobreviviendo a base de los barcos que apresaban. Michael Caine, es el apesadumbrado padre, que hace un papel de lo más vulgar para su talla como actor. Pasa por encima de él sin problemas la actuación del siempre genial David Warner. En fin, film entretenido, pero desaprovechado, para la historia que manejaban el guionista y el director.

La verdad es que uno esperaba más de una adaptación de Peter Blenchey, el exitoso creador de TIBURÓN y otras aventuras marítimas modernas.

Bien es cierto que la historia es de entrada delirante: un periodista (Michael Caine) y su hijo, investigando una larga lista de desapariciones de barcos de recreo en el Caribe, acaban topándose y siendo capturados nada menos que por una banda de piratas salidos del siglo XVII. Ocurre que, de alguna manera, esa banda llevan ocultos en una isla ignota, ajenos al tiempo y a la civilización, desde hace trescientos años, generación tras generación, y, lo que es no menos increíble, sin que nadie se haya dado cuenta. Hay que decir que los componentes de este alegre y pintoresco grupo son especialmente sanguinarios, y asesinan a todas sus víctimas, exceptuando a algunos niños para educarlos en el noble arte de la piratería y de la matanza.

Misterio, terror, aventura, suspense, desasosiego, fantasía llevada al delirio, pesadilla, niños de por medio: todos estos elementos juntos, bien llevados, podían haber dado, obviando lo irreal de la trama (y quizás subrayando eso mismo) para una buena película. El escenario daba para eso (ese mar inmenso, vacío e inquietante donde todo puede pasar, esa isla siniestra, ese elenco de personajes salidos de un manicomio), el guión no está mal y tenía posibilidades, David Warner es una presencia perturbadora a la que se podía haber sacado bastante más jugo, y Michael Caine es un gran actor que vale lo mismo para un zurcido que para un fregado cuando está bien dirigido.

Y esa es la cuestión: la dirección es ágil y correcta, pero no tiene la garra, la inspiración y la fuerza que hubiera hecho falta, y una idea curiosa y atractiva se queda en una cinta del montón, con un argumento insólito para pasar el rato, pero nada más.

Es fácil despreciar este tipo de cine, con el consabido "qué tontería", o algo así, pero a mí siempre me ha gustado, salvo cuando ya es malo de verdad. Y, además, hay tonterías mucho mayores que pasan por arte, y llaman "genios" a sus autores, y les dan premios, y hasta hacen escuela, aunque suele ser más bien efímera. Se me ocurren algunos ejemplos.

Pero, hablando de este film "La isla", es una peripecia descansada de ver, la de esta secta secreta de piratas modernos que mantienen leyes de siglos anteriores, etc. Si se piensa, no es tan absurdo el asunto, y países muy pobres y atrasados han recuperado en tiempos recientes la piratería marítima, y con muy pocos medios les ha bastado para sembrar miedo en ciertas zonas. Dentro de una realización eficaz, este film cuenta, además, con Michael Caine y David Warner, excelentes todo-terreno, que no debían rechazar nada con tal, supongo, de que les pagaran su caché, y lo mismo se les ha podido ver casi siempre en producciones de prestigio como a veces en otras más "de pasatiempo", sin que "se les cayeran los anillos".

Esta película era ideal para una de aquellas "sesiones continuas" de cine de barrio, que en los años 1980s empezaron a entrar en decadencia sustituidas por los videoclubs de VHS y otras ofertas para el tiempo libre que antes no había. Recuerdo que para los cinéfilos o aficionados más exigentes que seguían yendo al cine, aunque ya había dejado de ser algo masivo como en décadas anteriores, surgieron también los "Cinestudios", que solían ofrecer repescas y programas de interés, aunque los pioneros databan ya de la segunda mitad de los 1970s, creo.

Es film es muy interesante, e inspirador, un grupo de piratas del siglo XVII, que han habitado en esa isla ignorando a la sociedad y al paso del tiempo.

Aunque hay escenas cómicas, como la del karateca que lucha con algunos piratas y uno se deshace de el, aunque por otro lado, este film deja de ser de terror, y se convierte en un film de aventura.

Digo que podremos sacar algunas ideas de los films viejos, ya que Piratas del Caribe esta mas que visto.

Película súper aburrida que de terror tiene lo que yo de gitano, o sea cero patatero. Micky —pa' los amigos— interpreta a un padre de familia que se lleva a su hijo al trabajo, al ir a una isla quedan allí atrapados y lo que sucede a continuación pues no lo voy a decir para no destripar pero a mí me resultó muy aburrido y con cero terror. Pensaba que iba a ser un slasher y al final resulta que no, que es más una de aventuras. Total, un tres de que más de la mitad vas a ver pero es aburrida y probablemetne no la termines.