Espejito espejito

A la espera de ver a Charlize Theron como pérfida y malvada reina en una nueva versión, nos llega esta revisión del clásico cuento con Julia Roberts como la mala de la película.

Se trata de una película bastante más blanca y para todos los públicos de lo que promete la otra, y podemos ver mucha más comedia que acción. Tras un comienzo animado que sirve como prólogo de lo que veremos a continuación, poco a poco la película va perdiendo fuelle llegando casi exausta al final. Le falta algo de ritmo y unos personajes con una personalidad más marcada, pero con lo que hacen les sobra y les basta cumpliendo las expectativas de espectadores que se ven recompensados con algunos simpáticos gags. Solamente escuchar palabras como catering, buffet o Napoleón (como nombre de uno de los enanos) nos hace pensar que estamos ante una historia un poco diferente.

Y como antítesis de Roberts, Blancanieves está interpretada por Collins, que deja el listón a media altura. Físicamente perfecta para el rol, su interpretación se queda algo escasa a pesar de que como transcurre la historia podría haber dado un poco más de sí. Luchadora y resuelta, poco tiene que ver con la clásica, pero le falta decisión.

No descubriríamos nada nuevo si contáramos el final de la historia, pero este final tiene algo de original no solo antes de los títulos de crédito, sino durante ellos, en los que conoceremos el final de algunos importantes personajes. Para todos los públicos.

Caótica y sin gracia podría describirse esta película. Parece que va a ser humorística desde el principio, pero va decayendo hasta hacer que termines preguntándote por qué pierdes tu tiempo viendo esta película.
Personalmente me considero muy muy fan de las películas infantiles, sobre todo de Disney, y Mirror, Mirror me llamó la atención desde que salió en el cine. Actuaba Julia Roberts y eso para mí era sinónimo de una buena película, de calidad... pero todos los actores tienen películas que no les pegan y esta es, sin duda, la peor película de Julia Roberts.

@lprietoesc

Mientras Renfe "me retiene" más de hora y media en la estación, veo en DVD la excéntrica comedia de fantasía "Blancanieves (mirror, mirror)", película de revisión del mito que, con unos suntuosos decorados, un espectacular vestuario y una perfecta Julia Roberts, constituye -sólo- un entretenimiento perfecto para ver con los/as niños/as en la sobremesa del domingo. Sobra el ridículo baile final de la protagonista al estilo de Bollywood.

Mis expectativas no eran altas, pero es que después de ver esta cosa todavía son más bajas.
Desde luego, lo único salvable de la película es el papel de Julia Roberts, que le da un toque cómico que ningún otro personaje consigue dar (más que gracia, dan pena), y algo entretiene.ç

Tanto en esta Blancanieves como en la de Rupert Sanders, el error principal ha sido la elección de las dos protagonistas: Lily Collins y Kristen Stewart. Ambas son dos piedras que todo el mismo tienen la misma expresión en sus caras (Lily es algo mejor) y que no aportan absolutamente nada a la película mas que dos caretos constantes. Y el resto del reparto ya ni os cuento…

La película, después de ver media hora, claramente resultó ser infantil / familiar, vamos, lo que no busco en el cine desde hace mucho, mucho tiempo.

La trama es aburridísima, está plagada de escenas tontas que no encajan de ninguna forma y que, en muchas ocasiones, pretenden ser graciosas o aportar un toque de comedia que se queda en el intento…

O sea que nos encontramos ante una película infantil, aburrida y tonta que podría haber dado mucho más de sí con un lavado de guión.

PD: Me costó verla acabar lo que nadie sabe. Miré la hora como treinta veces.

- Espejito, Espejito ¿Quien es la más bella del reino?
- La más bella del reino es Blancanieves... pero no te preocupes Charlize, que es la de la película de Julia Roberts.

Vayamos por partes. Probablemente en esta película Julia Roberts hace el peor papel de su carrera... lo cual es un tropiezo bastante gordo teniendo en cuenta que, inevitablemente, se la comparará con Charlize Theron en el mismo papel en "Blancanieves y la Leyenda del Cazador". El estilo de cuento que transmite en general los decorados, el vestuario, la fotografía, etc. no perjudica a la película pero si lo hace el continuo humor no ya infantil sino estúpido que destila el guión y que lo acercan a la autoparodia.

Sin embargo, si dejamos a un lado la parte de Julia Roberts, y muy a pesar de los chistes estúpidos y que reinventa el cuento, la parte de la trama que se centra en Blancanieves, es superior a la de la otra película principalmente porque la actriz protagonista, Lily Collins tiene una gracia y una expresividad de la cual la lánguida Kristen Stewart carece por completo. No solo eso, su físico es perfecto para el personaje remitiéndonos por su enorme parecido físico a la joven Jennifer Connelly de "Dentro del Laberinto" e incluso a veces, con un nosequé, a Audrey Hepburn. Simplemente perfecta.

Es muy triste que en la película de Charlize Theron ella hiciera inmejorable la parte de la reina mientras que el resto de la película flojeaba, entre otras cosas, de no tener una Blancanieves que diera la talla mientras aquí tenemos justo lo contrario. Y en vez de tener una muy buena película tenemos dos medias películas.

Por cierto, en esta película el Principe es Principe de Valencia...